Insomnio ( del Tratado de Zoología In-Versa )
Publicado: Dom, 29 Ene 2017 20:09
-Estás escuchando la Varshavianka.
No eres nada. Y podrías serlo todo
Raúl; ese todo y la nada son
el juego de tus muñecas sin ti.
-No podía dormirme en cama propia;
por una interminable sucesión
de estaciones sin pomelos ni brisas,
volaban octavillas por mi mente.
-¿Ahora quieres amar taxonomías,
qué sabes del género y su aureola
envolviendo la filiación del árbol,
en este Tratado de Zoología?
-Las banderas decidieron al hombre
escrito en la guerra de un edificio,
con amplias vidrieras, por subterraneos
que llevaban a cocinas sin lumbre.
-Microscopía nocturna, Raúl,
tus ojos son quienes ahora se ocultan:
lentes desgastadas por una luz
que te enfoca sin ser más que dolor.
-Sin embargo, hubo la plenitud;
el jaleo de la barra brindando,
a la vuelta de cada esquina el mundo
que nos esperaba siempre de nuevo.
“Quisiera ser igual al hombre ameba”
-su cariño es la unidad en el ser-
pensaba mientras veía al amigo
que embriagado pronunciaba su esencia.
-Buscas una respuesta, en tanto, amable
te preocupas por lo que no comprendes,
mas quisieras hablar por la razón
bebiéndote los días sin hallarte.
-Olvidaba por completo ducharme
mis dedos acariciaban el borde
de las letras impresas, en relieve,
sobre la portada de aqueste fractal.
-Sientes por el pabellón auricular
al gusano inverso por lo más simple
que regresa en el gesto automático
de aquello que no quisieras oír.
-La locura de algún experimento
en la platina de tantos recuerdos,
y mi cuerpo sin hallar la bandera
desterrado de la misma locura...
Ah triste batallón de aqueste insomnio
planeando la victoria de algún sueño-
Quiero decir
cuando no me replicas.
No eres nada. Y podrías serlo todo
Raúl; ese todo y la nada son
el juego de tus muñecas sin ti.
-No podía dormirme en cama propia;
por una interminable sucesión
de estaciones sin pomelos ni brisas,
volaban octavillas por mi mente.
-¿Ahora quieres amar taxonomías,
qué sabes del género y su aureola
envolviendo la filiación del árbol,
en este Tratado de Zoología?
-Las banderas decidieron al hombre
escrito en la guerra de un edificio,
con amplias vidrieras, por subterraneos
que llevaban a cocinas sin lumbre.
-Microscopía nocturna, Raúl,
tus ojos son quienes ahora se ocultan:
lentes desgastadas por una luz
que te enfoca sin ser más que dolor.
-Sin embargo, hubo la plenitud;
el jaleo de la barra brindando,
a la vuelta de cada esquina el mundo
que nos esperaba siempre de nuevo.
“Quisiera ser igual al hombre ameba”
-su cariño es la unidad en el ser-
pensaba mientras veía al amigo
que embriagado pronunciaba su esencia.
-Buscas una respuesta, en tanto, amable
te preocupas por lo que no comprendes,
mas quisieras hablar por la razón
bebiéndote los días sin hallarte.
-Olvidaba por completo ducharme
mis dedos acariciaban el borde
de las letras impresas, en relieve,
sobre la portada de aqueste fractal.
-Sientes por el pabellón auricular
al gusano inverso por lo más simple
que regresa en el gesto automático
de aquello que no quisieras oír.
-La locura de algún experimento
en la platina de tantos recuerdos,
y mi cuerpo sin hallar la bandera
desterrado de la misma locura...
Ah triste batallón de aqueste insomnio
planeando la victoria de algún sueño-
Quiero decir
cuando no me replicas.