Editorial Alaire

BRUCE LEE

Al más alto piso de una pagoda
tenía que subir nuestro héroe
vestido con un chándal amarillo.
Un rival le aguardaba en cada planta.
Siempre estaban muy serios
los enemigos
y antes de empezar el combate
movían hábilmente unos luchacos
de forma totalmente innecesaria.
Y por supuesto Bruce nunca perdía
y seguía ascendiendo en la conquista
de un premio del que nadie sabe nada.

Salíamos del cine tan felices
en el atardecer de aquel verano
imitando ademanes, elevando
al cielo nuestras piernas
con los brazos muy rígidos,
pateando la brisa
y sin saber tampoco
a cuántos rivales terribles
tendríamos que batir en nuestras vidas.

Hay certeza, luminosidad y nostalgia en ambas estrofas. El poema héroe, las dos realidades, la impronta de una generación, sus efectos multiplicadores.

Saludos cordiales, Alejandro; gracias por compartir.

Muchas gracias Hallie por tu lectura y comentario.

Arriba con esta hermosa propuesta de Alejandro.

Me alegra mucho haber abierto este poema., porque me parece muy bello., reconozco que el título se me resistía, me costaba ver algo de poesía en el personaje, y sí, si que la he encontrado...la vida es así, nada es en el fondo lo que parece, siempre se encuentra en todas partes. Mis felicitaciones Alejandro, sencillo, poético, y muy bello.

Un cordial saludo.

Carmen

Alejandro Soler escribió:BRUCE LEE

Al más alto piso de una pagoda
tenía que subir nuestro héroe
vestido con un chándal amarillo.
Un rival le aguardaba en cada planta.
Siempre estaban muy serios
los enemigos
y antes de empezar el combate
movían hábilmente unos luchacos
de forma totalmente innecesaria.
Y por supuesto Bruce nunca perdía
y seguía ascendiendo en la conquista
de un premio del que nadie sabe nada.

Salíamos del cine tan felices
en el atardecer de aquel verano
imitando ademanes, elevando
al cielo nuestras piernas
con los brazos muy rígidos,
pateando la brisa
y sin saber tampoco
a cuántos rivales terribles
tendríamos que batir en nuestras vidas.

Que tiempos aquellos! Me ha gustado mucho y llenado de recuerdos. Cuantas luchas han seguido. Un placer leerte Alejandro. ERA

Gracias, Rafel, Carmen y ERA por vuestra lectura. Me alegra que os gustara y os trajera algún recuerdo.