Editorial Alaire

REENCUENTRO


De pronto comprendí el misterio.
Durante un tiempo (sin sabernos)
tuvimos la certeza irracional
del uno por el otro.

Desde un umbral
ajeno a la conciencia,
nos buscábamos,
nos llamábamos,
fraguábamos la unión
final de nuestras vidas.

Un día llegó la certidumbre, lo inefable,
la paz del que se encuentra.
Nos invadió una insólita
quietud en el apego, la evidencia
de estar ante lo propio.

Entonces comprendí el enigma.
Aquel tiempo de ausencia,
aquel destierro,
aquel alejamiento previo
de su alma y de la mía,
comparte el mismo axioma
que hoy vivimos,
los dos,
sin recordarlo;
como un principio exacto
de razón suficiente
y sin opción
de ser de otra manera.


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Muy buen poema, otra vez, José Manuel. Amigo, vuelves a bordarlo. Me ha gustado mucho este encuentro, que parecía preparado de antemano sin ninguno de los protagonistas saberlo. Un ferviente aplauso para ti y para tu obra.
Un fuerte abrazo.

El tiempo que denuncia y acrecienta las ausencias remueve los deseos y disuelve lejanías.
Así vuelve la regeneración en forma de poesía a encontrarse con símisma, en la imaginación
si ya la realidad se fue demasiado lejos.

Qué sencillez lat uya para que el manejo literal se haga cargo del arte y el refuerzo.

un abrazo

Hermoso e interesante poema de José Manuel.

Hermosísimo, José Manuel; logras de manera diáfana transmitir una idea poética que a muchos nos parece esencial.
Tengo varios poemillas que circundan con riesgos y osadía el concepto del viaje previo, del pre-conocimiento, de la destinación inapelable.

Felicidades y aplausos, amigo.

Un abrazo.

Me ha gustado mucho, con apariencia sencilla tiene la hondura del que siente y sabe mirar . Felicidades
Besos
Pilar

Opino como Pilar, la sencillez de las palabras hacen que sea un poema que da sentido y valor al sentimiento.
Me ha gustado mucho, José Manuel.
Abrazos

Muchas gracias por los comentarios, compañeros y amigos.
Un fuerte abrazo a todos.
J. Manuel