Editorial Alaire

Hay una tensa quietud
en tus huesos, ya pálidos de cansancio.
Aire y desencanto,
que el viento arrastra al vacío.

Cuídate de ti, teme por ti mismo,
pues la rosa no puede nacer en lodazal,
y la sonrisa palideció en tus labios
hasta convertirse en tu mortaja.

Algo sé de mí misma, a pesar de mí;
algo que se eleva presto,
y no responde a las voces del ayer,
que se ahogaron en su llanto.

Un puente se construye ante mis ojos
mansamente, entre las estrellas,
para que recorra el camino de la medianoche
y estoy presa de amor por recorrerlo.

Te echaba en falta y vienes con un hermoso poema que recorre el pasado para estar en el presente con esperanza. Me gustaron tus versos
Abrazos
Pilar

Un hermoso poema que he disfrutado. Me alegra tu regreso. Unha aperta.

Un bello poema Carmen en el que el tono lírico va in crescendo a cada paso, a cada verso, pero sentí que te arrebujaste en el último en palabras ya intuidas, que no incendió como pedía a gritos el poema.

Un cordial saludo

Pilar Morte escribió:Te echaba en falta y vienes con un hermoso poema que recorre el pasado para estar en el presente con esperanza. Me gustaron tus versos
Abrazos
Pilar

Gracias Pilar, por tu amable lectura, me alegra si te gustaron los versos.

Abrazos para ti.

Carmen

Ramón Carballal escribió:Un hermoso poema que he disfrutado. Me alegra tu regreso. Unha aperta.

Muchas gracias, Ramón, por pasar por mi ventana, por tu amable comentario.

Unha forte aperta, amigo.

Carmen

Miguel Ángel Martínez escribió:Un bello poema Carmen en el que el tono lírico va in crescendo a cada paso, a cada verso, pero sentí que te arrebujaste en el último en palabras ya intuidas, que no incendió como pedía a gritos el poema.

Un cordial saludo

Gracias, por pasar por mis versos, y por tu comentario. Yo, seguro que escribí lo que a mí me pedía el cuerpo.

Un cordial saludo.

Carmen

Lo leí ayer, querida Carmen, enseguida que lo editaste; se me quedó dando vueltas entre el alma y esa órbita indefinible que acarrea las emociones fervorosas. A mi me ha ocurrido con el verso final una fortísima identificación, un anillo de luz parece desplomarse sobre la inquietud de la tierra para dolerse en la incipiente semilla...

Un gusto grande leerte, abrazos y felicidad.

Bello y sentido poema. Me encantó, literalmente.
Besos, querida poeta

Un poema bello que he leido con mucho placer. Siempre un gusto encontrarte.
Un abrazo.
Pepa

Un poema con ese sello de belleza y sensibilidad que te caracteriza. Pasar por tus trazos es toda una experiencia, que disfruto mucho. Un gran abrazo, poeta.

Carmen,

un placer verte de nuevo publicando, amiga. Me ha gustado mucho tu bello poema. Destacaría el tono clasicista de algunos versos, a mí me chifla eso:

pues la rosa no puede nacer en lodazal,

muy clásico, casi shakesperiano, me encanta el lirismo retro que desprenden este tipo de versos, no puedo evitarlo, la voluntad de inteligibilidad, el ritmo confiable, la metáfora alrededor de la rosa y el lodo, que no por su aire ya usado dejará nunca de evocar y elevar el espíritu, al menos el mío. Me encanta.

Comentaría algo sobre algunas comas al final de versos y su influencia sobre el encabalgamiento. El primero me parece muy bueno:

Hay una tensa quietud
en tus huesos, ya pálidos de cansancio.

Así sin coma, que el encabalgamiento aporte polisemia: versos por sí mismos tiene sentido, versos juntos tienen otro que lo complementa.

Sin embargo estas comas al final de verso yo las quitaría para mejorar el encabalgado:

y la sonrisa palideció en tus labios, (esta coma)
hasta convertirse en tu mortaja.

Un puente se construye ante mis ojos, (esta coma)
mansamente, entre las estrellas,

Y al revés, añadiría una aquí, o incluso punto y coma:

Algo sé de mí misma, a pesar de mí; (aquí)
algo que se eleva presto,

Aquí no hay encabalgado y creo que es mejor que el lector lo sepa al terminar el primer verso.

Un abrazo, Carmen.

Sensibilidad, claridad, son características de tu voz poética, y una belleza verdadera que nace, creo, no sólo del poeta, sino de la persona, Me ha encantado leerte, Carmen. Recibe mis abrazos y feliz fin de semana, amiga.

Carmen López escribió:Hay una tensa quietud
en tus huesos, ya pálidos de cansancio.
Aire y desencanto,
que el viento arrastra al vacío.

Cuídate de ti, teme por ti mismo,
pues la rosa no puede nacer en lodazal,
y la sonrisa palideció en tus labios,
hasta convertirse en tu mortaja.

Algo sé de mí misma, a pesar de mí
algo que se eleva presto,
y no responde a las voces del ayer,
que se ahogaron en su llanto.

Un puente se construye ante mis ojos,
mansamente, entre las estrellas,
para que recorra el camino de la medianoche
y estoy presa de amor por recorrerlo.

Oh! Que belleza, Carmen! Uno de los mas bellos y dicientes poemas que he leido ultimamente. Un abrazo, ERA

Hallie Hernández Alfaro escribió:Lo leí ayer, querida Carmen, enseguida que lo editaste; se me quedó dando vueltas entre el alma y esa órbita indefinible que acarrea las emociones fervorosas. A mi me ha ocurrido con el verso final una fortísima identificación, un anillo de luz parece desplomarse sobre la inquietud de la tierra para dolerse en la incipiente semilla...

Un gusto grande leerte, abrazos y felicidad.

Gracias Hallie, , por el precioso comentario que me dejas, por pasar por esta ventana, por tus palabras que siempre llevan el positivismo que te acompaña y siempre suma.

Salud, abrazotes y felicidad, para ti y los tuyos.

Carmen