Editorial Alaire

No quiero

Yo no quiero ser ángel:

Debe ser aburrido el paraíso
Todo el día alabando
con cánticos confusos en latín.
Tanto batir de alas
al final cansa un poco.

Yo no quiero ser diosa:

Tener que pelearme
con las vecinas del Olimpo
y armar la de Troya
por un quíteme allá una manzana.

No quiero ser princesa:

Todo el día preocupada
por ruecas o zapatos
-otra vez la manzana-
o si el pelo será bastante largo
para trenzar escalas.

Me gusta ser de carne
y algún poco de hueso,
dormirme por las noches,
tomar vino,
besar y ser besada
sin pensar en la poca
o mucha trascendencia
de mis actos.

Puedo, perfectamente,
prescindir de perdices.
Y prefiero un buen trayecto
a un final feliz.



Pepa

Es maravilloso leerte, es maravilloso, redescubrir clásicos tan bien enlazados al poema, un abrazo de esos chillaos desde este lado del mundo, Luna.-

Amiga Pepa, cómo me traes el recuerdo de Colliguilla con el poema y la trascendencia. Siempre tan exacta y hermoso decir. Es una suerte disfrutar tus logrados versos.
Besos
Pilar

Pepa, sin dudas, poeta, los jeroglíficos habrán tenido su encanto, como las manzanas de oro en el jardín de las Hespérides, mas, cuando le toca el tiempo a nuestro Atlas actual, cómo no regalar el Universo entero, por un solo instante de amor en el aquí y ahora, que alguna ventaja tenía que tener el ser mortal.

Bravo, poeta! Un gusto deleitarme con tus letras, siempre.

Besos. Mitsy

Pepa,

toda una declaración de principios. Me ha gustado mucho la naturalidad con la que vas desgranando tus no-deseos, esa llamada a una normalidad cotidiana como germen de la felicidad. Pero es que tú no eres nada de eso que no quieres ser, amiga: tú eres poeta, que es mejor que todo eso.

Un abrazo.

Y nosotros
te queremos
tal cual eres...
Besos grandes, me ha encantado esta magia tan tuya

Magnífico decir, Josefa. Un gusto detenerse en tus versos.

Abrazo y felicidad.

Pilar, vienes a decir que el fin no justifica los medios. Que lo importante es estar en cada ocasión precipitada o preparada conciencia.

Conformarse con ser lo que se es ya es suficiente. Así que confórmate con ser una excelente poeta de carne y algún que otro hueso.

un abrazo

Completamente de acuerdo, Pepa. Lo bueno no está en los finales sino en el camino que a ese final lleva. Un precioso poema, compañera. Mi abrazo.

Mario.

Con qué belleza, sensibilidad y originalidad nos transmites esta certeza que comparto. Precioso, Pepa.

Un fuerte abrazo,

Judit

Josefa

Ese final feliz te los mereces, nos lo merecemos
nuestros actos son el resultado
de nuestra voluntad positiva


Bellos versos, compañera

Un beso feliz

Cristalino el cantar sensible de tus versos amiga...ingenioso recorrido...
Un gusto leerte...te abrazo con todo mi cariño...
Nancy

Josefa A. Sánchez escribió:No quiero

Yo no quiero ser ángel:

Debe ser aburrido el paraíso
Todo el día alabando
con cánticos confusos en latín.
Tanto batir de alas
al final cansa un poco.

Yo no quiero ser diosa:

Tener que pelearme
con las vecinas del Olimpo
y armar la de Troya
por un quíteme allá una manzana.

No quiero ser princesa:

Todo el día preocupada
por ruecas o zapatos
-otra vez la manzana-
o si el pelo será bastante largo
para trenzar escalas.

Me gusta ser de carne
y algún poco de hueso,
dormirme por las noches,
tomar vino,
besar y ser besada
sin pensar en la poca
o mucha trascendencia
de mis actos.

Puedo, perfectamente,
prescindir de perdices.
Y prefiero un buen trayecto
a un final feliz.



Pepa

Bellísimo poema, diciente. Rompe muchos moldes en donde han puesto a la mujer. Un placer enorme, leerte, admirada poeta. ERA

Muy bello poema de Pepa.

Me ha gustado mucho Pepa y básicamente me identifico. Aunque puestos a pedir, pidamos que el final sea también feliz (con o sin perdices). Un saludo.