Brisa
Publicado: Sab, 19 Mar 2016 0:39
Hoy, es la cúpula de un ayer fenecido,
el abanico de un mañana por llegar,
la apertura de la última puerta del camino,
la esencia que resta de las ausencias,
la definitiva, tras el escalón final.
Yo, rendido, sentado frente a las virutas
que adornan las grietas de la ventana,
encallado en el pasto luminoso de su apertura,
esa, que no disimula mis arrugas,
mis canas, que engaña al gris de mi deshielo.
Tengo la mente desganada,
y como en un paraíso desértico,
me muevo al límite de las corrientes
bajo un sudor incandescente,
bajo tormentas de soledad enquistadas,
con la locura desordenando cenizas de mi débil hoguera.
Y..., como dormido, oigo sus pisadas,
escucho tacones en la lejanía,
voces que me llaman,
suspirar de agonía, cantos de sirenas, olas infinitas,
percibo el óxido de las cadenas de un barco,
la brisa que en el puerto del destino
reclama mi partida.
La ventana se astilla, se cierra,
el aroma, acaso de mañana, se aleja.
Mi yo, huérfano del ayer, esclavo de hoy,
se prepara para un viaje sin mañana.
Oscuridad, silencio, la nada,
el pasado ayer,
el tiempo,
hoy, se derrama.
el abanico de un mañana por llegar,
la apertura de la última puerta del camino,
la esencia que resta de las ausencias,
la definitiva, tras el escalón final.
Yo, rendido, sentado frente a las virutas
que adornan las grietas de la ventana,
encallado en el pasto luminoso de su apertura,
esa, que no disimula mis arrugas,
mis canas, que engaña al gris de mi deshielo.
Tengo la mente desganada,
y como en un paraíso desértico,
me muevo al límite de las corrientes
bajo un sudor incandescente,
bajo tormentas de soledad enquistadas,
con la locura desordenando cenizas de mi débil hoguera.
Y..., como dormido, oigo sus pisadas,
escucho tacones en la lejanía,
voces que me llaman,
suspirar de agonía, cantos de sirenas, olas infinitas,
percibo el óxido de las cadenas de un barco,
la brisa que en el puerto del destino
reclama mi partida.
La ventana se astilla, se cierra,
el aroma, acaso de mañana, se aleja.
Mi yo, huérfano del ayer, esclavo de hoy,
se prepara para un viaje sin mañana.
Oscuridad, silencio, la nada,
el pasado ayer,
el tiempo,
hoy, se derrama.