Editorial Alaire

Espero el autobús, miro el panel informativo, Área 17, 15 minutos,
todavía puedo echar una ojeada a algún libro de poemas en la librería Pastor,
entro, una mujer me recibe sobre una escalera con una sonrisa rutinaria,
subo a la primera planta, extraigo de la librería un ejemplar de Benjamín Prado,
leo un poema, es fresco, actual, interesante, me gusta,
Benjamín también es un filósofo, vuelvo a rebuscar en la estantería
y leo en el lomo que el autor es
Julio Alonso Llamazares, llevo una decepción, por otra parte pasajera,
hay poemas de otro libro anterior, pero a medida que avanzo y paso
páginas, me reconforta otra vez su estilo en varios poemas breves,
consulto de nuevo el reloj de muñeca, me apresuro y salgo,
dos mozas de la cruz roja están a punto de abordarme,
las esquivo y casi me roza la mano gigantesca del hombre
negro de bronce sentado en la acera,
le sonrío, impertérrito, me devuelve la sonrisa eterna del asfalto,
cruzo el paso de cebra antes de que se cambie el semáforo,
estoy de nuevo en la parada, llega el autobús del Área 17,
no he solucionado nada en el Ayuntamiento,
la funcionaria que me correspondía vuelve de vacaciones
el lunes próximo.
Pero no vuelvo con las manos vacías,
todavía me brillan los ojos del agua de los poemas.

Que bonito, Manuel. Un día provechoso que quizás, debiera ser así,
propiciando tu encuentro con esas letras.

Lo he disfrutado. Un abrazo.

Mitsy

Mi estimado Manuel, trepidante poema. Yo que vivo a 15 kilómetros de un bello y activo volcán, saboreaba tu poema adaptándolo a esa coreografía. Subiendo y bajando en notable frenesí, al tiempo que la Calle dibuja sombras y bochornos en los periódicos de mañana.
El punto álgido eran esas dos enfermeras de la cruz roja, entre las que yo me soñaba, pechungonas y sobresalientes. La poesía, ya lo hablamos esta tarde en el chat, es así: pura emoción interpretable. Y tú dejas a la imaginación un montón de ligas. Nunca dejes de deleitarnos con tus versos.

Mis felicitaciones.

elPrior

Manuel Alonso escribió:Espero el autobús, miro el panel informativo, Área 17, 15 minutos,
todavía puedo echar una ojeada a algún libro de poemas en la librería Pastor,
entro, una mujer me recibe sobre una escalera con una sonrisa rutinaria,
subo a la primera planta, extraigo de la librería un ejemplar de Benjamín Prado,
leo un poema, es fresco, actual, interesante, me gusta,
Benjamín también es un filósofo, vuelvo a rebuscar en la estantería
y leo en el lomo que el autor es
Julio Alonso Llamazares, llevo una decepción, por otra parte pasajera,
hay poemas de otro libro anterior, pero a medida que avanzo y paso
páginas, me reconforta otra vez su estilo en varios poemas breves,
consulto de nuevo el reloj de muñeca, me apresuro y salgo,
dos mozas de la cruz roja están a punto de abordarme,
las esquivo y casi me roza la mano gigantesca del hombre
negro de bronce sentado en la acera,
le sonrío, impertérrito, me devuelve la sonrisa eterna del asfalto,
cruzo el paso de cebra antes de que se cambie el semáforo,
estoy de nuevo en la parada, llega el autobús del Área 17,
no he solucionado nada en el Ayuntamiento,
la funcionaria que me correspondía vuelve de vacaciones
el lunes próximo.
Pero no vuelvo con las manos vacías,
todavía me brillan los ojos del agua de los poemas.

Me remojan tus bellos versos, poeta. ERA

Nos relatas un hecho con gracia y lo culminas con un buen cierre. Un placer leerte
Besos
Pilar

Me ha gustado, tiene el estilo ligero, como casi conversando, de Bukowski.

Manuel Alonso escribió:
Pero no vuelvo con las manos vacías,
todavía me brillan los ojos del agua de los poemas.

¡¡Ah, esas librerías en las que nos dejan mirar y mirar!!
Yo creo que nos dejan porque saben que siempre nos llevamos algo pero dejamos mucho, así que volveremos.
Un placer esta visita, Manuel.
Abrazos.

Aeso se le llama aprovechar bien el tiempo. Como se nota el interés que tienes por la poesía.

Enhorabuena. Un abrazo

La condensación de niveles y el modo sutil en que introduces la poesía en el espacio cotidiano; incorporar a la complexión del mundo cotidiano la necesidad de la poesía para ganar sentido en los momentos en que hay que esperar. Esperar actuando. Me ha parecido brillante, inteligente. Abrazos, amigo.

Tu texto, sí, es fresco como un manantial. Has eternizado un momento efímero de tu existencia, pero que se ha revelado como uno de esos sucesos que provocan cambios misteriosos dentro de nuestra psiquis. Me gustó mucho el lenguaje, el fino humor, y el mensaje de sublimización de la poesía. Mis aplausos, amigo.

Un abrazo.
Óscar

Ingeniosa y hermosa propuesta, Manuel. Inteligente modo de estar y ser. Me ha gustado mucho.

Un abrazo,

Judit

Gracias Mitsy, eres muy amable, un abrazo, amiga.

Manuel amigo, sabes rozar esa modernidad, traer la mirada completa. Me viene a la mente "Le fabuleux destin d'Amélie Poulain", de Jean-Pierre Jeunet. Esa capacidad, de descripción y sorpresa, cuando la protagonista toma el brazo del ciego en la calle y dibuja en su cabeza lo superfluo, lo que pasa desapercibido, lo aparentemente insignificante, pero que es el pentagrama para sostener todas las notas.
Un abrazo, un gusto leerte amigo

Manuel, un poema actual, tu mirada introspectiva, buscando la salvación frente a la disolución del tiempo, al inminente derrumbe de la sociedad. Me ha gustado mucho. Recibe mis abrazos sinceros, amigo.

Armilo, es un placer leer tus comentarios, eres muy amable, un abrazo amigo.