Editorial Alaire

pio espejo escribió:Cada vez que me afeito me fijo

en el rostro que el espejo refleja.
No me reconozco,

parezco un trilobite salido de un museo
o de un libro de paleontología.
¿Por qué no nací rubio o pelirrojo o calvo?
¿O negro? ¿O chino? ¿O nací pájaro?
¿O más alto o más bajo? ¿O no nací?

Sobre todo me digo cuando sigo el curso
de mi cara, después del "after shave":
¿Por qué tengo consciencia? ¿Mente?
¿Por qué me hago preguntas?
¿Quién soy en realidad?¿Qué hay detrás
de ese hombre raro que me mira curioso?

Si lo que refleja el espejo es real
o lo real se oculta tras el reflejo, no sé.

Me voy a dejar la barba—está de moda—
y así no haré el tonto si me voy a afeitar.


Pio Espejo

Detrás de lo jocoso se esconde la interrogante sobre el ser, el enigma de la fatalidad. Yo no creo que la barba solucione el problema, ni siquiera una máscara. Ahí estará siempre la gran incógnita. Me ha gustado el poema por su claridad y por su mensaje ontológico. El poema incita al contrapunto.

Un abrazo, amigo.
Óscar

¿Pudiera ser que la culpa fuera del espejo?

entre la dosis de humor y de ceguera hay verso sutil y agudo
para confesar los desperfectos que no existen.
Cada cual es cada cual sintiendo sus caudales.

un abrazo

Buen poema nos dejas Pio. Tiene su enjundia. Lo disfruté leyendo

saludos

rafael

Hay muchas preguntas que dejas sin respuesta poniendo un tono irónico y acertado. Un placer leerte
Besos
Pilar

Hermoso e interesante trabajo de Pío.