Editorial Alaire

Las golondrinas
cayeron como árboles,
no tocaron el suelo,
cayeron sobre cielo
y lo besaron.

Tocaron su nueva madre,
su templado vientre azul.

Ahí continúan cayendo y besando,
burlando la muerte,
porque todos los días muere el mundo.

Y si no tuvieran alas?
lo más probable es que mutaran en el viaje,
quitándose los ataúdes en el alba,
escondiendo sus propias oscuridades bajo la luz,

porque ningún soñador merece caer encadenado,
porque lo pensé mientras las golondrinas
despegaban de mi corazón.

Bello y evocador trabajo de Antonio.

Rafel Calle escribió:Bello y evocador trabajo de Antonio.

Gracias Rafel por pasar y comentar, te dejo un abrazo.

Satír.

Antonio Satír escribió:Las golondrinas
cayeron como árboles,
no tocaron el suelo,
cayeron sobre cielo
y lo besaron.

Tocaron su nueva madre,
su templado vientre azul.

Ahí continúan cayendo y besando,
burlando la muerte,
porque todos los días muere el mundo.

Y si no tuvieran alas?
lo más probable es que mutaran en el viaje,
quitándose los ataúdes en el alba,
escondiendo sus propias oscuridades bajo la luz,

porque ningún soñador merece caer encadenado,
porque lo pensé mientras las golondrinas
despegaban de mi corazón.

Qué bonito trabajo compañero.
Un gusto leerte.
Gracias y mi abrazo.

Silvia Savall escribió:

Antonio Satír escribió:Las golondrinas
cayeron como árboles,
no tocaron el suelo,
cayeron sobre cielo
y lo besaron.

Tocaron su nueva madre,
su templado vientre azul.

Ahí continúan cayendo y besando,
burlando la muerte,
porque todos los días muere el mundo.

Y si no tuvieran alas?
lo más probable es que mutaran en el viaje,
quitándose los ataúdes en el alba,
escondiendo sus propias oscuridades bajo la luz,

porque ningún soñador merece caer encadenado,
porque lo pensé mientras las golondrinas
despegaban de mi corazón.

Qué bonito trabajo compañero.
Un gusto leerte.
Gracias y mi abrazo.

Gracias!

Preciosísimo, Antonio; imágenes, encabalgamientos, esencia. Me ha encantado.

Salud y felicidad, querido poeta.