Editorial Alaire

Mientras abres tu colina negra, mis dedos me dejan espacio
y como el viento tibio bajo los destellos de neón,
otros rayos de sol queman; otra amnesia, otra acera sin nieve,
otro nudo en la garganta, otra palabra muda
que desgasta los paisajes en el agua de mis ojos.


Miro a través de tus pupilas lo incierto, 


las páginas estampadas que difuminan los años,
los secretos incrédulos de los ruidos breves,
los instantes que saborean de un trago
las tardes gastadas, y las voces que encojen lo tenue 
donde el iris penetra las dudas
como un río sin agua.




Tus manos llenas de agua,
tus cabellos húmedos, toda el agua en tus dedos
y ese tiempo que corre que se resiste a huir,
con tus pies que recorren todas las hojas
que desliza el agua de un año sin fecha,
con la pausa albergada entre líneas que hablan

y un desierto en la espera que se deja fluir.



Agua hasta el final de mi garganta, fría
renegando hoy, para volver a ser
el tallo de hierro de hojas prohibidas.

Muy bueno, Carmen, me ha encantado. Un placer seguirte
Besos
Pilar

Muy buen poema, Carmen. Me ha encantado su lectura. Tiene la frescura del agua deslizándose entre un torrente de hermosas metáforas.
Mi felicitación.
Un abrazo.

Mi muy querida amigo Carmen, como fluye y se expresa tu agua desde muy dentro del alma.

Eres un genio !!!!

Mil besos y mil gracias

Curra

Pilar Morte escribió:Muy bueno, Carmen, me ha encantado. Un placer seguirte
Besos
Pilar

Gracias Pilar, el placer es encontrarte en mis letras.
Besos

Ramón Castro Méndez escribió:Muy buen poema, Carmen. Me ha encantado su lectura. Tiene la frescura del agua deslizándose entre un torrente de hermosas metáforas.
Mi felicitación.
Un abrazo.

Gracias Ramón, aprecio tu amable comentario
Abrazo

curra anguiano escribió:Mi muy querida amigo Carmen, como fluye y se expresa tu agua desde muy dentro del alma.

Eres un genio !!!!

Mil besos y mil gracias

Curra

Eres un encanto, amiga Curra.
Gracias a ti.
Besos

Hermoso y evocador poema de Carmen.

Gracias por empujar el poema.
Abrazos, Rafel

Tus manos llenas de agua,
tus cabellos húmedos, toda el agua en tus dedos
y ese tiempo que corre que se resiste a huir,
con tus pies que recorren todas las hojas
que desliza el agua de un año sin fecha,
con la pausa albergada entre líneas que hablan

y un desierto en la espera que se deja fluir.

Bellísimo torrente emocional en el que se desliza el tiempo junto con el intenso e imborrable poder evocador del instante.

Con afecto

Marimar González escribió:

Tus manos llenas de agua,
tus cabellos húmedos, toda el agua en tus dedos
y ese tiempo que corre que se resiste a huir,
con tus pies que recorren todas las hojas
que desliza el agua de un año sin fecha,
con la pausa albergada entre líneas que hablan

y un desierto en la espera que se deja fluir.

Bellísimo torrente emocional en el que se desliza el tiempo junto con el intenso e imborrable poder evocador del instante.

Con afecto

Gracias por tus bellas palabras, Marimar
Besos

Sintmática mezcla de agua y limpieza en forma de lágrimas llenas de emoción y contestura.

un abrazo

Hermoso poema, Carmen. Felicidades y un abrazo.

PD La primera estrofa, en particular, me ha encantado.

He visto desde fuera las puertas de hierro verde que rodean el paraíso prometido y me he quedado a depositar mis sueños justo al lado, esperando que rebroten en secano. Creo que dios estaba de viaje.
Excelente poema, gracias.
Un abrazo

Guillermo Cuesta escribió:Sintmática mezcla de agua y limpieza en forma de lágrimas llenas de emoción y contestura.

un abrazo

Un placer leer tus comentarios.
Gracias, Guillermo
Abrazos