Editorial Alaire

Son constantes las muestras de desagrado,
porque ya he aprendido todo, soy superlisto,
arrugo la nariz, es un gesto supremo,
mis pelotas están vacías, mis meninges llenas.

Mira bonito, cómete las lentejas o te sodomizo
con el mango de la espumadera;
una no está todo el día tragando semen
para que el niñito rechace la legumbre.

Ay, si te viera tu padre, que en gloria esté,
seguro que se le saltaban las lágrimas.
Sacaría brillo a tu pelo con su saliva;
después, como es menester, te cocería a hostias.

La gente me insulta, no entiende mis metáforas,
cuando digo que Zeus es trino se ríen en mi cara.
Me hablan de Dios, Jesús, ¡Espíritu Santo!
yo sólo creo en Thais, y en la Saritísima.

Y mi último redoble, las bailarinas
¿van de puntillas para parecer más altas?
¿no podrían subir un poco el escenario?
No sé, lo vi en Internet, me hizo gracia,

hace ya algunos años,
cuando no era superlisto.
Y mi nariz sin arrugas
elucubraba vida.



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Muy buena protesta...los listos nos resistimos a lo usual...

Un abrazo

"Sacaría brillo a tu pelo con su saliva;
después, como es menester, te cocería a hostias"

Sí, y es cierto que hubo un tipo de padres, que los hay todavía, que vivían y viven en esta esquizofrenia.

Hasta pronto.

Ay, si te viera tu padre, que en gloria esté,
seguro que se le saltaban las lágrimas.
Sacaría brillo a tu pelo con su saliva;
después, como es menester, te cocería a hostias.

Afortunadamente va quedando atras ese tipo de educación

Enhorabuena

Jorge