Editorial Alaire

El inicio
es el caminar desvaído de un niño
que baja andando una cuesta.

Su mano se aferra
a la mano dulce
de una mujer joven.

Quizá tenga dos años,
quizá su figura aceitunada,
el cuerpo lánguido,
la blancura de una ropa extremadamente limpia,
todavía le pertecezcan.

Mientras ella ríe,
en el rostro del niño hay una sombra de temor,
puede que su causa sea el ulular del viento
que uno imagina al ver las ramas caídas
o el crepúsculo tan rojo
que asoma por encima de los tejados
de una casa desportillada.

No sé el lugar ni sé el tiempo,
ni la hora
ni la estación.

En el sepia de la fotografía
habitan los fantasmas del hombre
que será.

Alguien le ha dicho
que esta mujer se llama María.

A ella le dedica
el primero de sus recuerdos.

Wow, celebro ser la primera en dar vuelo a este MAGNÍFICO poema,
que me permite, en parte, habitar tu recuerdo, pues, yo también me
llamo Maria -en mi primer nombre y a la vez, soy madre... Doble motivo
para emocionarme y aplaudirte, como siempre.

Un gran abrazo, amigo.

Mitsy

Cambiando el nombre, todos podríamos estar en la emoción de este hermoso poema.
Observo un cambio en las imágenes de tus versos, más fáciles de interpretar y sencillas, pero siempre se siente un poso de gratitud por leerte.
Besos
Pilar

[quote="Ramón Carballal"][/quote]


Maria, Masría, María.... encantador y deliicado poema, me gustó amigo, disfruté con su recitado.

Un fuerte abrazo

Gonzalo

Tierno, sencillo y directo para traernos a esa emoción que baila sobre el sepia de la fotografía en busca de su dueño. Con un abrazo.
Salud.

Ramón te cunde la memoria a flor de verso.

un abrazo

Tiene tu poética una profundidad en su alcance enorme. El ritmo, creo, le confiere una belleza enorme. Va demandando una lectura pausada, permite asimilar el recorrido, detenerse y dejar sentir mientras se atraviesa.
Este poema tiene además un fondo de universalidad, permite una identificación inmediata, y lo grafía una mirada llena de sensibilidad.
Me ha encantado Ramón. Es una satisfacción leerte amigo
Fuerte abrazo

Hermoso poema de Ramón.

Hay universos propios y cercanos en esas imágenes que provienen del ayer y nos miran y nos hablan muy adentro.

Un placer leer tu magnífica poesía, Ramón.

Un abrazo.

Mitsy Grey escribió:Wow, celebro ser la primera en dar vuelo a este MAGNÍFICO poema,
que me permite, en parte, habitar tu recuerdo, pues, yo también me
llamo Maria -en mi primer nombre y a la vez, soy madre... Doble motivo
para emocionarme y aplaudirte, como siempre.

Un gran abrazo, amigo.

Mitsy

Gracias, Mitsy, por tu lectura y generosas palabras. Un abrazo.

Pilar Morte escribió:Cambiando el nombre, todos podríamos estar en la emoción de este hermoso poema.
Observo un cambio en las imágenes de tus versos, más fáciles de interpretar y sencillas, pero siempre se siente un poso de gratitud por leerte.
Besos
Pilar

Gracias, Pilar, por tu lectura y comentario. Un beso.

Ramón esos recuerdos que avivan nuestra memoria infantil en las fotografias, están muy bien descritos por tus versos, amigo, un abrazo.

Encomiable trabajo sobre la nostalgia y el tempus fugit. Me ha encantado leerte, amigo.

Un abrazo fuerte.
Óscar

Ramón,

un placer como siempre pasar por tus versos, por tu ya muy madura poesía. Creo que desde hace tiempo has ganado una barbaridad en claridad, en trasmisión y eso, unido a tu especial lirismo, a tu capacidad de recrear, de delinear imágenes, a tu potencia evocadora, hace tu obra, en mi opinión, de lo mejor de Alaire.

Un abrazo.

Ramón


Un estilo único...MARAVILLOSO



Un abrazo fuerte, querido maestro