Editorial Alaire

-un carcinoma en las vías biliares,
hemos abierto y no hay nada que hacer-

me dieron ganas de echarme a ella y llamarla hija de puta

-déjese de cuentos y de perder tiempo
y cure a mi madre-

el 14 de diciembre
dum dum dum

se adelantó papa noel

el cura soltó su sermón y se cerraron las cortinas
-siempre quiso que la incinerasen-

Y no me preguntes qué dijo
porque pegué las palmas a la pared y grité

solo quería gritar
que me dejasen en paz
y cagarme en dios.

Todavía conservo nueve rosas blancas.


Antonia Mauro del Blanco

Muy emotivo y un desarrollo original y grato del poema a pesar de la tristeza que de él emana.
Besos
Pilar

Impactante, Antonia; bello en los márgenes y núcleo de su dolor esencial.

Un abrazo y gracias por compartir tan buena poesía.

Duro poema, muy original en el planteamiento, me ha gustado mucho.

Un abrazo.

Escribir un buen poema sobre circunstancias tan duras y dolorosas siempre tiene doble mérito. Un besito compi.

Duro poema que, por desgracia, me ha resultado familiar.

Me gusta mucho cómo lo has resuelto. Felicidades, Elena.

Un abrazo.

Pura emoción inyectada en vena. Para mí, es la poesía.
Un abrazo

Desgarrador.
Poema a tumba abierta.
Me ha gustado mucho ese estilo coléricamente desnudo y triste, natural, como un lirio blanco.
Mis respetos, saludos y bendiciones!
Un abrazo fuerte!

Intenso y sobrecogedor querida amiga...
Un gusto volver a leerte...te abrazo con todo mi cariño...
Nancy

Efectivamente, como dicen los compañeros, un trabajo sin concesiones, durísimo.
Abrazos, amiga Elena.