Raul Muñoz escribió:Muy interesante Era. Al hilo de tu intervención en la entrevista.
Para mí es un valioso documento, que ahora me va a servir para orientarme. Ya que ya llevo cierto tiempo escribiendo poemas, aunque no tanto ( algo más de un año ). Y he visto reacciones hacia lo que he escrito, que van desde la incomprensión e indiferencia, hasta en otros pocos casos cierta apreciación, yo diría que del dolor y sufrimiento que los alumbra. Porque sí es en mi caso, claramente, una terapia, en realidad llevo este año haciendo auto-terápia a través de escribir poemas.
Sin embargo no dejo de sentirme desconcertado. Cada vez conozco menos lo que escribo.Sí que lo veo en ocasiones como algo bizarro, con lo que muy pocas personas empatizan. Pero cada vez que escribo es como si escarbara en todo mi cuerpo, no solo en la mente; esto me lleva a algo irracional. Por lo tanto ahora me veo en el dilema, de seguir mis instintos o ensanchar el canal de una posible comunicación, con los posibles lectores. ¿Hay comunicación en la poesía? Pienso que siempre la hay, en cada gesto que realizamos, la hay en cada organismo vivo; ya que estos están abiertos al exterior. Habría que entender entonces la comunicación, de una manera muy amplia ( mucho más allá del lenguaje ). A veces pienso, que en realidad el lenguaje es muy ortopédico, y las palabras son "patéticas muletas".
Guardaré el documento que has puesto y lo iré leyendo.
Es un placer contar con tu valiosas aportaciones, amiga.
Te envío un fuerte abrazo.
Estimado Raúl,
Gracias por tu aportación a este tema que considero esencial en el trance poético, ese puente hipnótico que se lleva al poeta, o el artista en alas de la creatividad. La comunicación es mas allá del lenguaje, pero sabemos que en Literatura, la palabra misma es la expresión, formación del desarrollo y procesos del lenguaje en nosotros los terrestres, específicamente, habilidades de expresión comunicativa en el Ser Humano.
El concepto de la disciplina de la Psicología es quizás, mas que el filosófico, aunque mas antiguo, *el estudio del Alma. Claro que es también el estudio de la mente, el estudio del cerebro, etc. No creo que se puedan divorciar las disciplinas. Psicología y Psiquiatría, esta ultima mas envuelta en las enfermedades mentales mas severas.
Lo que aquí describes, Raúl, en cuanto a la intima entrega del acto poético, es esa especie de trance creativo en el que estoy completamente de acuerdo. El acto creativo contiene fases que muchos reconocemos. La fase de sentir que ese algo viene y que uno se aparta a recibir. La fase frente al papel en blanco y ese apertura de emociones en comunión con la fuerza expresiva que simultáneamente empiezan a trabajar. Esta fase es laque no se debe forzar en interferir con otros significados y empleos del lenguaje. Es un boceto, el trabajo de edición es la ultima fase, pero todo el proceso creativo es una fusión de mente y emociones, un estado alterado, que solo siente el artista. En la edición por ejemplo, y sabemos que hay poemas que no lo necesitan. Es cuestión de inspiración dirigida...per, cuidado¡ Un poema se puede podar de tal forma que pierde su ángel, como algunos le llaman.
Hay mucho mas cosas que se pueden elaborar en esta intima y extraordinaria actividad dela creatividad. Pero, en cuanto al tema de la Poesía y La Medicina, me parece que el artículo del enlace cubre ampliamente la relación entre La Poesía y sus manos quirúrgicas, sus manos de seda, sus manos abiertas a recibir nuestros dolores, nuestras confusiones, nuestras quejas de cualquier tipo. La Poesía, para quien la lee, o la escucha, igualmente afloja nudos, resulta climácica, ayuda a la formación de expresiones verbales que combinan elementos dispares, pero que juntos logran ese catarsis tan necesario, ese desahogo...es una purga al drama de nuestras vidas humanas, y claro de que no habla la Poesía? La muerte por ejemplo, un evento tan definitivo...sin ser la poesía religiosa, es espiritual y abraza todo lo humano.
Si, Raúl, hay comunicación en la Poesía, hay funciones en ella que el poeta y el lector van descubriendo. Gracias nuevamente por el regalo de tu poesía, por tu espíritu dador y necesitado de confirmaciones, mi espíritu es como el tuyo, presto a dar y recibir. Creo que eso es la verdadera comunicación, nos sirve a todos.
Un abrazo,
E.R. Aristy