El ocaso de los límites
Publicado: Mar, 10 Ene 2017 18:27
El ocaso de los límites.
Tu luz valiente y disonante,
acompaña los pasos,
rizando inspiracion y trabajo,
fortificando
todos los deberes
bien venidos del cielo.
Mi verde,
en sus galopes,
las justicias,
el incansable,
el presente,
el que está y ayuda.
Mi blanca luz de princesa,
impar,
de ternura en la distancia,
llenando todo de luz,
en su presencia,
de lugares recónditos.
Mundo pues,
azucarado de carbón del negro puro.
Sutil recuerdo
en una colilla
o el olor de una sabana,
el valor intrínseco de la ternura.
Ángeles ayudando,
siempre,
amigos,
café intenso,
corros gitanos,
bolseras,
princesa de la poesía.
Y en estas horas que se va
la tarde,
la luna se asoma,
rezo y mucho agradezco el día,
a ti mi dios,
y a todos los que camináis
conmigo.
Tu luz valiente y disonante,
acompaña los pasos,
rizando inspiracion y trabajo,
fortificando
todos los deberes
bien venidos del cielo.
Mi verde,
en sus galopes,
las justicias,
el incansable,
el presente,
el que está y ayuda.
Mi blanca luz de princesa,
impar,
de ternura en la distancia,
llenando todo de luz,
en su presencia,
de lugares recónditos.
Mundo pues,
azucarado de carbón del negro puro.
Sutil recuerdo
en una colilla
o el olor de una sabana,
el valor intrínseco de la ternura.
Ángeles ayudando,
siempre,
amigos,
café intenso,
corros gitanos,
bolseras,
princesa de la poesía.
Y en estas horas que se va
la tarde,
la luna se asoma,
rezo y mucho agradezco el día,
a ti mi dios,
y a todos los que camináis
conmigo.