Editorial Alaire

Brillan mis zapatos
pero no brillan por fuera
brillan por dentro
estan llenos de cristales
y me desangran a cada paso,
tengo frio
de ese frio de los pueblos castellanos
ese frio que se puede tocar con la manos
cuando cae el sol tras la montaña
ese frio que te acaricia la cara
con sus dedos de cuchillas
y la deja llena de surcos por donde luego bajan los rios
que desbordan las injusticias
y las buenas películas.
Llevo un silencio que reina a varios km
el aullido de un perro en la lejania
el silencio y una campana en una iglesia
tocando las 12
cuando entro en el bar,
llevo una columna de humo difuminada
un arbol inmenso azotado por el viento
una cigüeña planenado sobre los tejados
y su sombra sobre la calle
cuando me siento en la barra,
una ventana silbando
el reloj de pared sonando en casa de una abuela
el cencerro de una vaca
en el prado lejano
la ultima puerta que se cierra de noche en el pueblo
y un candado fuerte sellándola
cuando espero la copa,
y al fondo
acechando
inmensa
la montaña nevada
cada vez mas ausente
nadie la nombra
pero ahi está
en mi mirada perdida en las botellas de la pared
mi mirada con los reflejos del fuego de una chimenea
mi mirada el sonido de un hacha cortando leña
mi mirada
y tres funerales y tres renacimientos
dormirse junto a la voz de los padres
y la television
la pierna desnuda de una vecina
llena de sexo
llevo un silencio de montaña sagrado
mientras bebo apoyado,
llevo las calles estrechas
las esquinas oscuras
las farolas alumbrando unos copos que caen
en silencio
las piedras irregulares
medievales
y llevo la noche estrellada
en la inmensa
cúpula
con los satelites
y las constelaciones
y un agujero negro hacia otra dimension
cuando sueño
que no estoy atrapado en la ciudad

Te felicito, Julian, por este poema. Has marcado la sobriedad castellana, el frío de pecado de los Santos Inocentes, los adoquines medievales y la vieja piedra. Y ese silencio que traspasa, que te hace interiorizar todo: alegrias, penas, etc...
Salud.

Estoy totalmente de acuerdo con la opinión de Tigana. Un poema donde el ambiente está perfectamente dibujado.

Un cordial saludo

Tigana Nelson escribió:Te felicito, Julian, por este poema. Has marcado la sobriedad castellana, el frío de pecado de los Santos Inocentes, los adoquines medievales y la vieja piedra. Y ese silencio que traspasa, que te hace interiorizar todo: alegrias, penas, etc...
Salud.

Gracias Tigana, anda que no son bonitos los pueblos en invierno, demasiado bonitos y silenciosos. Un saludo compañera

Armilo Brotón escribió:Estoy totalmente de acuerdo con la opinión de Tigana. Un poema donde el ambiente está perfectamente dibujado.

Un cordial saludo

Gracias compañero, describir es facil, mas o menos esas cosas tienen los pueblos. Un saludo

El poema trasmite una intensa sensación de aislamiento y recogimiento. El ambiente de esos pueblos -éste al menos tiene bar- está muy conseguido en los versos. Un placer la lectura.
Un abrazo.
Pepa

Julian Enriquez escribió:Brillan mis zapatos
pero no brillan por fuera
brillan por dentro
estan llenos de cristales
y me desangran a cada paso
tengo frio
de ese frio de los pueblos castellanos
que se puede tocar con la manos
cuando va cayendo el sol tras la montaña
ese frio que te acaricia la cara
con sus dedos de cuchillas
y la deja llena de surcos por donde luego bajan los rios
por donde desbordan las buenas peliculas
y las injusticias del telediario
El silencio reina a varios km
solo se escucha el aullido de un perro
en la lejania
el silencio y una campana en una iglesia
tocando las 12
cuando entro en el bar
una columna de humo difuminada
un arbol inmenso azotado por el viento
una cigueña planenado sobre los tejados
y su sombra sobre la calle
cuando camino hacia la barra
una ventana silbando
el reloj de pared sonando en casa de una abuela
el cencerro de una vaca
en el prado lejano
la ultima puerta que se cierra de noche
un candado fuerte sellándola
al sentarme en la mesa
y al fondo
acechando
inmensa
la montaña nevada
cada vez mas ausente
nadie la nombra
pero ahi está
mi mirada perdida en las botellas de la pared
mi mirada con los reflejos del fuego de una chimenea
mi mirada el reflejo de una espada
mi mirada
y tres funerales y tres nacimientos
dormirse junto a la voz de los padres
y la television
la pierna desnuda de una vecina
llena de sexo
llevo un silencio de montaña sagrado
cuando entro en el bar
llevo las calles estrechas
las esquinas oscuras
las farolas alumbrando unos copos que caen
el silencio
las piedras mal cortadas
medievales
y llevo la noche estrellada
en la inmensa
cúpula
con los satelites
y las constelaciones
y un agujero negro hacia otra dimension
cuando sueño
que no estoy atrapado en la ciudad

Ambientas muy bien el escenario de ese pueblo, a la vez sugiriendo la vastedad abierta de la mente del narrador, ese otro escenario se alza en un símbolo prominente: "llevo un silencio de montaña sagrado". No dejas piedra sin remover, y llegas después de un abarcador reconocimiento del yo y su entorno, llegas a otra dimensión onírica, o subconsciente. Creo que el titulo es rotundo. Estas son mis humildes interpretaciones. Espero leer mas de tu arte poética, Julián. Un abrazo, ERA

Un descriptivo y buen poema que se lee con interés y placidez .
un abrazo

Josefa A. Sánchez escribió:El poema trasmite una intensa sensación de aislamiento y recogimiento. El ambiente de esos pueblos -éste al menos tiene bar- está muy conseguido en los versos. Un placer la lectura.
Un abrazo.
Pepa

Pepa, me alegra que te haya gustado, el poema en realidad es descripcion de se ambiente.... un saludo y gracias de nuevo amiga Pepa

E. R. Aristy escribió:

Julian Enriquez escribió:Brillan mis zapatos
pero no brillan por fuera
brillan por dentro
estan llenos de cristales
y me desangran a cada paso
tengo frio
de ese frio de los pueblos castellanos
...........
y las constelaciones
y un agujero negro hacia otra dimension
cuando sueño
que no estoy atrapado en la ciudad

Ambientas muy bien el escenario de ese pueblo, a la vez sugiriendo la vastedad abierta de la mente del narrador, ese otro escenario se alza en un símbolo prominente: "llevo un silencio de montaña sagrado". No dejas piedra sin remover, y llegas después de un abarcador reconocimiento del yo y su entorno, llegas a otra dimensión onírica, o subconsciente. Creo que el titulo es rotundo. Estas son mis humildes interpretaciones. Espero leer mas de tu arte poética, Julián. Un abrazo, ERA

Genial ERA, tu comentario mejora el texto, muchas gracias

Guillermo Cuesta escribió:Un descriptivo y buen poema que se lee con interés y placidez .
un abrazo

Gracias Guillermo, es todo descripcion, un abrazo compañero

Me gusta mucho Julián ese interior que se inunda de esa desnudez de la tierra, y viceversa, los sonidos, como latidos que acercan y alejan, la sensación de soledad. Se dibujan transparentes estas impresiones, un lienzo que se habita desde tus palabras.
Un placer, un abrazo

Ventura Morón escribió:Me gusta mucho Julián ese interior que se inunda de esa desnudez de la tierra, y viceversa, los sonidos, como latidos que acercan y alejan, la sensación de soledad. Se dibujan transparentes estas impresiones, un lienzo que se habita desde tus palabras.
Un placer, un abrazo

Genial este comentario Ventura, otro trailer de una pelicula que es mejor que la pelicula, gracias compañero y un abrazo tambien para ti