Editorial Alaire

Un caballo púrpura al fondo
de una palabra ciega y
la pregunta de siempre:
¿ quién escribió eso? Yo no.
Yo voy a la tienda a comprar pan
y tomo ocho medicamentos por día
para que la muerte me espere más tarde.
El caballo se mueve y la palabra
se sube al mes de abril y canta amor
a una mujer, su peso
de ave en la rama. Yo
no escribí eso. ¿ de dónde, cuándo, cómo?
Yo me afeito todos los días
frente a un espejo acostumbrado.
Hoy preguntó por el caballo púrpura.
¿ Y a mí me lo pregunta?
¿ A mí?

A Luis García Montero

Este poema lo leí en un bar de mi ciudad San Pedro, hace tiempo que me pregunto sobre la felicidad y sobre el sentido de escribir si esto tiene sentido, por otro lado leí este poema y dije esto es la felicidad esta sensación, tomar un café y leer y sentir esto que Gelman produjo, pero digo que sueño irrumpe en este poema, dejo para la reflexión, por otro lado se trata de un destino del poeta, se trata de los sueños en ese caballo Púrpura, en ese sentido dije, ahora esto me pertenece, y dije esto lo llevo a alaire, ahora que se concretó ansío en esta búsqueda o en este sueño mio de querer entender el destino de todo escritor, gracias Rafel calle por permitirme este espacio y a Pablo Ibañes y también a Ferreiro y Oscar que son mis amigos mas allá que no esté físicamente, descubrí un paraíso y ahora son de ustedes.