La Editorial Alaire, auspiciada por la Academia de Poesía Alaire, pone gratuitamente a disposición de sus foristas registrados, varios foros de poesía, prosa literaria, debates…, para que puedan publicar sus obras e interactuar entre ellos, así como, la tienda de libros donde se muestran las publicaciones, tanto en papel como en formato digital, estos mediante descarga gratuita. La razón de ser de nuestros foros se centra en promocionar la poesía, mediante las obras de los autores que participan en la plataforma de la Academia de Poesía Alaire. La promoción de la poesía, a nivel del mundo de habla hispana, conlleva una enorme responsabilidad, por ello, pedimos la máxima implicación de todos los miembros de Alaire. Vale recordar al gran maestro Dumas: uno para todos y todos para uno. Muchas gracias por todo, queridos compañeros.
La muerte es algo que no debemos temer porque, mientras somos, la muerte no es y cuando la muerte es, nosotros no somos.
Antonio Machado (1875-1939) Poeta y prosista español.
No me dejes donde no quiero estar.
Llevo encima la maleta del tiempo,
con ella viajo, con ella llegué y con ella me marcharé,
porque… ¿qué harías si no quisiera conocerte?
acaso, ¿llamaría el aliento a la clemencia?
¿o en los laureles de tu maleza,
no existen claveles de clemencia?
Acércate cuanto quieras,
lame mis heridas, y si quieres,
conviértelas en hemorragia,
teje tu red y enrédame en tus ausencias,
pero si aún no es el momento,
si en ese instante el reloj no se ha detenido,
¿para qué seguir insistiendo?
la carne termina pudriéndose,
la piel mancilla lentamente su tejido,
y en cualquier segundo,
la manecilla se detiene, el mundo se para
y yo me convertiré en presa fácil, sin huida.
La herida, será simple despojo,
un manjar más que exquisito,
vivir dejará de ser un lujo permitido
con un billete en la solapa dirección al destino.
No existirá nunca nada, tan paciente y segura en la espera.
¿Crees que ya soy tuyo?
Anda, siéntate a mi lado
y compartamos los primeros instantes cara a cara,
es posible que la mañana ya no me tienda la mano,
Hace frío,
cierra la ventana,
empiezo a sentirme helado.
Salud, paz y felicidad.
No sé por qué, no sé por qué ni cómo
me perdono la vida cada día.…
La muerte es algo que no debemos temer porque, mientras somos, la muerte no es y cuando la muerte es, nosotros no somos.
Antonio Machado (1875-1939) Poeta y prosista español.
No me dejes donde no quiero estar.
Llevo encima la maleta del tiempo,
con ella viajo, con ella llegué y con ella me marcharé,
porque… ¿qué harías si no quisiera conocerte?
acaso, ¿llamaría el aliento a la clemencia?
¿o en los laureles de tu maleza,
no existen claveles de clemencia?
Acércate cuanto quieras,
lame mis heridas, y si quieres,
conviértelas en hemorragia,
teje tu red y enrédame en tus ausencias,
pero si aún no es el momento,
si en ese instante el reloj no se ha detenido,
¿para qué seguir insistiendo?
la carne termina pudriéndose,
la piel mancilla lentamente su tejido,
y en cualquier segundo,
la manecilla se detiene, el mundo se para
y yo me convertiré en presa fácil, sin huida.
La herida, será simple despojo,
un manjar más que exquisito,
vivir dejará de ser un lujo permitido
con un billete en la solapa dirección al destino.
No existirá nunca nada, tan paciente y segura en la espera.
¿Crees que ya soy tuyo?
Anda, siéntate a mi lado
y compartamos los primeros instantes cara a cara,
es posible que la mañana ya no me tienda la mano,
Hace frío,
cierra la ventana,
empiezo a sentirme helado.
Mi querido Jandro. El comienzo del poema ya me descubre que voy a leer una buena obra.
Esa herida se palma y se siente...
Gracias por el ratito de lectura, sabes que eres grande para mí.
Besitos poeta.
Me acostumbré a perseverar
lo que otros tenían
hasta que el azar me descubrió
Silvia Savall[/i]
La muerte es algo que no debemos temer porque, mientras somos, la muerte no es y cuando la muerte es, nosotros no somos.
Antonio Machado (1875-1939) Poeta y prosista español.
No me dejes donde no quiero estar.
Llevo encima la maleta del tiempo,
con ella viajo, con ella llegué y con ella me marcharé,
porque… ¿qué harías si no quisiera conocerte?
acaso, ¿llamaría el aliento a la clemencia?
¿o en los laureles de tu maleza,
no existen claveles de clemencia?
Acércate cuanto quieras,
lame mis heridas, y si quieres,
conviértelas en hemorragia,
teje tu red y enrédame en tus ausencias,
pero si aún no es el momento,
si en ese instante el reloj no se ha detenido,
¿para qué seguir insistiendo?
la carne termina pudriéndose,
la piel mancilla lentamente su tejido,
y en cualquier segundo,
la manecilla se detiene, el mundo se para
y yo me convertiré en presa fácil, sin huida.
La herida, será simple despojo,
un manjar más que exquisito,
vivir dejará de ser un lujo permitido
con un billete en la solapa dirección al destino.
No existirá nunca nada, tan paciente y segura en la espera.
¿Crees que ya soy tuyo?
Anda, siéntate a mi lado
y compartamos los primeros instantes cara a cara,
es posible que la mañana ya no me tienda la mano,
Hace frío,
cierra la ventana,
empiezo a sentirme helado.
Mi querido Jandro. El comienzo del poema ya me descubre que voy a leer una buena obra.
Esa herida se palma y se siente...
Gracias por el ratito de lectura, sabes que eres grande para mí.
Besitos poeta.
Lo sé y lo agradezco con toda el alma.
Mil gracias y un besazo corazón.
Salud, paz y felicidad.
No sé por qué, no sé por qué ni cómo
me perdono la vida cada día.…
La muerte es algo que no debemos temer porque, mientras somos, la muerte no es y cuando la muerte es, nosotros no somos.
Antonio Machado (1875-1939) Poeta y prosista español.
No me dejes donde no quiero estar.
Llevo encima la maleta del tiempo,
con ella viajo, con ella llegué y con ella me marcharé,
porque… ¿qué harías si no quisiera conocerte?
acaso, ¿llamaría el aliento a la clemencia?
¿o en los laureles de tu maleza,
no existen claveles de clemencia?
Acércate cuanto quieras,
lame mis heridas, y si quieres,
conviértelas en hemorragia,
teje tu red y enrédame en tus ausencias,
pero si aún no es el momento,
si en ese instante el reloj no se ha detenido,
¿para qué seguir insistiendo?
la carne termina pudriéndose,
la piel mancilla lentamente su tejido,
y en cualquier segundo,
la manecilla se detiene, el mundo se para
y yo me convertiré en presa fácil, sin huida.
La herida, será simple despojo,
un manjar más que exquisito,
vivir dejará de ser un lujo permitido
con un billete en la solapa dirección al destino.
No existirá nunca nada, tan paciente y segura en la espera.
¿Crees que ya soy tuyo?
Anda, siéntate a mi lado
y compartamos los primeros instantes cara a cara,
es posible que la mañana ya no me tienda la mano,
Hace frío,
cierra la ventana,
empiezo a sentirme helado.
Alejandro: Un poema profundamente lírico, de una extraordinaria
belleza, en sus formas y metáforas, se puede apreciar, junto al
amor, lo trágico, : Empiezo a sentirme helado.
Felicidades poeta, un aplauso
Rafael
La poesía es la más depurada manifestación, por medio de la palabra, de los sentimientos,
emociones y reflexiones que puede expresar el ser humano, y, al tiempo que nos hace sentir
nos ennoblece. Soy tan solo un leve intento de aproximación a la poesía.
Ah, y se me olvidó el simbólico abrazo, aunque ya sabes que en `persona
lo hemos dado., allá va
Un abrazo poeta
Rafael.
La poesía es la más depurada manifestación, por medio de la palabra, de los sentimientos,
emociones y reflexiones que puede expresar el ser humano, y, al tiempo que nos hace sentir
nos ennoblece. Soy tan solo un leve intento de aproximación a la poesía.
La muerte es algo que no debemos temer porque, mientras somos, la muerte no es y cuando la muerte es, nosotros no somos.
Antonio Machado (1875-1939) Poeta y prosista español.
No me dejes donde no quiero estar.
Llevo encima la maleta del tiempo,
con ella viajo, con ella llegué y con ella me marcharé,
porque… ¿qué harías si no quisiera conocerte?
acaso, ¿llamaría el aliento a la clemencia?
¿o en los laureles de tu maleza,
no existen claveles de clemencia?
Acércate cuanto quieras,
lame mis heridas, y si quieres,
conviértelas en hemorragia,
teje tu red y enrédame en tus ausencias,
pero si aún no es el momento,
si en ese instante el reloj no se ha detenido,
¿para qué seguir insistiendo?
la carne termina pudriéndose,
la piel mancilla lentamente su tejido,
y en cualquier segundo,
la manecilla se detiene, el mundo se para
y yo me convertiré en presa fácil, sin huida.
La herida, será simple despojo,
un manjar más que exquisito,
vivir dejará de ser un lujo permitido
con un billete en la solapa dirección al destino.
No existirá nunca nada, tan paciente y segura en la espera.
¿Crees que ya soy tuyo?
Anda, siéntate a mi lado
y compartamos los primeros instantes cara a cara,
es posible que la mañana ya no me tienda la mano,
Hace frío,
cierra la ventana,
empiezo a sentirme helado.
El poema llega, poeta! Misión cumplida! Un abrazo!
La muerte es algo que no debemos temer porque, mientras somos, la muerte no es y cuando la muerte es, nosotros no somos.
Antonio Machado (1875-1939) Poeta y prosista español.
No me dejes donde no quiero estar.
Llevo encima la maleta del tiempo,
con ella viajo, con ella llegué y con ella me marcharé,
porque… ¿qué harías si no quisiera conocerte?
acaso, ¿llamaría el aliento a la clemencia?
¿o en los laureles de tu maleza,
no existen claveles de clemencia?
Acércate cuanto quieras,
lame mis heridas, y si quieres,
conviértelas en hemorragia,
teje tu red y enrédame en tus ausencias,
pero si aún no es el momento,
si en ese instante el reloj no se ha detenido,
¿para qué seguir insistiendo?
la carne termina pudriéndose,
la piel mancilla lentamente su tejido,
y en cualquier segundo,
la manecilla se detiene, el mundo se para
y yo me convertiré en presa fácil, sin huida.
La herida, será simple despojo,
un manjar más que exquisito,
vivir dejará de ser un lujo permitido
con un billete en la solapa dirección al destino.
No existirá nunca nada, tan paciente y segura en la espera.
¿Crees que ya soy tuyo?
Anda, siéntate a mi lado
y compartamos los primeros instantes cara a cara,
es posible que la mañana ya no me tienda la mano,
Hace frío,
cierra la ventana,
empiezo a sentirme helado.
Alejandro: Un poema profundamente lírico, de una extraordinaria
belleza, en sus formas y metáforas, se puede apreciar, junto al
amor, lo trágico, : Empiezo a sentirme helado.
Felicidades poeta, un aplauso
Rafael
Me alegra verte, "oírte" sentirte.
Me alegra saber que has sentido la esencia que quise darle a estos versos. Y me alegra saber que te han gustado.
Un fuerte abrazo, compañero.
Salud, paz y felicidad.
No sé por qué, no sé por qué ni cómo
me perdono la vida cada día.…
La muerte es algo que no debemos temer porque, mientras somos, la muerte no es y cuando la muerte es, nosotros no somos.
Antonio Machado (1875-1939) Poeta y prosista español.
No me dejes donde no quiero estar.
Llevo encima la maleta del tiempo,
con ella viajo, con ella llegué y con ella me marcharé,
porque… ¿qué harías si no quisiera conocerte?
acaso, ¿llamaría el aliento a la clemencia?
¿o en los laureles de tu maleza,
no existen claveles de clemencia?
Acércate cuanto quieras,
lame mis heridas, y si quieres,
conviértelas en hemorragia,
teje tu red y enrédame en tus ausencias,
pero si aún no es el momento,
si en ese instante el reloj no se ha detenido,
¿para qué seguir insistiendo?
la carne termina pudriéndose,
la piel mancilla lentamente su tejido,
y en cualquier segundo,
la manecilla se detiene, el mundo se para
y yo me convertiré en presa fácil, sin huida.
La herida, será simple despojo,
un manjar más que exquisito,
vivir dejará de ser un lujo permitido
con un billete en la solapa dirección al destino.
No existirá nunca nada, tan paciente y segura en la espera.
¿Crees que ya soy tuyo?
Anda, siéntate a mi lado
y compartamos los primeros instantes cara a cara,
es posible que la mañana ya no me tienda la mano,
Hace frío,
cierra la ventana,
empiezo a sentirme helado.
El poema llega, poeta! Misión cumplida! Un abrazo!
Lo peor, o es posible, que lo mejor, es que es seguro que nos llegará el momento.
El círculo se cerrará y nuestro trabajo en esta tierra terminará para convertirnos en abono de sus fauces.
Gracias siempre por tu amabilidad.
Un abrazo.
Salud, paz y felicidad.
No sé por qué, no sé por qué ni cómo
me perdono la vida cada día.…