Editorial Alaire

Una dama blanca
pelo rizado de caracolas
figura esculpida de arena con olas
sonrisa de reina
novia del mar
casada con un marino
desbordada en el camino de los ríos
y fiel amante de su destino.

Proyecta amor entre las velas
brújula del peligro y la falsedad
deambula sus días dormidos
donde al muelle espera
vestida de sal
al patrón de su alma
al ancla de sus sueños
al sol de sus mareas.

Y es mar adentro, donde reza
donde mira el viento
parpadeando sus instantes
achicando el miedo
esculpiendo amaneceres
y en la luna llena
naufraga de los mensajes
soñando con ser la brisa
que hondea la vela
el mástil de los recuerdos
y terca planea la memoria
de una playa inmensa
del sendero que contempla
para ser esposa del mar
dueña del amor marino
y de las estrellas.

Sale de la Sala de Espera.

Suave poema para deslizarse con placer por los versos.
Besos
Pilar

Un trance que se desnuda en nudos de viaje marino y un decir poético que es único y muy tuyo!!!

Me ha encantado recorrerte, Curra querida...

besitos y GRACIAS miles por compartir.

Mitsy

Entre los versos las olas con un sabor a mar poetico y espumoso.

un a brazo

Precioso versos que inspiran al mar y al embarque de sus olas
Un placer, Curra.
Abrazos

Gracias Pilar siempre por tu amabilidad

Mil besos

Curra

Versos para navegarlos con el corazón desplegado. Me ha gustado.
Un abrazo.
Pepa

Un poema producto de una fértil imaginación poética. Le has dado vida, realismo, a la idea. Se te dan los versos cortos: es como si el vértigo de esa vida marina se apoderase de tu poema. Me ha encantado esta interesante variante de tus registros.

Un abrazo fuerte.
Óscar.

Enhorabuena, Curra, por esta dama blanca que aquí dejas.

Se ve que al borbotón de ideas que siempre emanan de tus poemas, poco a poco, le vas poniendo estilo y se agradece.

Un abrazo grande,


Víctor

Me gusta la música de los versos mismos.
Un gran abrazo, poeta