Deseo, para rezar en lo prohibido
Publicado: Mar, 02 Jun 2015 8:10
Deseo, para rezar en lo prohibido,
para volar en lo anodino
y despertar terrazas
siendo novia solo de la vida.
Entre el vapor
subyaciendo en lo digno,
enroscada en un beso,
bailando con las estrellas.
Sometida al instante
que azufres libera, vive
amapolas y jazmines
y el recorrido vital y cansino
que se sienta conmigo.
Química abstracta que anida en su absurdo,
animal sin fauces,
peligro sin doma
y bruma que mantiene el alma.
Etéreo vuelo de lo no concluso,
del verbo guardado,
de la promesa de un velero errante
o del silencio de lo no dicho.
En el día de las felicidades,
de las perdidas
del instinto que solo pasea
para descubrir que nada existe
y que nada se acaba.
Morir esclava del recuerdo
de ese lunático beso
que confundió el todo
para ser la nada perpetua,
que emana del elixir de la vida
y asiste en cada amanecer
a sus entierros
para ser de nuevo solo deseo
y sentar el alma en su susurro
y sin miedo
abrazar un nombre, una esquina
en el abismo del amor eterno.
para volar en lo anodino
y despertar terrazas
siendo novia solo de la vida.
Entre el vapor
subyaciendo en lo digno,
enroscada en un beso,
bailando con las estrellas.
Sometida al instante
que azufres libera, vive
amapolas y jazmines
y el recorrido vital y cansino
que se sienta conmigo.
Química abstracta que anida en su absurdo,
animal sin fauces,
peligro sin doma
y bruma que mantiene el alma.
Etéreo vuelo de lo no concluso,
del verbo guardado,
de la promesa de un velero errante
o del silencio de lo no dicho.
En el día de las felicidades,
de las perdidas
del instinto que solo pasea
para descubrir que nada existe
y que nada se acaba.
Morir esclava del recuerdo
de ese lunático beso
que confundió el todo
para ser la nada perpetua,
que emana del elixir de la vida
y asiste en cada amanecer
a sus entierros
para ser de nuevo solo deseo
y sentar el alma en su susurro
y sin miedo
abrazar un nombre, una esquina
en el abismo del amor eterno.