Página 1 de 1

Lo más recóndito del dolor

Publicado: Lun, 27 Jun 2016 22:40
por Alejandro Costa
Son tantos los trasiegos del veneno,
que sin hablar, se enmudece,
sin soñar, se paraliza,
como un tranvía
en la boca de un metro incandescente,
como un paseo inacabado por un bulevar.

Así, enigmática y desorientada,
la vivencia se eterniza,
se convierte en un desierto de hormigas,
un pajar a media capacidad,
o esa casa, derrotada, vacía,
sin el olor imprescindible de la carne.

Todo se enreda entre humaredas,
nieblas impenetrables
convertidas en cortinas opacas
en una noche oscura,
tenebrosa, dilapidada,
donde a veces, el silencio te ensordece,
los relámpagos te ciegan,
y las voces, tan limitadas, te aturden.

Ya no hay tiempo capaz de implorarte,
ni posturas para evitar un desastre
nacido de una ruina que no es ficticia,
que te ha envenenado el rastro de la piel
y traspasado la cortina deforme
de unas venas que sangran y no cicatrizan.

Y todo, porque el veneno del ser humano,
hurga en lo más recóndito del dolor
hasta convertirlo en el mayor de los sufrimientos.

Veneno sin antídoto.

Re: Lo más recóndito del dolor

Publicado: Mar, 28 Jun 2016 9:40
por Carmen Pla
Un grandioso despliegue de imágenes, con ese desgarrador encuentro de la realidad, quizá fuera posible un único antídoto: el amor, para frenar tanto dolor.
Escribes de maravilla, Alejandro, haces que el lector "sienta".
Abrazos

Re: Lo más recóndito del dolor

Publicado: Mar, 28 Jun 2016 9:42
por Ramón Carballal
Profundos versos escritos con la maestría que te caracteriza. Felicidades y un abrazo.

Re: Lo más recóndito del dolor

Publicado: Mar, 28 Jun 2016 11:04
por Ramón Castro Méndez
Alejandro Costa escribió:Son tantos los trasiegos del veneno,
que sin hablar, se enmudece,
sin soñar, se paraliza,
como un tranvía
en la boca de un metro incandescente,
como un paseo inacabado por un bulevar.

Así, enigmática y desorientada,
la vivencia se eterniza,
se convierte en un desierto de hormigas,
un pajal a media capacidad,
o esa casa, derrotada, vacía,
sin el olor imprescindible de la carne.

Todo se enreda entre humaredas,
nieblas impenetrables
convertidas en cortinas opacas
en una noche oscura,
tenebrosa, dilapidada,
donde a veces, el silencio te ensordece,
los relámpagos te ciegan,
y las voces, tan limitadas, te aturden.

Ya no hay tiempo capaz de implorarte,
ni posturas para evitar un desastre
nacido de una ruina que no es ficticia,
que te ha envenenado el rastro de la piel
y traspasado la cortina deforme
de unas venas que sangran y no cicatrizan.

Y todo, porque el veneno del ser humano,
hurga en lo más recóndito del dolor
hasta convertirlo en el mayor de los sufrimientos.

Veneno sin antídoto.

Precioso el poema, con un deje de amargura. Sin duda, un placer de lectura.
Un abrazo.

Re: Lo más recóndito del dolor

Publicado: Mar, 28 Jun 2016 12:08
por Pilar Morte
Cuando a la vida le asalta el dolor buscar antídoto es inevitable. Un poema que llega y nos deja versos hermosos y logrados.
Abrazos
Pilar

Re: Lo más recóndito del dolor

Publicado: Mar, 28 Jun 2016 14:13
por Marisa Peral
[quote="Alejandro Costa"]

Contundente y preciso este poema que hurga en las profundidades del ser humano para inocular ese veneno. Que despliegue de imágenes, Alejandro, he disfrutado este poema, felicidades y gracias por compartir.
Abrazos.

Re: Lo más recóndito del dolor

Publicado: Mar, 28 Jun 2016 17:42
por Guillermo Cumar.
Suspiro de realidades argumentadas y definidas desde tu ilustrante poética,amigo.
buscar soluciones no es facil, siempre hay algo de luz tras la penumbra, para resolver
ambigüedades.

un abrazo