Editorial Alaire

Tienes alma de árbol, amor.
Tienes alma de tierra:
madera, sangre, savia,
ramas, sudor, promesa.
Vas y vienes, acechas mis pisadas,
despeinas
la palidez del día
con un café y razones de cristal,
sonríes para que no nos duela
la lucha cotidiana;
cobijas mi cansancio
bajo tu sombra térrea.
Pero hay un pozo blanco, una tumba secreta
que no puede sondear tu mirada ligera.
Hay una tumba, un pozo
donde el eco se quiebra,
un otoño perenne despeinando hebras
amarillas de infancia,
desangelados mapas
donde el sol no se muestra;
hay rostros como ríos
subterráneos fluyendo
por un túnel antiguo...

Pronto amanece,
pronto acude tu voz
a pellizcar la noche de mi canto, a incendiarme
de dormidos pronombres
con tu cuerpo de barro,
con tu sangre de tierra.

Muy hermoso poema, Rosa, con ese lirismo tuyo que me encanta. Me gustó mucho
Besos
Pilar

Precioso poema, Rosa.
Haces sentir la tierra.
Abrazo.

Querida Rosa, es una maravilla tu tierra, lena y sacia , es totalmente inmensa.

Mil besos y mil gracias

Curra

Exquisito, tierno, humano. El sentimiento del amor desplegado en un soberbio poema. El remate me produce una emoción enorme. Te felicito, amiga, por este magnífico aporte a tu valiosa antología poética. Eres una de las mejores poetas que conozco.

Un abrazo fraterno.
Óscar

Muy bello amiga Rosa, un placer y un abrazo.

Me ha encantado, querida amiga. Tus poemas se pronuncian a sí mismos, tienen alma y eso me parece tan difícil de conseguir. Uno te lee y descubre que en la memoria había un lugar para ti, lo que quiero decir es que hay sitios dentro de mí que sólo tu poesía puede llenar, que esos sitios no se pueden inventar porque ya están y entonces leerte se vuelve un acto vital. Muchos abrazos, Rosa, y felicitaciones sinceras.

Grandioso, inminente; leerte se vuelve un acto vital, de que manera tan certera lo ha expresado Marius.

Aplausos a granel, querida compañera.

Abrazos.

Un poema hermoso. Ha sido un placer leerlo. Abrazos.

Siempre se nos esconde algo en el lugar más indefinido. Entonces llega el pensamiento a hacerse digno
y se encuentra con un poema tan inspirado y exquisito que encuentra solución poética a los enigmas
indiscretos de la vida y a los recovecos de lo dudosamente conocido.

un abrazo

Un poema bellísimo donde prolifera un ambiente que me hizo evocar como tu bien dices "otoños perennes despeinando hebras
amarillas de infancia".

Un abrazo Rosa.

Rosa Marzal escribió:Tienes alma de árbol, amor.
Tienes alma de tierra:
madera, sangre, savia,
ramas, sudor, promesa.
Vas y vienes, acechas mis pisadas,
despeinas
la palidez del día
con un café y razones de cristal,
sonríes para que no nos duela
la lucha cotidiana;
cobijas mi cansancio
bajo tu sombra térrea.
Pero hay un pozo blanco, una tumba secreta
que no puede sondear tu mirada ligera.
Hay una tumba, un pozo
donde el eco se quiebra,
un otoño perenne despeinando hebras
amarillas de infancia,
desangelados mapas
donde el sol no se muestra;
hay rostros como ríos
subterráneos fluyendo
por un túnel antiguo...

Pronto amanece,
pronto acude tu voz
a pellizcar la noche de mi canto, a incendiarme
de dormidos pronombres
con tu cuerpo de barro,
con tu sangre de tierra.

Tocas el alma, poeta. Un abrazo, Rosa.

Tu fuerza y coherencia vertical arropando la belleza de esos versos en forma de imágenes. Me ha gustado mucho, Rosa.

Un fuerte abrazo,

Judit

Vibrante la sensibilidad que brilla entre tus versos querida amiga...
Siempre grato leerte...te abrazo con todo mi cariño...
Nancy

Muy bello poema de Rosa.