Editorial Alaire

Amanece, y el cielo apenas intimida
renacido del bautismo de las aguas.
En abnegada ceremonia,
dejada atrás su púrpura nimbada,
se desnuda de las pieles de la noche
siguiendo una liturgia de manidos ademanes,
volviéndose remanso en el río de los sueños,
donde la vida aquieta en su premura
e ignora la geografía de su desorden.

Una tímida luz, que ya te asciende,
se inclina sobre ti
adentrando en tus ojos la mirada,
fecunda como aliento de lluvias recientes,
queriendo anudarse como un verso a tu garganta.
Y tú, aún sigues ausente,
absorta y sometida a la liviandad de otras gravedades.

En ese recreo de la luz,
solo tus hombros desnudos tiemblan
perdido el descuidado tacto de la sábana.
Entonces, un suspiro se escapa de tus labios
anunciando lo dulce que ha sido la derrota,
sumida toda tú entera en su resaca.

Mas siempre habrá de regresar la noche
que por victorias cuenta sus batallas.

Cierto, "versos que se anudan a la garganta" envueltos en la noche como ahora. Sigue siendo unlacer leerte, Ramón.
Un abrazoy, buenas noches

Ramón Castro Méndez escribió:
Amanece, y el cielo apenas intimida
renacido del bautismo de las aguas.
En abnegada ceremonia,
dejada atrás su púrpura nimbada,
se desnuda de las pieles de la noche
siguiendo una liturgia de manidos ademanes,
volviéndose remanso en el río de los sueños,
donde la vida aquieta en su premura
e ignora la geografía de su desorden.

Una tímida luz, que ya te asciende,
se inclina sobre ti
adentrando en tus ojos la mirada,
fecunda como aliento de lluvias recientes,
queriendo anudarse como un verso a tu garganta.
Y tú, aún sigues ausente,
absorta y sometida a la liviandad de otras gravedades.

En ese recreo de la luz,
solo tus hombros desnudos tiemblan
perdido el descuidado tacto de la sábana.
Entonces, un suspiro se escapa de tus labios
anunciando lo dulce que ha sido la derrota,
sumida toda tú entera en su resaca.

Mas siempre habrá de regresar la noche
que por victorias cuenta sus batallas.

Me ha encantado, me recuerda la historia de

La ratita parda se quiere casar
en busca de esposo caminó hasta el mar
hermoso pez dorado ven conmigo a casa
ratita querida no insista te ruego
lejos de estas aguas vivir yo no puedo.

Es para niños, lo tuyo inmenso.-

Maravilloso poema de amor, dibujado con pinceladas impresionistas para el amanecer que despunta, marco bellísimo donde se centra la imagen de la mujer amada y se recrea el entorno y el futuro con delicadas y bellas metáforas.
Cordialmente
Marimar

xaime oroza carballo escribió:Cierto, "versos que se anudan a la garganta" envueltos en la noche como ahora. Sigue siendo unlacer leerte, Ramón.
Un abrazoy, buenas noches

Muchas gracias, Xaime, por el aprecio que das a mis letras.
Un abrazo

Mirta Elena Tessio escribió:

Ramón Castro Méndez escribió:
Amanece, y el cielo apenas intimida
renacido del bautismo de las aguas.
En abnegada ceremonia,
dejada atrás su púrpura nimbada,
se desnuda de las pieles de la noche
siguiendo una liturgia de manidos ademanes,
volviéndose remanso en el río de los sueños,
donde la vida aquieta en su premura
e ignora la geografía de su desorden.

Una tímida luz, que ya te asciende,
se inclina sobre ti
adentrando en tus ojos la mirada,
fecunda como aliento de lluvias recientes,
queriendo anudarse como un verso a tu garganta.
Y tú, aún sigues ausente,
absorta y sometida a la liviandad de otras gravedades.

En ese recreo de la luz,
solo tus hombros desnudos tiemblan
perdido el descuidado tacto de la sábana.
Entonces, un suspiro se escapa de tus labios
anunciando lo dulce que ha sido la derrota,
sumida toda tú entera en su resaca.

Mas siempre habrá de regresar la noche
que por victorias cuenta sus batallas.

Me ha encantado, me recuerda la historia de

La ratita parda se quiere casar
en busca de esposo caminó hasta el mar
hermoso pez dorado ven conmigo a casa
ratita querida no insista te ruego
lejos de estas aguas vivir yo no puedo.

Es para niños, lo tuyo inmenso.-

La ratita parda creo que es aquí, en España, la ratita presumida. Ésta era bastante exigente con sus pretendientes, siento no recordar la letra.
Muchas gracias, Mirta, por tus siempre amables y generosas palabras.
Un afectuoso abrazo.

Marimar González escribió:Maravilloso poema de amor, dibujado con pinceladas impresionistas para el amanecer que despunta, marco bellísimo donde se centra la imagen de la mujer amada y se recrea el entorno y el futuro con delicadas y bellas metáforas.
Cordialmente
Marimar

Muy agradecido, Marimar, por tu paso y gentileza.
Un afectuoso abrazo.

Un poema muy hermoso y de gran lirismo. Para disfrutar la poesía.
Abrazos
Pilar

xaime oroza carballo escribió:Cierto, "versos que se anudan a la garganta" envueltos en la noche como ahora. Sigue siendo unlacer leerte, Ramón.
Un abrazoy, buenas noches

Muchas gracias, Xaime, por tu paso y apreciado comentario.
Un abrazo y feliz domingo.

Pilar Morte escribió:Un poema muy hermoso y de gran lirismo. Para disfrutar la poesía.
Abrazos
Pilar

Muy agradecido por tu paso, Pilar. Celebro que mis letras hayan sido de tu agrado.
Abrazos.

Hermoso poema donde describes un amanecer sumamente poético. Felicidades y un abrazo.

Ramón Castro Méndez escribió:
Amanece, y el cielo apenas intimida
renacido del bautismo de las aguas.
En abnegada ceremonia,
dejada atrás su púrpura nimbada,
se desnuda de las pieles de la noche
siguiendo una liturgia de manidos ademanes,
volviéndose remanso en el río de los sueños,
donde la vida aquieta en su premura
e ignora la geografía de su desorden.

Una tímida luz, que ya te asciende,
se inclina sobre ti
adentrando en tus ojos la mirada,
fecunda como aliento de lluvias recientes,
queriendo anudarse como un verso a tu garganta.
Y tú, aún sigues ausente,
absorta y sometida a la liviandad de otras gravedades.

En ese recreo de la luz,
solo tus hombros desnudos tiemblan
perdido el descuidado tacto de la sábana.
Entonces, un suspiro se escapa de tus labios
anunciando lo dulce que ha sido la derrota,
sumida toda tú entera en su resaca.

Mas siempre habrá de regresar la noche
que por victorias cuenta sus batallas.

Ramón Castro: estimado poeta, es un poema delicioso
de lectura y vanguardista, con un ritmo interior precioso
que a mi me ha encantado

Te felicito.

Mi abrazo poeta

R. Zambrano

Rafael Zambrano Vargas escribió:

Ramón Castro Méndez escribió:
Amanece, y el cielo apenas intimida
renacido del bautismo de las aguas.
En abnegada ceremonia,
dejada atrás su púrpura nimbada,
se desnuda de las pieles de la noche
siguiendo una liturgia de manidos ademanes,
volviéndose remanso en el río de los sueños,
donde la vida aquieta en su premura
e ignora la geografía de su desorden.

Una tímida luz, que ya te asciende,
se inclina sobre ti
adentrando en tus ojos la mirada,
fecunda como aliento de lluvias recientes,
queriendo anudarse como un verso a tu garganta.
Y tú, aún sigues ausente,
absorta y sometida a la liviandad de otras gravedades.

En ese recreo de la luz,
solo tus hombros desnudos tiemblan
perdido el descuidado tacto de la sábana.
Entonces, un suspiro se escapa de tus labios
anunciando lo dulce que ha sido la derrota,
sumida toda tú entera en su resaca.

Mas siempre habrá de regresar la noche
que por victorias cuenta sus batallas.

Ramón Castro: estimado poeta, es un poema delicioso
de lectura y vanguardista, con un ritmo interior precioso
que a mi me ha encantado

Te felicito.

Mi abrazo poeta

R. Zambrano

Muy agradecido, Rafael, por tu estimado y generoso comentario. Celebro que estas letras hayan sido de tu agrado.
Un fuerte abrazo.

Amor, dulce amor que clarifica la inocencia desde la oscuridad nocturna que ambienta las batallas y
cuando alumbra y calma la posguerra.

un abrazo

Ramón Carballal escribió:Hermoso poema donde describes un amanecer sumamente poético. Felicidades y un abrazo.

Muchas gracias, Ramón, por pasarte y dejarme tu apreciado comentario.
Un abrazo.