los veintes sin cinco
Publicado: Sab, 23 May 2015 8:42
Un año de veintes sin cinco, de soledad sin dogmas,
de esencias posadas en los versos,
de luchas anodinas y fraguas de la esencia,
de los fuegos que limpian,
de la pureza que exquisita se proclama,
de la magia que en una caja esconde su nombre,
de mi ser que en sus instintos es y renace vida,
del valor sin guerra,
de un suspiro que entre las fauces de un destino se enciende.
Vida que baila asustada con la muerte,
entresaca el destello de la pureza
y alienta los caminos rotos, las virtudes, las noblezas,
y esconde el sin fin de lágrimas y de levedades
para compaginar el destello del perpetuo con la existencia.
Un aliento que entrecortado y obsoleto
proclama la astucia del sinsentido
para firmar los pactos de nobleza
de ese ser que sin merecer se sienta en la mesa de los dioses
y espera agradecido en la distancia
el instante del verdadero encuentro
de la mística perfilada de justicia.
De ese tú y de ese yo, que sin disfraces
se besen en los oscuros de la luna.
de esencias posadas en los versos,
de luchas anodinas y fraguas de la esencia,
de los fuegos que limpian,
de la pureza que exquisita se proclama,
de la magia que en una caja esconde su nombre,
de mi ser que en sus instintos es y renace vida,
del valor sin guerra,
de un suspiro que entre las fauces de un destino se enciende.
Vida que baila asustada con la muerte,
entresaca el destello de la pureza
y alienta los caminos rotos, las virtudes, las noblezas,
y esconde el sin fin de lágrimas y de levedades
para compaginar el destello del perpetuo con la existencia.
Un aliento que entrecortado y obsoleto
proclama la astucia del sinsentido
para firmar los pactos de nobleza
de ese ser que sin merecer se sienta en la mesa de los dioses
y espera agradecido en la distancia
el instante del verdadero encuentro
de la mística perfilada de justicia.
De ese tú y de ese yo, que sin disfraces
se besen en los oscuros de la luna.