Editorial Alaire

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Siguió tratándolo igual, parpadeando su nombre, tomando sus manos a la hora de la merienda para decir: estoy, amor, he venido a buscarte. Matías parecía esperar con la mirada ensimismada, las manos sobre las rodillas, la vieja gabardina abierta, sin corazas. Ella se mostraba atenta y le contaba cosas al oído como si él pudiera saber de qué iban sus secretos a media voz. Hablaba de otros, de los perros daneses que criaron juntos, de aquel sol retórico que acababa iluminando los murales, de muchos libros en común, de paisajes en blanco y negro, de propósitos y tangentes, de planes para exonerar los sentimientos de sus castradas investiduras. Si Matías apagaba las luces del pasillo o si tomaba su medicina nocturna, era observado con ilusión; a ella le desbordaba el amor cada minuto, cada milésima de tiempo que rozaba a su lado. Nada costaba demasiado si era por complacerle, nada tenía valor si no era con él, mecida en su abrazo, viva en el hoyuelo de su mentón. No tardaron en ocupar los espacios del jardín interno con sus figuras enlazadas y una comunión de gestos.No tardaron tampoco en descubrir la historia que fundaba el relato... Matías era el hermano gemelo que había sobrevivido la guerra, aunque el daño cerebral fuese un detalle penoso e incontable. El otro, el amado, el dueño de todos los recuerdos, era solo memoria lejana, un crespón de luto, en las líneas de este pequeño cuento.
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¡Precioso relato! Una descripción con precisión de orfebrería. Ni una sola palabra demás. Se lee con ganas, con curiosidad, con ansiedad. Y se sale de él complacido, agradecido, sobrecogido. Lo que has escrito, amiga, es una obra de arte. Me ha dejado anonadado.

Un saludo con aplausos efusivos.
Óscar

Óscar Distéfano escribió:¡Precioso relato! Una descripción con precisión de orfebrería. Ni una sola palabra demás. Se lee con ganas, con curiosidad, con ansiedad. Y se sale de él complacido, agradecido, sobrecogido. Lo que has escrito, amiga, es una obra de arte. Me ha dejado anonadado.

Un saludo con aplausos efusivos.
Óscar

Muchísmas gracias por tu reflejo más que generoso, Óscar. El amor a veces travieso, poco oportuno quizás, casi siempre autodidacta. Quise recrear la causalidad-casualidad de los retornos vitales.
La imagen que coloqué como ilustración pertenece a una serie de grabados de Olga Levina ( artista rusa) inspirados en los personajes del Señor de los Anillos, los cuales aparecen como arcanos mayores del Tarot.

Recibe mi abrazo fuerte, querido amigo; un honor tu apreciación y lectura.

Esta reflexión del amor que haces querida Hallie, me ha ido atrapando, la forma en la que has ido trabajando el tema de la identidad. El reflejo acaba conviertiéndose en la realidad, como si la imagen del espejo pudiera finalmente atravesar y volverse el presente. Incluso la presencia de una dificultad mayor en la comunicación no es más que un pretexto para tejer más puentes que enlacen esa salvación al lastre del recuerdo vivo, quizás incluso fuera el mejor medio, exento de preguntas.
Uno va tejiendo la historia que no es contada entre la introducción y el desenlace final. La ausencia que se ve ocupada, el recuerdo que toma forma. Y se abren interrogantes inevitables, en si hubo una causa de este amor, si existe una causa, y si esa causa finalmente importa o no. Se ama, y el punto de partida desaparece. Y el amor toma la forma de un presente que se extiende sobre si mismo.
Me emociona leerte y encontrar tus obras querida amiga, siempre llenas de profundidad y sensibilidad. Me ha encantado.
Un beso grande

Ventura Ramos López escribió:Esta reflexión del amor que haces querida Hallie, me ha ido atrapando, la forma en la que has ido trabajando el tema de la identidad. El reflejo acaba conviertiéndose en la realidad, como si la imagen del espejo pudiera finalmente atravesar y volverse el presente. Incluso la presencia de una dificultad mayor en la comunicación no es más que un pretexto para tejer más puentes que enlacen esa salvación al lastre del recuerdo vivo, quizás incluso fuera el mejor medio, exento de preguntas.
Uno va tejiendo la historia que no es contada entre la introducción y el desenlace final. La ausencia que se ve ocupada, el recuerdo que toma forma. Y se abren interrogantes inevitables, en si hubo una causa de este amor, si existe una causa, y si esa causa finalmente importa o no. Se ama, y el punto de partida desaparece. Y el amor toma la forma de un presente que se extiende sobre si mismo.
Me emociona leerte y encontrar tus obras querida amiga, siempre llenas de profundidad y sensibilidad. Me ha encantado.
Un beso grande

Querido amigo, ante todo muchas gracias por tu tiempo de amabilísima lectura.
Los puentes del encuentro, predeterminados o extrañamente casuales, son hilos conductores en las dinámicas mundanas. Muy fuertes y complejos algunas veces, lineales y sumisos otras más. El Amor como salvedad del hombre, del humano referente, del ojo pensante, tan subjetivo y débil frente a las circunstancias.

Abrazo enorme y felicidad.

PD: He leído en un comentario tuyo la mención que haces de Juan José Millás. También es uno de mis escritores admirados; lo seguí muy de cerca con sus articuentos en el año 2004 en el foro de cultura del diario argentino La nación. Inteligencia fina, genio inspirador. Celebro esta magnífica coincidencia.

"viva en el hoyuelo de su mentón"

Esta sola frase contiene una belleza y una ternura indescriptibles. Todo el relato está salpicado de gotas de prístina poesía: "parpadeando su nombre", "sol retórico", etc. Lo que has explicado sobre la ilustración y los personajes de 'El Señor de los Anillos' me ha parecido muy interesante.

Un fuerte abrazo, Hallie.

Óscar Bartolomé Poy escribió:"viva en el hoyuelo de su mentón"

Esta sola frase contiene una belleza y una ternura indescriptibles. Todo el relato está salpicado de gotas de prístina poesía: "parpadeando su nombre", "sol retórico", etc. Lo que has explicado sobre la ilustración y los personajes de 'El Señor de los Anillos' me ha parecido muy interesante.

Un fuerte abrazo, Hallie.

Óscar, muchísimas gracias por tu lectura atenta y solidaria.
Creo que la idea que alguien pueda sustituir a otro (estar en un lugar destinado a otra presencia) está reñida con la genuina perfección del amor como emoción inconsciente; sin embargo, quise esbozar cómo la psique puede engañar a destajo, convencer, percibir selectivamente, anidarse en el mullido sofá de los deseos y todo eso sin restar ni un ápice a la verdad del impulso sentimental.

En cuanto a la serie de dibujos de Olga Levina me parecen hermosísimos. Te dejo aquí un enlace a su página: http://sceithailm.deviantart.com/

Abrazo fuerte y felicidad.

Hola Hallie: tras leer el sustituto, me sentí algo triste, pues me recordó un amor, el primero, despues varias veces he amado sin lograr sustituir su recuerdo, y es que cuando se ama no encuentras sustitucion, porque los restantes son cariño, amistad, atraccion, he incluso egoismo por gustar, pero pocos son el amor que en tu escrito expresas. gracias por hacerme recordar. un abrazo.

Malak D. Ffiomme escribió:Hola Hallie: tras leer el sustituto, me sentí algo triste, pues me recordó un amor, el primero, despues varias veces he amado sin lograr sustituir su recuerdo, y es que cuando se ama no encuentras sustitucion, porque los restantes son cariño, amistad, atraccion, he incluso egoismo por gustar, pero pocos son el amor que en tu escrito expresas. gracias por hacerme recordar. un abrazo.

Malak, agradezco mucho tu atención y lectura. Llevas razón, no hay sustitución posible en el Amor verdadero; si pueden haber espacios a medio llenar, intentos de nuestra conciencia para revivir el corazón y mitigar las faltas.

Saludos cordiales.

Querida Hallie, tu relato es esencia amorosa que destila imágenes ricas y polivalentes. Cuánta ternura en la mirada de unos ojos que no te molestas en describir, ojos atemporales sin color ni edad, tantas historias sugeridas con tan pocos elementos... dualidad real o aparente (lo mismo da) del Matias amado en un cuerpo demenciado. Cuentas o cantas... dices o insinúas... el relato arrulla hasta la total vigilia en tu mundo real imaginado.

Poco tiempo tengo ahora para frecuentar este foro agigantado, me ocupa, además de mi trabajo en este enloquecido país que me amamanta, el montaje de algunas de mis piezas de teatro. Hoy no pude dejar de detenerme y dejarte, como insigne embajadora, mi cariño y sentido fiel de pertencia a todos los amigos de esta casa.

Un muy fuerte abrazo querida amiga.

Arturo Rodríguez Milliet escribió:Querida Hallie, tu relato es esencia amorosa que destila imágenes ricas y polivalentes. Cuánta ternura en la mirada de unos ojos que no te molestas en describir, ojos atemporales sin color ni edad, tantas historias sugeridas con tan pocos elementos... dualidad real o aparente (lo mismo da) del Matias amado en un cuerpo demenciado. Cuentas o cantas... dices o insinúas... el relato arrulla hasta la total vigilia en tu mundo real imaginado.

Poco tiempo tengo ahora para frecuentar este foro agigantado, me ocupa, además de mi trabajo en este enloquecido país que me amamanta, el montaje de algunas de mis piezas de teatro. Hoy no pude dejar de detenerme y dejarte, como insigne embajadora, mi cariño y sentido fiel de pertencia a todos los amigos de esta casa.

Un muy fuerte abrazo querida amiga.

Mi querido amigo, cuanta generosidad me llega con tus palabras. Gracias miles por tu sensibilidad y apoyo. La dualidad real o aparente (lo mismo da), me encanta esa lectura tan cercana al pensamiento que inspiró el cuentito.
Mucho éxito con las obras de teatro, quizás podrías colocar un enlace en Alaire de los comentarios de prensa o algo así. Y fuerza, toda la fuerza del mundo, para sobrellevar la dolorosa situación nacional.

Te esperamos con los brazos abiertos, querido compañero.

Abrazo enorme.