El mundo que no sabe nadar

[Ernesto perez]

Ella a veces me muerde la oreja
y dice que algún día
el mundo estallará en cien mil millones de pedazos
y desea que los nuestros
descansen juntos.

Hoy no estaba al despertarme,
dejó café preparado
junto a una caja de galletas
que en unos años
guardará los recortes de mi suicidio.

Me afeité dos semanas después
volví al espejo,
ella me prefiere con barba,
lo que suele llamar barba
es un pelo aquí y otro allá
sin acorde ninguno,
como un campo de minas.
Mi rostro dice que soy mas joven
mi corazón anda a marchas forzadas
como un viejo de parque.

Ella que sólo sabe un idioma
me dice te quiero en un dialecto inventado,
a veces me cita a billy,
el poeta que mejor dice te quiero del mundo
luego se agarra a mi poya
y se deja el amor entre los labios.

Nada es más fácil de curar
que la erección de un hombre.

Hoy volví al mar
el médico que me trata
dice que abandone las orillas
que las olas no traen sirenas
y que las sirenas no tienen las tetas tan grandes como ella.

Él, es un hombre de estudios no sabe de nada.

Ni siquiera sabe que estoy loco,
loco por ella,
que una caja de galletas aun sin estrenar
será mi tumba.

Ella que si lo sabe muerde mi oreja
y yo espero el estallido
mirando al mar.

[Rafel Calle]

Hermoso y muy personal poema, amigo Ernesto, que ha sido un placer leerte.
Me resulta muy familiar lo que dices y creo que lo dices bien.
Realismo servido en bandeja diaria.
Felicidades por el trabajo.
Te mando un cordial abrazo.

[Just Gafar]

Un lenguaje fresco, con una forma muy personal de llevar el amor a esas orillas cotidianas que tanto nos gustan. El resultado caótico y amorosamente desenfrenado es un lujo.

Me gustó, me gustó mucho este poema

Saludos en la distancia

[carmen iglesia]

Siempre diferente... y no sabes cómo se agradece... Un gustazo de lectura... se te lee del tirón... aprovecha esa ventaja.

Saludos,


Carmen

[Ernesto perez]

Gracias Rafael por tan amable huella, saludo.

Gracias Just por la generosidad del mensaje, saludos.

Aprovechar ya me gustaría pero uno depende solamente de su caos, no dibuja demasiado con los ojos cerrados y es un problema.

Siempre adoro que me leas Carmen.