La conferencia

[Óscar Distéfano]

La conferencia


Mañana ofreceré una conferencia
en el almuerzo dominical de familia.
Versará sobre las cosas simples
de la vida cotidiana.
Les hablaré del tiempo:
de lo ideal que el día amaneció,
resaltando la tibia luz del sol
en la bondad del clima.
Desgranaré anécdotas
donde cada quien será
su mejor recuerdo.
Haré reír al auditorio
con el recurso de hacer papelones
en la memoria colectiva.
Atraeré la atención embelesada
con la elocuencia
del que narra su propia historia.

Sé que no recibiré aplausos
ni felicitaciones
ni apretones de manos o palmadas.

Mi recompensa será
lágrimas algún día.

[Julio Gonzalez Alonso]

Mañana ofreceré una conferencia
en el almuerzo dominical de familia.
Versará sobre las cosas simples
de la vida cotidiana.
Les hablaré del tiempo:
de lo ideal que el día amaneció,
sin olvidar el sol y el clima.
Desgranaré anécdotas
donde cada quien será
su mejor recuerdo.
Haré reír al auditorio
hasta las lágrimas
con el recurso de hacer papelones
en la memoria colectiva.
Atraeré la atención embelezada
con la elocuencia
del que narra su propia historia.

Sé que no recibiré aplausos
ni felicitaciones
ni apretones de manos o palmadas.

Mi recompensa será
abundantes lágrimas cuando me muera.

Oscar, qué bien planteas y describes esta despedida que, metafóricamente, hacemos todos a lo largo de nuestra vida. El hecho de circunscribirla a una reunión familiar le dan una fuerza extraordinaria al poema.

Me alegra llegar en primer lugar para felicitarte.

Salud.

[Rafel Calle]

Hermoso poema, amigo Óscar, que ha sido un placer leerte.
Me parece bien estructurada esa gran alegoría del adiós.
RECIBE UN CORDIAL SALUDO.

[Alberto Batania]

Gran poema narrado desde la muerte. Asombra comprobar que, en realidad, todo lo que dices en la primera parte es bueno, agradable incluso, pero pronto notamos que se esconde algo rugoso, inquietante.

Hasta pronto.

[Óscar Distéfano]

Oscar, qué bien planteas y describes esta despedida que, metafóricamente, hacemos todos a lo largo de nuestra vida. El hecho de circunscribirla a una reunión familiar le dan una fuerza extraordinaria al poema.

Me alegra llegar en primer lugar para felicitarte.

Salud.

Te agradezco, estimado poeta, tus palabras. Viniendo de ti, las valoro doblemente.
Es un honor para mí tu visita.
Óscar