Editorial Alaire

El tiempo se sucede inexorable
bajo la luna cruel.

Una rama se mueve,
se columpia sin prisa
con el viento del norte.

Los coches a lo lejos
atemperan el mundo con motores
que pactan con la música callada
en el sueño sin alba.

El instinto del agua
arremete con furia
en medio de tormentas interiores.

Jeroglíficos llenos de silencio
en las plazas desiertas.

Un tsunami se cierne sobre mí
en la ciudad dormida.

Tu voz ensimismada
retumba entre la niebla.

Mi sombra se disuelve
entre los árboles
y nuestro roce queda respirando
en la evanescencia de la luz...


Ana Muela Sopeña

Intenso, suavísimo y lleno de tu inspiración, querida Ana. Me ha gustado mucho como personalizas la temperatura del cosmos y la traes evocadora hasta nuestros ojos.

Abrazo fuerte y felicidad.

Estas secuencias que vibran en tus imágenes, cargadas de belleza, se dejan fluctuar entre la serenidad y la calma tensa, están latiendo, acelerándose, como se acelera el pulso cuando se sueña para buscar un reflejo inalcanzable, están respirando porque el ansia de vida impulsa hacia una vigilia confidente, en la que por segundos puede abrazarse el inexpugnable universo.
Cuanto buen hacer se va filtrando en estos versos Ana, un gusto leerte querida compañera
Besos

Preciosa encarnación de la luz en tus letras.
Un placer, Ana, también me alegro de volverte a leer.
Abrazos

Qué bonito poema, Ana. Me encanta. Me encanta su serena elegancia y cadencia. Te felicito de corazón.
Un abrazo.
J. Manuel

Mi muy querida Ana, que alegría leerte y ver la efectividad de tus magistrales palabras, describiendo tu evanescencia. Ni sobra ni falta... como todos tus versos es una excelencia poética.


Eres un genio amiga !!

mil besos y mil gracias

Curra

Hallie, es una alegría para mí que percibas este poema como algo sutil y suave. He querido retratar ese paso del tiempo inexorable, la caducidad de las vivencias, en contraste con lo eterno de nuestro ser que podemos vivir a través del amor incondicional, como algo místico.

La evanescencia de la luz...

Besos a montones, compañera
Ana

Agradezco, Ventura, tus palabras y tu análisis generoso de estos versos.

Besos y...mucha poesía
Ana

Gracias, Carmen, es un gusto estar de nuevo en este foro, con tantos y tantos compañeros que sienten la poesía y la escriben con maestría.

Besos
Ana

Muchas gracias, José Manuel, es siempre una alegría verte por aquí.

Un fuerte abrazo
Ana

Un poema hondo y muy hermoso, donde se siente el paso del tiempo irremediable y la luz que refleja. Me gustó mucho
Abrazos
Pilar

Ana Muela Sopeña escribió:El tiempo se sucede inexorable
bajo la luna cruel.

Una rama se mueve,
se columpia sin prisa
con el viento del norte.

Los coches a lo lejos
atemperan el mundo con motores
que pactan con la música callada
en el sueño sin alba.

El instinto del agua
arremete con furia
en medio de tormentas interiores.

Jeroglíficos llenos de silencio
en las plazas desiertas.

Un tsunami se cierne sobre mí
en la ciudad dormida.

Tu voz ensimismada
retumba entre la niebla.

Mi sombra se disuelve
entre los árboles
y nuestro roce queda respirando
en la evanescencia de la luz...


Ana Muela Sopeña

Me ha gustado mucho el poema. Describe con bellas imágenes todo un cúmulo de sensaciones con un gusto exquisito. Te felicito por tan bello trabajo.
Un abrazo

Algo de ti misma escapa a la poesía, que se viste de detalle y de reflexión para alternar con el sentir y la palabra
que tan a sus anchas directrices recoge tu inspiración y se evanesce.

un abrazo

Excelentes imágenes. Un poema realmente hermoso, Ana. Mis felicitaciones compañera. Un abrazo.

Hermoso y sentido trabajo de Ana.