Editorial Alaire

Manuel Sánchez escribió:No recuerdo París
porque he estado en Montmartre
y nadie me ha ofrecido su locura,
ni ha pintado una boina
con el color que tiene el frio intenso.
No la recuerdo.
No recuerdo a Monsieur Le Mauntiñac
contándome lo mal que está el amor
entre los hombres,
lo cara que es la vida
cuando vas a comprarla, las edades del reuma,
lo fácil que es volver a ser sincero
si pones a tu tiempo de rodillas. Porque tú
no le dices, como antes,
que el cuerpo es una simple dimensión
y que debe mirarnos a los ojos
como si Notre Dame se derrumbara.
Consintamos, que puedo ser un poco de diciembre,
hacer del aire puro el viento de leyenda con el que acomodar una postura;
en una noche aislada, leve avance pacífico
que detiene las velas y baja al fin del mar.
Y después, invitar a salir de entre las horas
a esos mensajes tibios
que guardan sus reflejos en las noches privadas. Pero me encuentro
con que la Rue Barbette
no sabe que has dejado de ser tú;
la que andaba quemando las prisiones, una noche en verano.

¡Mon Dieu, chose très difficile à retenir
est que rien exist!


No recuerdo a París tan vaciada,
ni tan extraña al lado de lo inútil. Y es que he perdido, incluso, la memoria.