Los muros, desde el olor a café/ A todos los que hicieron d

[curra anguiano]

Los muros, desde el olor a café/ A todos los que hicieron de

A todos los que hicieron del infierno, una luz tenue.

Dibujó el viento, en sus antojos
un parámetro de muros
escasos de sus esenciales, puertas o módulos
rígidos y místicos, en la volatilidad de sus formas
empecinados, y enclaustrados en sus normas.

Todo ese verdor mágico y sus flores
regadas con sentimientos, que tantas veces confluyen en círculos
que unas veces la fortaleza y otra la desesperación, han roto.

Ríos de lágrimas que juegan al escondite
con la nostalgia.

El olor que libre pasea, entre las rosas
esos colores cambiantes, que en días sin sinónimo, tornan
de un gramo de ternura, una sonrisa desdibujada
el compartir en lo mas hondo
o un vaporoso te quiero, que entre los barrotes de jaulas
produce la convulsión de la almas.

Es tan fuerte el frescor de su hierba
que podrías evaporar sobre ella, cada una de tus sombras
esconde cada hoja tantos secretos
instantes que por inéditos
hoy resuenan únicos.

Los bancos perpetuos en confidencias,
plagados de las carcomas de quien tropieza
sujetos en las sonrisas de los que consolando, llenan sus pozos
las mil risas, que sus afanes de lucha forjaron
y una multitud de empezares que los pintaron.

El descenso, matinal a la cruces,
con las que también se dialoga entre muros.

Esas aves, que con su vuelo transcienden,
esas alas, mas potentes, que las esferas que las contemplan
esas plumas, y a todos esos vuelos
ese yo herido que voló entre sus estancias
la música de un rescate
el baile de los latidos
o cosas, reliquias, que aun hoy no tienen nombre conocido

Hermosos sellos que compondrán las historias
de los que en esas escenas, casi de cuento
fueron actores, o solo miradores, pero de todas formas partícipes.

[Rosa Marzal]

A través de su sensibilidad se hace palpable la huella de las almas que habitaron tras la silenciosa mirada de los muros.
Siempre es un placer seguir la senda de tu palabra, querida Curra.

Abrazos.

[Rafel Calle]

Hermoso poema, amiga Curra, que noto más trabajado que de costumbre. Dejas versos muy evocadores en imágenes bien plantadas y bastante bien engarzadas.
Por otra parte, sigue habiendo aspectos gramaticales que dificultan la comprensión, sobre todo, signos de puntuación que no están o que están mal colocados, lo cual en muchas ocasiones origina un caos sintáctico.
En fin, dado que en la Sala de Espera tienes alrededor de 300 trabajos, quizá te convendría ir puliéndolos antes de que vayan a subir al foro de poemas.
Abrazos y salud, mucha salud, compañera.

Pd. Un poema sin signos de puntuación es una boutade o algo mucho peor. Siempre es una grave falta de respeto a los lectores. Si el poeta no sabe colocarlos correctamente y opta por eliminarlos, ese poeta estará condenado a estancarse eternamente en la mediocridad.
La pausa versal siempre se tiene que colocar y nunca puede sustituir los signos de puntuación, nunca, porque es otra razón de estancamiento, esta vez de cariz técnico.

[Ramón Castro Méndez]

Los muros, desde el olor a café/ A todos los que hicieron de

A todos los que hicieron del infierno, una luz tenue.

Dibujó, el viento, en sus antojos
un parámetro de muros
escasos de sus esenciales, puertas o módulos
rígidos y místicos, en la volatilidad de sus formas
empecinados, enclaustrados en sus normas.

Todo ese verdor mágico y sus flores
regadas con sentimientos, que tantas veces confluyen en círculos
que unas veces la fortaleza y otra la desesperación han roto.

Ríos de lágrimas que juegan al escondite
con la nostalgia.

El olor que libre pasea, entre las rosas
esos colores cambiantes, que en días son sinónimo
de un gramo de ternura, una sonrisa desdibujada
el compartir en lo mas hondo
o un vaporoso te quiero, que entre los barrotes de jaulas
produce la comv-ulsión de la almas
es tan fuerte el frescor de su hierba
que podrías evaporar sobre ella, cada una de tus sombras
esconde cada hoja tantos secretos
instantes que por inéditos
hoy resuenan únicos.

Los bancos perpetuos en confidencias,
plagados de las carcomas de quien tropieza
sujetos en las sonrisas de los que consolando, llenan sus pozos
las mil risas, que sus afanes de lucha forjaron
y una multitud de empezares que los pintaron.

El descenso, matinal a la cruces,
con las que también se dialoga entre muros.

Esas aves, que con su vuelo transcienden,
esas alas, mas potentes, que las esferas que las contemplan
esas plumas, y a todos esos vuelos
ese yo herido que voló entre sus estancias
la música de un rescate
el baile de los latidos
o cosas, reliquias, que aun hoy no tienen nombre conocido

Hermosos sellos que compondrán las historias
de los que en esas escenas, casi de cuento
fueron actores, o solo miradores, pero de todas formas partícipes.

Hermoso poema, con cierto tono de nostalgia que rememora otras instancia plenas de sensibilidad y colorido.
Abrazos.

[curra anguiano]

Querido Rafa
He intentado arreglarlo, pero sabes que soy torpe
Lo he colado por la emoción del momento, tras un largo ingreso ...
Gracias por tu consejos, siempre ...

Mil besos


Curra

[Hallie Hernández Alfaro]

A mi me ha encantado, querida Curra; hay una imaginación que todo lo plasma, que elige el sentimiento, la fuerza, los colores.

Ah y nada de torpe, tu sensibilidad se abre paso con mucha inteligencia.

Beso grande.

[Armilo Brotón]

"A todos los que hicieron del infierno
una luz tenue"

Curra, estos dos versos los grabaré en mi memoria poética. Ellos solos valen un tratado de poesía. Ellos son el poema.
Yo te animo a que sigas luchando, la palabra es un trampolín. Incide directamente en nuestro cerebro y lo impele a crear alternativas. No cejes ante nada, trasmites emoción y eso es muy importante.

Un cordial saludo.

[Óscar Distéfano]

Ha sido grato leerte, amiga (como siempre). Tu poesía crece cada día más y tu voz poética se hace potente. Albricias.

Un abrazo grande.
Óscar

[Alejandro Costa López]

Magnífico.

Me ha encantado.

Un abrazo.

[E. R. Aristy]

Los muros, desde el olor a café/ A todos los que hicieron de

A todos los que hicieron del infierno, una luz tenue.

Dibujó el viento, en sus antojos
un parámetro de muros
escasos de sus esenciales, puertas o módulos
rígidos y místicos, en la volatilidad de sus formas
empecinados, y enclaustrados en sus normas.

Todo ese verdor mágico y sus flores
regadas con sentimientos, que tantas veces confluyen en círculos
que unas veces la fortaleza y otra la desesperación, han roto.

Ríos de lágrimas que juegan al escondite
con la nostalgia.

El olor que libre pasea, entre las rosas
esos colores cambiantes, que en días sin sinónimo, tornan
de un gramo de ternura, una sonrisa desdibujada
el compartir en lo mas hondo
o un vaporoso te quiero, que entre los barrotes de jaulas
produce la convulsión de la almas.

Es tan fuerte el frescor de su hierba
que podrías evaporar sobre ella, cada una de tus sombras
esconde cada hoja tantos secretos
instantes que por inéditos
hoy resuenan únicos.

Los bancos perpetuos en confidencias,
plagados de las carcomas de quien tropieza
sujetos en las sonrisas de los que consolando, llenan sus pozos
las mil risas, que sus afanes de lucha forjaron
y una multitud de empezares que los pintaron.

El descenso, matinal a la cruces,
con las que también se dialoga entre muros.

Esas aves, que con su vuelo transcienden,
esas alas, mas potentes, que las esferas que las contemplan
esas plumas, y a todos esos vuelos
ese yo herido que voló entre sus estancias
la música de un rescate
el baile de los latidos
o cosas, reliquias, que aun hoy no tienen nombre conocido

Hermosos sellos que compondrán las historias
de los que en esas escenas, casi de cuento
fueron actores, o solo miradores, pero de todas formas partícipes.

Hermoso y reflexive poema, Curra. Creas una atmosfera surreal a esos pasadizos por donde dejamos y tomamos parte de nuestra esencia. Un abrazo, ERA

[curra anguiano]

Mil gracias rosa, eres un cielo

Curra

[Carmen Pla]

Todo un despliegue de imágenes y sentimientos, el lector se deja llevar y vive tus versos.
Un placer leerte, Curra.
Un gran abrazo y deseo que te encuentres mucho mejor.

[curra anguiano]

Muchas gracias Ramon, eres un cielo

Mil besos

Curra

[Pilar Morte]

Dulces y sensibles versos. Me gustó leerlos
Abrazos
Pilar

[Guillermo Cumar.]

Tu bien inspirado poema va rondando en derredor de pautas y sentires.
Me encantó recorrer tus versos y su disposición poética lustrosa e ilustrativa.

un abrazo