Editorial Alaire

Ronald,

me ha gustado el poema, amigo. Me gusta ese tono inquisitorio, como buscando desesperadamente una verdad, la verdad de una relación extinguida, las causas de su extinción. Verdad que permanece, no obstante, oculta en el misterio.
¿Qué decir? Diría que echo de menos los interrogantes iniciales de las preguntas. Uno comienza leyendo las sentencias como afirmaciones, hasta que llega al final de ellas y se encuentra el signo de interrogación final . Entonces se da cuenta de que ha leído una pregunta y el sentido cambia repentinamente y tiene que volver atrás para interpretarla. Eso no facilita la lectura.
Por otro lado, el objeto poemático resulta un tanto confuso. El título, "DIATRIBA PARA MI FANTASMA", parece dar a entender que el narrador, el alter ego del poeta, se dirigirá a su propio fantasma, un excelente punto de partida.

Viviendo contigo (,fantasma,)
sentí que te habías ido.

Sin embargo después se descubre que el objeto es otra persona amada y el fantasma es un tercero.

No era mi fantasma el que intentaba acariciarte
sin tener un punto siquiera donde asirse?

De nuevo uno debe volver a leer el poema desde el principio para reinterpretarlo según el nuevo objeto y eso puede generar cierta confusión.

Me ha gustado el poema, amigo.
Un abrazo,

Me gustó pasar y profundizar en tu poema que utilizas para darte por rendido y huir hacia adelante.
Satisfecho de la belleza imaginaria lograda en cada firma que el fantasma pendía en el desvelo.

un abrazo

Interesante experimento poético. Yo sentí lo mismo que Pablo; así, pues, le felicito por su atinada explicación. El poema es asequible y (luego de releerlo por párrafos) se vuelve agradable al espíritu lector.

Un abrazo.
Óscar

Hermoso trabajo de Ronald.