Editorial Alaire

Sonríes a distancia
desde el otro lado de la calle
y te recibo alegre y silenciosa
como una gata en celo.

Me abrazas mientras cruzas el semáforo
y te conecto pronto con el centro
de todo lo que existe en la ciudad.

Tu risa es pasaporte a las estrellas
donde todo es un mundo de origami.
Las horas son de niebla.

Te miro sin rozarte mientas veo
tu energía sutil
en las aceras.

La urbe late al ritmo
de la nostalgia apátrida.

Abrimos nuestros labios con los pájaros
que vuelan en las tardes del estío
trayendo los sonidos desde el sur...


Ana Muela Sopeña

Qué hermoso, Ana. Hay una dulzura y una emoción etérea que atrapa y deja ilusión en el alma.

Felicitaciones y un beso grande.

Los aires del sur despiertan la emoción y la nostalgia y la inspiración se arregla con poner entre la belleza del lenguaje y la me´tafora de
manigestar todo el arte de que la poesía es capaz entonar desde la buena pluma.

Un abrazo

Un poema hermoso que deja un aroma de amor y dulzura. Me gustó.
Besos
Pilar

Querida Ana:
Este poema me ha encantado. Sin hipocresías ni adulaciones falsas: me ha encantado. Tus metáforas son originalísimas y la emoción sentimental está expresada de forma suave, dulce y elegante. Sigue escribiendo así para goce de todos, mío el primero.
Besos fuertes, querida amiga poeta.
Jerónimo

Ana
Un placer pasar esta noche por tus versos. Me ha gustado este poema con aire citadino del amor manifestado por la risa que se hace poema. Bello trabajo. Felicidades

Hermoso trabajo de Ana.

Hola Ana.

Dulce y hermoso como siempre tu versar, amiga mía. Ese toque urbanita que derramas sobre él es la guinda final para que el poema adquiera su verdadera proyección, su real sentido. Un placer.

Abrazos.

Mario.