Editorial Alaire

Los esmerados labios de la rosa aromática
vienen a embadurnar con el ánimo abierto
la inocencia ardiente de su existencia empedernida.
La espina de la zarza transparenta
que las raíces hacen cama en la húmeda tierra
mientras su esencia observa su arrogancia,
mientras la savia enciende,
mientras la savia acude
con la sinopsis convenida
a la imagen bella del jardín, del rosal
y de la primavera.
Otra vez resucita el cielo azul
poniendo la mirada del ojo sabio en la presencia tibia
de la intrincada consecuencia.

Todo él muy bueno, pero este inicio me enganchó por el cuello.

"Los esmerados labios de la rosa aromática
vienen a embadurnar con el ánimo abierto
la inocencia ardiente de su existencia empedernida"

Todo un placer de lectura, amigo Guillermo.

Un abrazo.

Buen poema, Guillermo, con versos muy hermosos. Me gustó mucho el poema
Besos
Pilar

Guillermo Cuesta escribió:Los esmerados labios de la rosa aromática
vienen a embadurnar con el ánimo abierto
la inocencia ardiente de su existencia empedernida.
La espina de la zarza transparenta
que las raíces hacen cama en la húmeda tierra
mientras su esencia observa su arrogancia,
mientras la savia enciende,
mientras la savia acude
con la sinopsis convenida
a la imagen bella del jardín, del rosal
y de la primavera.
Otra vez resucita el cielo azul
poniendo la mirada del ojo sabio en la presencia tibia
de la intrincada consecuencia.

Un poema muy interesante. Esa explosión de belleza, producto del milagro de la naturaleza, siempre llama a la emoción del cielo. Hay mucha riqueza polisémica en los versos.

Un abrazo, amigo.
Óscar

Guillermo Cuesta escribió:Los esmerados labios de la rosa aromática
vienen a embadurnar con el ánimo abierto
la inocencia ardiente de su existencia empedernida.
La espina de la zarza transparenta
que las raíces hacen cama en la húmeda tierra
mientras su esencia observa su arrogancia,
mientras la savia enciende,
mientras la savia acude
con la sinopsis convenida
a la imagen bella del jardín, del rosal
y de la primavera.
Otra vez resucita el cielo azul
poniendo la mirada del ojo sabio en la presencia tibia
de la intrincada consecuencia.

Un jardín, la existencia, donde todo crece. Me ha parecido un jardín enigmático, de palabras que sugieren algo mas que la imagen bella del rosal. ERA

J. J. M. Ferreiro escribió:Todo él muy bueno, pero este inicio me enganchó por el cuello.

"Los esmerados labios de la rosa aromática
vienen a embadurnar con el ánimo abierto
la inocencia ardiente de su existencia empedernida"

Todo un placer de lectura, amigo Guillermo.

Un abrazo.

Gracias, Ferrero por tu amable visita y fervoroso comentario.

Un abrazo

Pilar Morte escribió:Buen poema, Guillermo, con versos muy hermosos. Me gustó mucho el poema
Besos
Pilar

Gracis, Pilar, muy amable tu visita.
un abrazo

Guillermo Cuesta escribió:Los esmerados labios de la rosa aromática
vienen a embadurnar con el ánimo abierto
la inocencia ardiente de su existencia empedernida.
La espina de la zarza transparenta
que las raíces hacen cama en la húmeda tierra
mientras su esencia observa su arrogancia,
mientras la savia enciende,
mientras la savia acude
con la sinopsis convenida
a la imagen bella del jardín, del rosal
y de la primavera.
Otra vez resucita el cielo azul
poniendo la mirada del ojo sabio en la presencia tibia
de la intrincada consecuencia.

Igual que la naturaleza emerge con fuerza, también tus palabras enriquecen tu gran poema.
Precioso!
Abrazos.

Es cierto, Guillermo, que el sur se viste de primavera cuando a nosotros se nos va el otoño; así, tu poema. Enhorabuena con un abrazo.
Salud.

Guillermo Cuesta escribió:
Los esmerados labios de la rosa aromática
vienen a embadurnar con el ánimo abierto
la inocencia ardiente de su existencia empedernida.
La espina de la zarza transparenta
que las raíces hacen cama en la húmeda tierra
mientras su esencia observa su arrogancia,
mientras la savia enciende,
mientras la savia acude
con la sinopsis convenida
a la imagen bella del jardín, del rosal
y de la primavera.
Otra vez resucita el cielo azul
poniendo la mirada del ojo sabio en la presencia tibia
de la intrincada consecuencia.

Preciosa apertura y excelente cierre para este poema hermoso, amigo Guillermo.
Un abrazo fuerte.

Precioso poema, Guillermo. Me ha encantado.

Abrazos.

Hermoso e interesante poema de Guillermo.

Óscar Distéfano escribió:

Guillermo Cuesta escribió:Los esmerados labios de la rosa aromática
vienen a embadurnar con el ánimo abierto
la inocencia ardiente de su existencia empedernida.
La espina de la zarza transparenta
que las raíces hacen cama en la húmeda tierra
mientras su esencia observa su arrogancia,
mientras la savia enciende,
mientras la savia acude
con la sinopsis convenida
a la imagen bella del jardín, del rosal
y de la primavera.
Otra vez resucita el cielo azul
poniendo la mirada del ojo sabio en la presencia tibia
de la intrincada consecuencia.

Un poema muy interesante. Esa explosión de belleza, producto del milagro de la naturaleza, siempre llama a la emoción del cielo. Hay mucha riqueza polisémica en los versos.

Un abrazo, amigo.
Óscar

Gracis, Oscar,por trasmitirme tu opinión y ánimo desde tu presencia amable y comentario ameno.

un ABRAZO

E. R. Aristy escribió:

Guillermo Cuesta escribió:Los esmerados labios de la rosa aromática
vienen a embadurnar con el ánimo abierto
la inocencia ardiente de su existencia empedernida.
La espina de la zarza transparenta
que las raíces hacen cama en la húmeda tierra
mientras su esencia observa su arrogancia,
mientras la savia enciende,
mientras la savia acude
con la sinopsis convenida
a la imagen bella del jardín, del rosal
y de la primavera.
Otra vez resucita el cielo azul
poniendo la mirada del ojo sabio en la presencia tibia
de la intrincada consecuencia.

Un jardín, la existencia, donde todo crece. Me ha parecido un jardín enigmático, de palabras que sugieren algo mas que la imagen bella del rosal. ERA

Es muy cierto, amiga ERA. Enigma y belleza todo en uno bajo la imagen en ciernes del jardín.

Gracias por amable paso por estos versos.

un abrazo

Carmen Pla escribió:

Guillermo Cuesta escribió:Los esmerados labios de la rosa aromática
vienen a embadurnar con el ánimo abierto
la inocencia ardiente de su existencia empedernida.
La espina de la zarza transparenta
que las raíces hacen cama en la húmeda tierra
mientras su esencia observa su arrogancia,
mientras la savia enciende,
mientras la savia acude
con la sinopsis convenida
a la imagen bella del jardín, del rosal
y de la primavera.
Otra vez resucita el cielo azul
poniendo la mirada del ojo sabio en la presencia tibia
de la intrincada consecuencia.

Igual que la naturaleza emerge con fuerza, también tus palabras enriquecen tu gran poema.
Precioso!
Abrazos.

Muchas gracias, Carmen, por tu amable visita y comentario.

un abrazo