Editorial Alaire

Sería mejor apagar las penas,
Las miserias y lo más oscuro de nuestro ser,
Aunque sabes que de noche
Tendrás que encender alguna luz
Cuando el miedo te derrumbe por dentro.

Tienes dos opciones, dos:
Un golpe de estado en tu cabeza,
O aguantar al último aliento,
Aguantar en soledad tu último instante.
Te encontrarán muerto al amanecer.

La desesperación tiene dos formas, dos:
La muerte de los artistas
O la de los espectadores inertes.
Yo me reuniré con vosotros
En el amanecer de los condenados.

La vesania practicó el onanismo con esta oda.
Un saludo.

Me ha gustado mucho esta entrega, el desconsuelo de la soledad del creador, y sus estrategias por atravesar el túnel impreciso de una noche implacable, y el amanecer entonando la resistencia, aunque se vista de abandono. Condenados pues, habrá que tararear engaños al premonitorio día.
Un abrazo Kersenta

Querido amigo kerseta, tendrías que incluir la opción tres la de la luz y la vida

Mil besos y mil gracias

Curra