Editorial Alaire

No tengo ni la más remota idea
de qué hacer en este país de poesía y sueño,
- dulce-amargo - al mismo tiempo.

Supongo que será,
este aire que respiro cuando pierdo la confianza
y se apaga el botón hacía donde voy.

O si tengo presente el valor
para enfrentarme a los espejismos,
poner a dieta mis escrúpulos
y comerme la noche:
los viejos trampolines que me hacen saltar
sobre el blanco de las palabras últimas e inútiles.

-No soy una heroína- No puedo hacer estas cosas.

Pero, si ser, el clavo objetivo de mis intenciones,
y dejar de ser "mi caperucita roja"

Bella y profunda reflexión que te dibuja dulcemente querida amiga...
Un gusto leerte...te abrazo con todo mi cariño...
Nancy

Me gusta la perplejidad es como nacer de nuevo por el poema. Creo que ahí se donde se expresa el silencio del poema.

Un placer leerte Carmen

Lunamar Solano escribió:Bella y profunda reflexión que te dibuja dulcemente querida amiga...
Un gusto leerte...te abrazo con todo mi cariño...
Nancy

Muchas gracias, Nancy.
Siempre atenta y amable.
Con afecto.

No quieres ser Caperucita, amiga Carmen. Ella no era poeta y tu bordas el verso y el poema cuando apareces con todo tu sentir
haciendo juego y la literatura saca pluma y te convence.

un abrazo

Si hubiera un país de poesía y sueño, estimada amiga Carmen, quizá lo mejor sería aprovecharlo para intercambiar poesías y sueños.

Agridulce es un sabor que a mí me gusta mucho, además, siendo tan cotidiano, creo que lo más conveniente es habituarse, más que nada porque nadar contracorriente al final resulta, cuanto menos, estéril.

Hablando de poesía, de la tuya, a mi juicio, está bien posicionada respecto al nivel medio-alto de Alaire. ¿Puedes mejorar? Sí. Afortunadamente, creo que tienes margen de mejora. Por ejemplo, en este poema consigues buenos versos junto a otros que me parecen revisables en la propia construcción, todo ello dentro de una idea, en general, francamente feliz.

En fin, Carmen, te ofrezco mi brazo para cruzar la calle en un día de grises resbaladizos. Ya escampará. Mientras tanto, te doy mi enhorabuena por tu dedicación a la poesía y porque has conseguido una obra en la que habitan incuestionables tributos a la hermosura versada.
Abrazos.

Raul Muñoz escribió:Me gusta la perplejidad es como nacer de nuevo por el poema. Creo que ahí se donde se expresa el silencio del poema.

Un placer leerte Carmen

Gracias por tan amable comentario, Raúl.
Saludo

Guillermo Cuesta escribió:No quieres ser Caperucita, amiga Carmen. Ella no era poeta y tu bordas el verso y el poema cuando apareces con todo tu sentir
haciendo juego y la literatura saca pluma y te convence.

un abrazo

Me convence a medias, Guillermo, pero no tiro la toalla, persisto en seguir.
Un abrazo y gracias.

Rafel Calle escribió:Si hubiera un país de poesía y sueño, estimada amiga Carmen, quizá lo mejor sería aprovecharlo para intercambiar poesías y sueños.

Agridulce es un sabor que a mí me gusta mucho, además, siendo tan cotidiano, creo que lo más conveniente es habituarse, más que nada porque nadar contracorriente al final resulta, cuanto menos, estéril.

Hablando de poesía, de la tuya, a mi juicio, está bien posicionada respecto al nivel medio-alto de Alaire. ¿Puedes mejorar? Sí. Afortunadamente, creo que tienes margen de mejora. Por ejemplo, en este poema consigues buenos versos junto a otros que me parecen revisables en la propia construcción, todo ello dentro de una idea, en general, francamente feliz.

En fin, Carmen, te ofrezco mi brazo para cruzar la calle en un día de grises resbaladizos. Ya escampará. Mientras tanto, te doy mi enhorabuena por tu dedicación a la poesía y porque has conseguido una obra en la que habitan incuestionables tributos a la hermosura versada.
Abrazos.

Gracias por el apoyo incondicional que me ofreces, Rafel.
Agradezco cada una de tus palabras, pierdo el ánimo, es cierto, pero aún sigo aquí.
Un fuerte abrazo

Me gusta este intimista poema que nos dejas Carmen. Lo disfruté leyendo

saludos

rafael