Editorial Alaire

El aliento que resurge de sí mismo, que abrazado a la nostalgia comprende sus heridas.
Amar ese beso que callado dice lo que el alma oculta cuando los ojos se acercan
o el único que entre tus mentiras siento, agonizando tu ausencia
o el que respiro cuando te marchas,
e inocente se acerca desnudo de sus mañanas y vivo entre suspiros consuela
o leve acaricia mi sombra, destronando cualquier rama,
apagando le levedad de la magia que un camino enciende.

El que queriendo comprende sus ritmos
mirando sorprendido en dirección a la vida y sumando la verdad a su olvido
anidando la distancia en las sombras de la noche que inválida ilumina
componiendo los notas de un susurro, que entre los ventanales se adormece
o aflorando esa daga que en el cuerpo se pierde
y prolonga la vida a su instante, marcando una huella
en el umbral de la pasión eterna.

Amando siempre
para apagar los dulzores de esa calma,
los estigmas del arpa,
las levedades de la nada,
los murmullos del caminante asustado,
el dolor de las entrañas,
las rocas del mar que ama
o el vacío, que entre los brazos se marcha.

Sale de la Sala de Espera.

Arriba con esta sentida propuesta de Curra.

Muchas gracias rafael
Mil besos

Curra

Me ha gustado este poema tuyo, Curra. El sentimiento es real, auténtico, y se derrama como un río de sangre. Hermoso.

Un abrazo grande.
Óscar

Es una catarata de expresividad como todas a las que nos tienes acostumbrados. Poesía autentica, sin trampas ni cartón.
Un placer de lectura.

Un fuerte abrazo.

curra anguiano escribió:



El aliento que resurge de sí mismo, que abrazado a la nostalgia comprende sus heridas.
Amar ese beso que callado dice lo que el alma oculta cuando los ojos se acercan
o el único que entre tus mentiras siento, agonizando tu ausencia
o el que respiro cuando te marchas,
e inocente se acerca desnudo de sus mañanas y vivo entre suspiros consuela
o leve acaricia mi sombra, destronando cualquier rama,
apagando le levedad de la magia que un camino enciende.

El que queriendo comprende sus ritmos
mirando sorprendido en dirección a la vida y sumando la verdad a su olvido
anidando la distancia en las sombras de la noche que inválida ilumina
componiendo los notas de un susurro, que entre los ventanales se adormece
o aflorando esa daga que en el cuerpo se pierde
y prolonga la vida a su instante, marcando una huella
en el umbral de la pasión eterna.

Amando siempre
para apagar los dulzores de esa calma,
los estigmas del arpa,
las levedades de la nada,
los murmullos del caminante asustado,
el dolor de las entrañas,
las rocas del mar que ama
o el vacío, que entre los brazos se marcha.

Hermoso poema, querida amiga, Curra. Gracias, por haber compartido.
Un beso.
BEGOÑA.

Muy buen poema que entre las sombras va pintando un cuadro a LEJANÍA, el ir y venir de un querer.
Sentido y amoroso.

Saludos amiga.

Sentido y sensible poema el que nos arrojas. Lleva tu sello inconfundible.
Un abrazo, amiga.
J. Manuel

Muchas gracias oscar y mil besos

Curra

El primer verso de la última estrofa, lo define todo amiga, me ha gustado mucho, un abrazo y un beso.

Curra


Corren los versos en un mundo de brillo y amor



Hermosos... te felicito


Un abrazo fuerte

Muchas gracias Manuel, Mil besos

Curra

Gracias begoña, mil besos

Curra

Jose manuel, eres un cielo, ademas de guapisimo, que eso también alegra el día
Mil besos

Curra