Editorial Alaire

Tu poema es una avalancha de bellas imágenes, palpitan, se recrean y conquistan la mirada.
Me encanta tu forma de escribir.
Un abrazo y beso, Ventura.

Hermosos versos para disfrutar poesía. Me gustó leerte
Besos
Pilar

Magnífico, Ventura. Que bien camina tu inspiración por tus propias ansiedades, sentires y deseos.

un abrazo

Muy bello trabajo de Ventura.

Carmen Pla escribió:Tu poema es una avalancha de bellas imágenes, palpitan, se recrean y conquistan la mirada.
Me encanta tu forma de escribir.
Un abrazo y beso, Ventura.

Gracias querida Carmen. Es tu forma de leer la que engrandece estos versos. Siente un placer tenerte por aquí. Un beso

Ventura Morón escribió:...

Se me rompen entre las manos
mis ojos al mirarte. Se hacen de vidrio, de uno tan duro
que se descuartiza punzante como lo hace la noche,
dejando desparramadas temblorosas estrellas.

He recogido sus pedazos para juntarlos.
Los he amasado como el que quisiera hornear los recuerdos
y calentarlos a la luz de un pensamiento precedente que enfocara la mirada.

Mas el tiempo duele amor,
y los remiendos de las pupilas sangran luciérnagas con rencor en sus alas,
que sobrevuelan a duras penas la conciencia apagándose más allá de los deseos .

La vista es un animal herido amor, que busca tu pecho para desaparecer
y morir despacio saboreando el ardor inquietante de la vida y su veneno,
el vértigo de un asceta que perdiera el equilibrio en el precipicio infalible de sus miedos ,
el colapso de un mundo que estallara en el cielo irremediablemente oscuro del olvido.

Esta ceguera me sostiene apenas,
veo tan sólo mis brazos incontrolables serpenteando en el vacío,
mientras mis pasos se adentran en el mar para hundirse en su fondo
mirando hacia la superficie y la luz que brilla
lejana como el péndulo del silencio.

¡Y las chispas son tan hermosas desde esta profundidad inmisericorde del hastío!
Una gaviota agita sus patas, a lo lejos, dejando alguna sonrisa escurrirse de su pico fiero.

No nos dijeron que el enamoramiento era una lluvia fortuita,
el rayo que desciende para dejar el calor de su memoria,
la incontinencia del cosmos que desconoce la saciedad de la tierra.

Hoy, flotan en esta marea pedazos de mis ojos,
trozos de mi entre los que descubro,
gotas que la eternidad va escanciando,
un plancton que navega con la sal verde de tu nombre ligado al mío.
.
.
.

Un poema bien escrito que analiza el amor en cuanto a su esencia efímera. Hay un despliegue generoso del lenguaje, de la expresión poética, una lluvia de imágenes que caen con apacible placer sobre el espíritu. El ritmo es relajado, mesurado, gracias a la magia de los versos largos, lo cual hace que el poema se vuelva, por momentos, de una melancolía contagiante. Me ha gustado, amigo.

Un abrazo fuerte.,
Óscar

Ventura Morón escribió:...

Se me rompen entre las manos
mis ojos al mirarte. Se hacen de vidrio, de uno tan duro
que se descuartiza punzante como lo hace la noche,
dejando desparramadas temblorosas estrellas.

He recogido sus pedazos para juntarlos.
Los he amasado como el que quisiera hornear los recuerdos
y calentarlos a la luz de un pensamiento precedente que enfocara la mirada.

Mas el tiempo duele amor,
y los remiendos de las pupilas sangran luciérnagas con rencor en sus alas,
que sobrevuelan a duras penas la conciencia apagándose más allá de los deseos .

La vista es un animal herido amor, que busca tu pecho para desaparecer
y morir despacio saboreando el ardor inquietante de la vida y su veneno,
el vértigo de un asceta que perdiera el equilibrio en el precipicio infalible de sus miedos ,
el colapso de un mundo que estallara en el cielo irremediablemente oscuro del olvido.

Esta ceguera me sostiene apenas,
veo tan sólo mis brazos incontrolables serpenteando en el vacío,
mientras mis pasos se adentran en el mar para hundirse en su fondo
mirando hacia la superficie y la luz que brilla
lejana como el péndulo del silencio.

¡Y las chispas son tan hermosas desde esta profundidad inmisericorde del hastío!
Una gaviota agita sus patas, a lo lejos, dejando alguna sonrisa escurrirse de su pico fiero.

No nos dijeron que el enamoramiento era una lluvia fortuita,
el rayo que desciende para dejar el calor de su memoria,
la incontinencia del cosmos que desconoce la saciedad de la tierra.

Hoy, flotan en esta marea pedazos de mis ojos,
trozos de mi entre los que descubro,
gotas que la eternidad va escanciando,
un plancton que navega con la sal verde de tu nombre ligado al mío.
.
.
.

Qué maravilla, Ventura, un poema verdaderamente hermoso,
de lectura muy fácil y amena, con imágenes estelares y marinas;
todo en un bello conjunto de metáforas que brillan cual las estrellas
en medio de sublimes sentimientos de amor.
Yo diría que es de los mejores que has escrito, sin que los
otros vayan a la zaga, por supuesto.

Un lujo de lectura y un deleite para aprender de lo bello.

Felicidades, poeta

Y un abrazo amigo

Rafael

Estimado amigo Ventura, un magnífico poema de impactantes imágenes bien sostenidas por el peso de la verdad existencial. Entre la vida y la muerte nos jugamos el amor sin ases en la manga. Muy bello y sentido. Recibe mis abrazos sinceros. Me uno al comentario de Óscar para celebrarlo.

Pilar Morte escribió:Hermosos versos para disfrutar poesía. Me gustó leerte
Besos
Pilar

Muchas gracias Pilar, siempre una alegría que vengas.

Besos!

Guillermo Cuesta escribió:Magnífico, Ventura. Que bien camina tu inspiración por tus propias ansiedades, sentires y deseos.

un abrazo

Gracias querido Guillermo. Es de verdad un placer que así te lo parezca, y recibir estas palabras tuyas.
Abrazo fuerte

Rafel Calle escribió:Muy bello trabajo de Ventura.

Qué bueno que vinieras amigo.
Te mando un fuerte abrazo, gracias siempre por este apoyo y todo lo que haces por todos.

Óscar Distéfano escribió:

Ventura Morón escribió:...

Se me rompen entre las manos
mis ojos al mirarte. Se hacen de vidrio, de uno tan duro
que se descuartiza punzante como lo hace la noche,
dejando desparramadas temblorosas estrellas.

He recogido sus pedazos para juntarlos.
Los he amasado como el que quisiera hornear los recuerdos
y calentarlos a la luz de un pensamiento precedente que enfocara la mirada.

Mas el tiempo duele amor,
y los remiendos de las pupilas sangran luciérnagas con rencor en sus alas,
que sobrevuelan a duras penas la conciencia apagándose más allá de los deseos .

La vista es un animal herido amor, que busca tu pecho para desaparecer
y morir despacio saboreando el ardor inquietante de la vida y su veneno,
el vértigo de un asceta que perdiera el equilibrio en el precipicio infalible de sus miedos ,
el colapso de un mundo que estallara en el cielo irremediablemente oscuro del olvido.

Esta ceguera me sostiene apenas,
veo tan sólo mis brazos incontrolables serpenteando en el vacío,
mientras mis pasos se adentran en el mar para hundirse en su fondo
mirando hacia la superficie y la luz que brilla
lejana como el péndulo del silencio.

¡Y las chispas son tan hermosas desde esta profundidad inmisericorde del hastío!
Una gaviota agita sus patas, a lo lejos, dejando alguna sonrisa escurrirse de su pico fiero.

No nos dijeron que el enamoramiento era una lluvia fortuita,
el rayo que desciende para dejar el calor de su memoria,
la incontinencia del cosmos que desconoce la saciedad de la tierra.

Hoy, flotan en esta marea pedazos de mis ojos,
trozos de mi entre los que descubro,
gotas que la eternidad va escanciando,
un plancton que navega con la sal verde de tu nombre ligado al mío.
.
.
.

Un poema bien escrito que analiza el amor en cuanto a su esencia efímera. Hay un despliegue generoso del lenguaje, de la expresión poética, una lluvia de imágenes que caen con apacible placer sobre el espíritu. El ritmo es relajado, mesurado, gracias a la magia de los versos largos, lo cual hace que el poema se vuelva, por momentos, de una melancolía contagiante. Me ha gustado, amigo.

Un abrazo fuerte.,
Óscar

Qué hermoso comentario me regalas Óscar, créeme es un privilegio recibirlo, que te detuvieras a buscar entre estas líneas, que analizaras estos intentos.
Abrazo fuerte amigo

Rafael Zambrano Vargas escribió:

Ventura Morón escribió:...

Se me rompen entre las manos
mis ojos al mirarte. Se hacen de vidrio, de uno tan duro
que se descuartiza punzante como lo hace la noche,
dejando desparramadas temblorosas estrellas.

He recogido sus pedazos para juntarlos.
Los he amasado como el que quisiera hornear los recuerdos
y calentarlos a la luz de un pensamiento precedente que enfocara la mirada.

Mas el tiempo duele amor,
y los remiendos de las pupilas sangran luciérnagas con rencor en sus alas,
que sobrevuelan a duras penas la conciencia apagándose más allá de los deseos .

La vista es un animal herido amor, que busca tu pecho para desaparecer
y morir despacio saboreando el ardor inquietante de la vida y su veneno,
el vértigo de un asceta que perdiera el equilibrio en el precipicio infalible de sus miedos ,
el colapso de un mundo que estallara en el cielo irremediablemente oscuro del olvido.

Esta ceguera me sostiene apenas,
veo tan sólo mis brazos incontrolables serpenteando en el vacío,
mientras mis pasos se adentran en el mar para hundirse en su fondo
mirando hacia la superficie y la luz que brilla
lejana como el péndulo del silencio.

¡Y las chispas son tan hermosas desde esta profundidad inmisericorde del hastío!
Una gaviota agita sus patas, a lo lejos, dejando alguna sonrisa escurrirse de su pico fiero.

No nos dijeron que el enamoramiento era una lluvia fortuita,
el rayo que desciende para dejar el calor de su memoria,
la incontinencia del cosmos que desconoce la saciedad de la tierra.

Hoy, flotan en esta marea pedazos de mis ojos,
trozos de mi entre los que descubro,
gotas que la eternidad va escanciando,
un plancton que navega con la sal verde de tu nombre ligado al mío.
.
.
.

Qué maravilla, Ventura, un poema verdaderamente hermoso,
de lectura muy fácil y amena, con imágenes estelares y marinas;
todo en un bello conjunto de metáforas que brillan cual las estrellas
en medio de sublimes sentimientos de amor.
Yo diría que es de los mejores que has escrito, sin que los
otros vayan a la zaga, por supuesto.

Un lujo de lectura y un deleite para aprender de lo bello.

Felicidades, poeta

Y un abrazo amigo

Rafael

Maravilla es para mi recibirte, este gran regalo de tu presencia en mis cosas y tu lectura generosa.
Te lo agradezco de corazón, y me alegra mucho que te gustara.
Fuerte abrazo Rafael

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