¿Que estará haciendo Julio?
Publicado: Mar, 27 May 2008 2:59
¿Que estará haciendo Julio?
Hace más de un mes que es el mismo día. Han crecido platos con raíces profundas en el fregadero. Los libros parecen zapatos en los rincones y los sobres no se abren, duermen ruidosamente sobre la mesa junto a qué sé yo hay ahí que se ha hecho un bulto de verduras marchitas y de mil cosas a medio talle, que no hacen más que acordarme a mamá echándole agua a las paredes mientras echaba mil pestes por esa boca. No se sabía si era un exorcismo o un desahumerio. El me saca de quicio, y sé que en el fondo me aborrece como un gargajo. Me aborrece porque creo en el amor. Es Domingo y yo trabajo. La gente está hastiada de los vendedores que se les presentan hasta en la sopa, pero es el ritmo de ésta jungla, y al final se entiende por qué la salvadoreña que vende tamales se adueñó de un carrito que halló fuera del supermercado, donde arropa sus latas con bolsas negras de basura (haciéndose pasar por uno de esos que colectan latas vacías de soda)se entiende que ella tiene que ganarse la vida, y que el mejor punto es la salida del tren siete en la esquina de Baxter y Roosevelt. Lo que no sabemos es cómo mantiene caliente el agua de sus tamales.
El me abraza y me dice que soy una de las mujeres más sensuales con las que se ha topado, me dice que no es fácil conocer alguien como yo. Lo que hago es llorar por todo el Van Wyck, llorar por todo el Belt Parkway, llorar hasta donde sea que me lleve el este. Tengo en éste preciso momento de mi vida que leer la vaina más aburrida, cuestiones de seguros de vida y de salud, de beneficios, dividendos, impuestos, inversiones, tablas de mortalidad y demás vainas que yo no sabía que ahora, precisamente ahora no tenían mucho sentido.
Me río a veces de mi audacia, mira que sacar una licencia de seguros de vida y de salud ahora cuando me ronda la muerte en su limosina de vidrios ahumados. Me acosa, me asedia, rueda el vidrio para que la reconozca, y yo me hago la loca y sigo de largo.
El insiste que solo quiere tenerme secuestrada en su Jeep para conversar, pero apenas aporta a la conversación. "Me gusta como te pones las manos en la cara". Me levanto a fumar y a orarle a Dios que se vuelen las hojas del calendario, que pase ya este examen inaudito, pensar que quizás yo esté agonizando dentro de un año. ¿Qué estará haciendo Julio? Ya hace un año de mi viaje a Caracas. Yo no le pregunto nunca si se está acostando con otra. Nosotros solo hablamos de cuando estemos juntos….Salgo a las calles de Queens y es como tirarme a un precipicio.
No importan los ojos que tiene la calle, la calle sabe que está ahí para rodar las escenas más insólitas, para descabellar nuestras ideas de que podamos parir algo que ella ya no haya abortado, que ella ya no haya desmembrado, descuartizado, triturado en el camión de la basura. Me voy por fin a almorzar después que el último "prospect" me pidiera que por favor no le hablara más, y que lo dejara en paz. Me voy por fin a darme una vuelta sola, con el alma seca de tanto joder a los pacientes para que se afilien a mi programa.
El no se ríe de mi enamoramiento con el amor. Me dijo que le parece admirable que a ésta edad yo piense en la fidelidad. Quiere seducirme porque se me sale el refajo del alma. Procede a tocar su demo tape, y me dice que me está componiendo una canción. Me dice que no me va empujar a la piscina porque yo no sé nadar. No me quiere matar. No me quiere violar. No me quiere engañar. Me abraza a cada rato, cada vez rozando su cara en mi mejilla, o besándomela. Son las mismas tres de la mañana, y me doy una ducha caliente. Me estrujo bien el pelo y me decido a rasparme yo misma la cabeza antes de entrar a quimioterapia. Siento el mismo miedo ese que no me crecerá de nuevo. Lo terrible de perder algo es eso, que no se recupere jamás. Oro, y reafirmo mi permanencia, me atrevo a hablarle de frente a la muerte, y ella no tiene más remedio que transformarse en una polilla, no le molesta el vapor que sale de la ducha, y se posa ahí cerca de donde yo a veces me agacho a masturbarme.
Ya son ya las seis de la tarde, lo sé porque sonó el teléfono como de costumbre, y ya pronto entrará Eric a preguntarme si quiero comer hoy. No, dile que no. Se que mamá se va a herir porque apenas voy a visitarla desde mi diagnóstico, y ella insiste en hacer comiditas en son de ardid.
El consigue que yo le diga que sí, que es verdad, que tengo unas ganas inmensas de estrujar mi pecho en un pecho, que sí, que quiero hacer el amor salvajemente, groseramerante, y el se muerde un poco los labios sonriendo ufano como si le hubieran dado un oscar. A veces, no importa que hora es. Es más importante preguntarle a esos que usan relojes aunque les deje la impresión de que debe haber algo inminente en el preciso momento de la pregunta. Me pregunto por que escribirán la hora del nacimiento y de la muerte?
A ratos he querido ponerme al tanto de las noticias, no sé me hará difícil ponerme al día, es un tropel inacabable de lo misma vaina. Lo que si estoy oyendo en frecuencia modulada son las historias de mis clientes. La mayoría refleja un agobio espiritual y físico. El insiste en que seamos amigos, aunque yo le paré el coche. Le dije que ya era suficiente. Suficiente tiempo en mi circulo privado haciéndome su "double talk", tomándome las manos como si fuera a leerme una predicción. Double indemnity. Qué atropello cometemos a veces. Annuities. Ya debería haber un libro clínico con todos los síntomas de los adictos sexuales. Nonforfeiture options. La verdad que era preciso que nos conociéramos. Como que es absolutamente necesario que yo me enterara de la realidad paupérrima de los ancianos con quienes me paso el día. No hay cosa en ésta ni en ninguna hora que no venga a demostrarnos quienes somos.
El insiste que sí, que siente una atracción sexual, pero que él puede controlarla, me dice: parece que eres tú que no sabrías controlarla, que tienes miedo...ah, la tormentosa hora del reto! Transparency. Todo es posible aún lo imposible. Me quedan tres libros por darle la primera lectura y la verdad a la compañía no le importa de donde diablos quites el tiempo para cubrir este material. El estado federal los obliga a ellos a tener licenciados a todos sus representantes de ventas para final de Octubre. Es una violación a a ley pagar comisión y llamarle "bonos", es una violación a la ley vender seguros de salud sin estar licenciados. Es una violación de la ley asediar a una mujer para exprimirle el jugo de su sexo. “Yo no obligo, ni engaño, es muy simple a mi me gustan las mujeres, y tu eres una mujer muy deseable”. Hay cosas detestables para mí. ¿Que estará haciendo Julio? Cada día se hace más largo o más corto, depende, por lo general es corto muy corto cuando más lo necesito. Era la cuarta ve que me llamaba hoy, ésta vez llegando a casa. Me propuso sexo telefónico. “Tengo una fantasía muy grande contigo, me dejas que te la cuente...la verdad es que tu me tienes loco, me gusta cómo te quitas las sandalias y doblas tus piernas en posición de loto”. Ah! qué pasa si de repente se nubla el cielo en el desierto, irá a llover? Fue un día de mucho trajín. El último calor del verano. ¿Qué te vas a poner, shorts? No hay cosa más peligrosa que quedarse pasada la hora por no saber dónde ir. ¿Que estará haciendo Julio?
ERA©2002
Hace más de un mes que es el mismo día. Han crecido platos con raíces profundas en el fregadero. Los libros parecen zapatos en los rincones y los sobres no se abren, duermen ruidosamente sobre la mesa junto a qué sé yo hay ahí que se ha hecho un bulto de verduras marchitas y de mil cosas a medio talle, que no hacen más que acordarme a mamá echándole agua a las paredes mientras echaba mil pestes por esa boca. No se sabía si era un exorcismo o un desahumerio. El me saca de quicio, y sé que en el fondo me aborrece como un gargajo. Me aborrece porque creo en el amor. Es Domingo y yo trabajo. La gente está hastiada de los vendedores que se les presentan hasta en la sopa, pero es el ritmo de ésta jungla, y al final se entiende por qué la salvadoreña que vende tamales se adueñó de un carrito que halló fuera del supermercado, donde arropa sus latas con bolsas negras de basura (haciéndose pasar por uno de esos que colectan latas vacías de soda)se entiende que ella tiene que ganarse la vida, y que el mejor punto es la salida del tren siete en la esquina de Baxter y Roosevelt. Lo que no sabemos es cómo mantiene caliente el agua de sus tamales.
El me abraza y me dice que soy una de las mujeres más sensuales con las que se ha topado, me dice que no es fácil conocer alguien como yo. Lo que hago es llorar por todo el Van Wyck, llorar por todo el Belt Parkway, llorar hasta donde sea que me lleve el este. Tengo en éste preciso momento de mi vida que leer la vaina más aburrida, cuestiones de seguros de vida y de salud, de beneficios, dividendos, impuestos, inversiones, tablas de mortalidad y demás vainas que yo no sabía que ahora, precisamente ahora no tenían mucho sentido.
Me río a veces de mi audacia, mira que sacar una licencia de seguros de vida y de salud ahora cuando me ronda la muerte en su limosina de vidrios ahumados. Me acosa, me asedia, rueda el vidrio para que la reconozca, y yo me hago la loca y sigo de largo.
El insiste que solo quiere tenerme secuestrada en su Jeep para conversar, pero apenas aporta a la conversación. "Me gusta como te pones las manos en la cara". Me levanto a fumar y a orarle a Dios que se vuelen las hojas del calendario, que pase ya este examen inaudito, pensar que quizás yo esté agonizando dentro de un año. ¿Qué estará haciendo Julio? Ya hace un año de mi viaje a Caracas. Yo no le pregunto nunca si se está acostando con otra. Nosotros solo hablamos de cuando estemos juntos….Salgo a las calles de Queens y es como tirarme a un precipicio.
No importan los ojos que tiene la calle, la calle sabe que está ahí para rodar las escenas más insólitas, para descabellar nuestras ideas de que podamos parir algo que ella ya no haya abortado, que ella ya no haya desmembrado, descuartizado, triturado en el camión de la basura. Me voy por fin a almorzar después que el último "prospect" me pidiera que por favor no le hablara más, y que lo dejara en paz. Me voy por fin a darme una vuelta sola, con el alma seca de tanto joder a los pacientes para que se afilien a mi programa.
El no se ríe de mi enamoramiento con el amor. Me dijo que le parece admirable que a ésta edad yo piense en la fidelidad. Quiere seducirme porque se me sale el refajo del alma. Procede a tocar su demo tape, y me dice que me está componiendo una canción. Me dice que no me va empujar a la piscina porque yo no sé nadar. No me quiere matar. No me quiere violar. No me quiere engañar. Me abraza a cada rato, cada vez rozando su cara en mi mejilla, o besándomela. Son las mismas tres de la mañana, y me doy una ducha caliente. Me estrujo bien el pelo y me decido a rasparme yo misma la cabeza antes de entrar a quimioterapia. Siento el mismo miedo ese que no me crecerá de nuevo. Lo terrible de perder algo es eso, que no se recupere jamás. Oro, y reafirmo mi permanencia, me atrevo a hablarle de frente a la muerte, y ella no tiene más remedio que transformarse en una polilla, no le molesta el vapor que sale de la ducha, y se posa ahí cerca de donde yo a veces me agacho a masturbarme.
Ya son ya las seis de la tarde, lo sé porque sonó el teléfono como de costumbre, y ya pronto entrará Eric a preguntarme si quiero comer hoy. No, dile que no. Se que mamá se va a herir porque apenas voy a visitarla desde mi diagnóstico, y ella insiste en hacer comiditas en son de ardid.
El consigue que yo le diga que sí, que es verdad, que tengo unas ganas inmensas de estrujar mi pecho en un pecho, que sí, que quiero hacer el amor salvajemente, groseramerante, y el se muerde un poco los labios sonriendo ufano como si le hubieran dado un oscar. A veces, no importa que hora es. Es más importante preguntarle a esos que usan relojes aunque les deje la impresión de que debe haber algo inminente en el preciso momento de la pregunta. Me pregunto por que escribirán la hora del nacimiento y de la muerte?
A ratos he querido ponerme al tanto de las noticias, no sé me hará difícil ponerme al día, es un tropel inacabable de lo misma vaina. Lo que si estoy oyendo en frecuencia modulada son las historias de mis clientes. La mayoría refleja un agobio espiritual y físico. El insiste en que seamos amigos, aunque yo le paré el coche. Le dije que ya era suficiente. Suficiente tiempo en mi circulo privado haciéndome su "double talk", tomándome las manos como si fuera a leerme una predicción. Double indemnity. Qué atropello cometemos a veces. Annuities. Ya debería haber un libro clínico con todos los síntomas de los adictos sexuales. Nonforfeiture options. La verdad que era preciso que nos conociéramos. Como que es absolutamente necesario que yo me enterara de la realidad paupérrima de los ancianos con quienes me paso el día. No hay cosa en ésta ni en ninguna hora que no venga a demostrarnos quienes somos.
El insiste que sí, que siente una atracción sexual, pero que él puede controlarla, me dice: parece que eres tú que no sabrías controlarla, que tienes miedo...ah, la tormentosa hora del reto! Transparency. Todo es posible aún lo imposible. Me quedan tres libros por darle la primera lectura y la verdad a la compañía no le importa de donde diablos quites el tiempo para cubrir este material. El estado federal los obliga a ellos a tener licenciados a todos sus representantes de ventas para final de Octubre. Es una violación a a ley pagar comisión y llamarle "bonos", es una violación a la ley vender seguros de salud sin estar licenciados. Es una violación de la ley asediar a una mujer para exprimirle el jugo de su sexo. “Yo no obligo, ni engaño, es muy simple a mi me gustan las mujeres, y tu eres una mujer muy deseable”. Hay cosas detestables para mí. ¿Que estará haciendo Julio? Cada día se hace más largo o más corto, depende, por lo general es corto muy corto cuando más lo necesito. Era la cuarta ve que me llamaba hoy, ésta vez llegando a casa. Me propuso sexo telefónico. “Tengo una fantasía muy grande contigo, me dejas que te la cuente...la verdad es que tu me tienes loco, me gusta cómo te quitas las sandalias y doblas tus piernas en posición de loto”. Ah! qué pasa si de repente se nubla el cielo en el desierto, irá a llover? Fue un día de mucho trajín. El último calor del verano. ¿Qué te vas a poner, shorts? No hay cosa más peligrosa que quedarse pasada la hora por no saber dónde ir. ¿Que estará haciendo Julio?
ERA©2002