Editorial Alaire

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por ejemplo,
si se nombra un bosque
se puede prescindir
de otras
palabras guía / supongamos
que la página abre
que el corazón aún sucede
o es un puñal
húmedo, eso
en la cintura que se usa
entre los miedos
espesos,
ahí donde coinciden,
giran todavía
algo de la memoria, la noche,
mis pisos
de hojarasca,
los pensamientos tachados
sosteniendo
inconexos
o a muerte seguir
unos pálpitos
que escriben de agua
ramas
que vuelven de la sed.
Su tono es grave,
su forma exacta busca desdecir,
acertar silencios,
suponer que ya ninguna
otra forma de anotar las cosas
beberá de la prisa.










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Tu búsqueda es tan franca y abierta que solo deja lugar a aplaudirte con fuerza, Macedonio, pienso que lo importante es sentir lo que dices.

Un abrazo.

Fresco y encantador el parpadeo de tus versos amigo...
Un gusto leerte...te abrazo con todo mi cariño...
Nancy

Macedonio


Beber de la prisa
lazarse al infinito
ocultarse de la luz
todo es posible
pero lo mejor
es descubrir
los misterios
que la poesía
nos presenta
como tú lo haces


Bellos versos, amigo


Un abrazo fuerte

Hermoso poema de Macedonio.

Precioso poema para deleite del lector. Un placer
Besos
Pilar