Editorial Alaire

A Bob Gurney

A lo lejos un barco se hace eco
de las constelaciones de la noche.
Un perro ladra.
Abandonado intenta que me acerque...
se va por otra calle.

Veo el Puente Colgante
desde las ventanas de mi casa.
La iglesia de Santa María
que expectante se alza
contra el cielo,
presagia la nostalgia.

Los niños han salido del colegio
y la tarde languidece
sobre la hojarasca
del pavimento gris de las aceras.

El bote cruza
a los pasajeros despistados.
Refleja luces condensadas.
El barco se aproxima
en un susurro abierto a los espejos.

Ya se ha ido el mercante.
Nada queda de él.

Mientras,
los relojes se detienen...

Tiempo de eternidad
flotando en el ambiente
a través del crepúsculo dormido...


Ana Muela Sopeña

Qué bonito, Ana. Has reflejado ese momento con imágenes bellas y sugerentes. Lo he disfrutado. Un abrazo.

Magníficamente expresado esos instantes, esos paisajes sensibles a la voz de la poeta.

Todo un placer de lectura, querida amiga.

Un biquiño.

Has atrapado el tiempo Ana en un poema muy bien estructurado que nos deja un poso dulce de melancolía. Me ha gustado mucho la concatenación de imágenes, la cuidada forma.
Un abrazo

Ana Muela Sopeña escribió:A Bob Gurney

A lo lejos un barco se hace eco
de las constelaciones de la noche.
Un perro ladra.
Abandonado intenta que me acerque...
se va por otra calle.

Veo el Puente Colgante
desde las ventanas de mi casa.
La iglesia de Santa María
que expectante se alza
contra el cielo,
presagia la nostalgia.

Los niños han salido del colegio
y la tarde languidece
sobre la hojarasca
del pavimento gris de las aceras.

El bote cruza
a los pasajeros despistados.
Refleja luces condensadas.
El barco se aproxima
en un susurro abierto a los espejos.

Ya se ha ido el mercante.
Nada queda de él.

Mientras,
los relojes se detienen...

Tiempo de eternidad
flotando en el ambiente
a través del crepúsculo dormido...


Ana Muela Sopeña

Leo tus poemas y siempre me dejan algo bello.
Gracias por compartir.
Un abrazo.-

Cuando leo poemas como este Ana, yo pienso "Cosas así, son las que quiero escribir".

Una forma sencilla, pero tan hermosamente llevada a cabo, que uno queda atrapado en el bellísimo instante del poeta.

Me ha re-encantado .

Mi abrazo.

Ana Muela Sopeña escribió:A Bob Gurney

A lo lejos un barco se hace eco
de las constelaciones de la noche.
Un perro ladra.
Abandonado intenta que me acerque...
se va por otra calle.

Veo el Puente Colgante
desde las ventanas de mi casa.
La iglesia de Santa María
que expectante se alza
contra el cielo,
presagia la nostalgia.

Los niños han salido del colegio
y la tarde languidece
sobre la hojarasca
del pavimento gris de las aceras.

El bote cruza
a los pasajeros despistados.
Refleja luces condensadas.
El barco se aproxima
en un susurro abierto a los espejos.

Ya se ha ido el mercante.
Nada queda de él.

Mientras,
los relojes se detienen...

Tiempo de eternidad
flotando en el ambiente
a través del crepúsculo dormido...


Ana Muela Sopeña

Logras la sincronía del tempo, la luz, la temperatura de una estampa que cobra vida con tu exquisito uso del lenguaje, Ana. Quise saber quien era Bob Gurney para viajar a otras capas de interpretación, pero no logre poder identificarlo en internet. Tus talentos van en gran desarrollo y es evidente que escribir es uno de ellos. Un abrazo, ERA

Gracias, Ramón, por venir y dejar tu huella.

Un beso grande
Ana

Me alegra, J.J.:

Es un placer saber que has disfrutado de estos versos.

Un beso grande
Ana

Agradezco, Armilo, tus palabras.

Un beso
Ana

Me alegro, Mirta, que mis poemas te dejen algo bello en tu interior.

Un beso
Ana

Gracias, Just:

Tus palabras son un honor para mí...

Besos
Ana

Muy hermoso poema, amiga Ana. Las imágenes resultan entrañables, emotivas, se deslizan con suavidad y elegancia, se nos hacen cercanas y uno parece estar presente contemplando el mismo paisaje. Me ha gustado mucho. Mi reconocimiento y atronadora ovación.

Un afectuoso abrazo.

Las imágenes dejan plasmado todo un proceso sentimental, entre la convivencia silenciosa, llenándote, tal vez, de pensamientos contradictorios que cobran vida. Un excepcional poema.

Un gran abrazo desde mi isla, hasta el Norte de tu tierra.

José Manuel F. Febles

Gracias, Era:

Te he escrito un e-mail.

Un beso grande
Ana