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Publicado: Mié, 18 Jun 2008 21:06
disculpen
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Bueno, este poema estâ mucho mâs tremendo que el mîo, Leila Sofîa. Toda mi admiraciôn y mis deseos de seguir leyendo cosas suyas. Mis saludos cordialesLeila Sofía escribió:Te persiguen nuestros encuentros
como si fuesen espejos quebrados
que auguran catástrofes. Tu lenguaje herido
ya no hace eco en esta casa.
Desterré todas las huellas de los zapatos tristes que acostumbraba a seguir,
porque las huellas
se borran con el tiempo y las ausencias.
No te quiero-queriéndote hasta el ahogo,
adorable hijo de puta, enigma sórdido de adioses.
Incéndiame América con tu odio congelándose entre las costillas,
porque he llegado a fumar las cenizas de tu soledad.
Tengo que parir tu olvido pequeño alacrán transparente inundándose en mis muslos no eres el primero ni el último en fallarme porque tampoco soy tu estreno con lengua virgen y dispuesta a lamer los residuos de otros sexos ¿acaso lloras desgracias? no animal mío las plagas de la tristeza jamás traspasarán estas ventanas están acá -mira- entre mis piernas viven para infectarte el semen y las ganas.
Lourdes Spin escribió:Leila Sofía escribió:Te persiguen nuestros encuentros
como si fuesen espejos quebrados
que auguran catástrofes. Tu lenguaje herido
ya no hace eco en esta casa.
Desterré todas las huellas de los zapatos tristes que acostumbraba a seguir,
porque las huellas
se borran con el tiempo y las ausencias.
No te quiero-queriéndote hasta el ahogo,
adorable hijo de puta, enigma sórdido de adioses.
Incéndiame América con tu odio congelándose entre las costillas,
porque he llegado a fumar las cenizas de tu soledad.
Tengo que parir tu olvido pequeño alacrán transparente inundándose en mis muslos no eres el primero ni el último en fallarme porque tampoco soy tu estreno con lengua virgen y dispuesta a lamer los residuos de otros sexos ¿acaso lloras desgracias? no animal mío las plagas de la tristeza jamás traspasarán estas ventanas están acá -mira- entre mis piernas viven para infectarte el semen y las ganas.
Bueno, este poema estâ mucho mâs tremendo que el mîo, Leila Sofîa. Toda mi admiraciôn y mis deseos de seguir leyendo cosas suyas. Mis saludos cordiales
Spin
Víctor Vergara Valencia escribió:.
Ufffffff, Leila, admirable. Me postro de rodillas y te reverencio.
Te confieso que vergonzosamente empecé a leer por el final: "tengo que parir tu olvido pequeño alacrán......" y me dije: Si el poema está a esta altura, date con la frente en la pared.
Y me dí con la frente en la pared y en repetidas veces.
No te quiero -queriéndote hasta el ahogo,
adorable hijo de puta
Incéndiame América con tu odio
Un beso, me encanta esta fuerza bañada en belleza.
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Alejandra Goerne escribió:Fuerza que vive en el poema y te incendia de palabras. Quemarse en los vocablos puede ser el último acto de amor... que no redime.
Me encanta tu voz poética, me encanta. Aplausos.
Leila Sofía escribió:Te persiguen nuestros encuentros
como si fuesen espejos quebrados
que auguran catástrofes. Tu lenguaje herido
ya no hace eco en esta casa.
Desterré todas las huellas de los zapatos tristes que acostumbraba a seguir,
porque las huellas
se borran con el tiempo y las ausencias.
No te quiero-queriéndote hasta el ahogo,
adorable hijo de puta, enigma sórdido de adioses.
Incéndiame América con tu odio congelándose entre las costillas,
porque he llegado a fumar las cenizas de tu soledad.
Tengo que parir tu olvido pequeño alacrán transparente inundándose en mis muslos no eres el primero ni el último en fallarme porque tampoco soy tu estreno con lengua virgen y dispuesta a lamer los residuos de otros sexos ¿acaso lloras desgracias? no animal mío las plagas de la tristeza jamás traspasarán estas ventanas están acá -mira- entre mis piernas viven para infectarte el semen y las ganas.
Luis Oroz escribió:Poder y valentía en un poema no exento de belleza.
Cuando la palabra define con exactitud las sensaciones, se produce una especie de "empatía" y el lector hunde su yo con la poesía.
Un abrazo, Leila.
Luis Oroz.