Es una carta que advierte de los peligros que entrañan los celos, tal como nos hace ver Tigana en su relato.
Ojalá haya conseguido mi propósito de reflejar algo de eso.

¿FIN?
AMOR-ÉL
Ahí estaba ella tal y como yo la he amado siempre: desnuda, silenciosa e inmóvil. Con el rigor mortis ya acentuado. Nos veremos en el infierno, pero te esperaré a medio camino: en tu purgatorio.
AMOR-ELLA
Siempre he querido conocerme, obsesionada por mi propia personalidad, he querido ahondar muy adentro, hasta mis entrañas, ahí de donde sale el sentimiento. Y mi mejor amigo, él, ayer me abrió en canal y sacó mi estómago solo para que lo viera, después siguió por los intestinos, el corazón, mis pulmones. Nada quedó adentro.
AYER-EL DE SIEMPRE
Me avisaron que te habías ido y no me lo podía creer, ¿cómo pudiste?, dime ¿por qué me dejaste por él? Cuando vi tu cama vacía no me di cuenta. Y hasta ayer no me di cuenta de que lloraba por tu ausencia.
POR QUÉ-ÉL
El porqué lo hice, no me lo pregunten que no lo sé, supongo que me aburría y espero haberme divertido, no lo sé. Porque de estos barrotes ya no puedo escapar. ¿Que cómo lo hice? no lo recuerdo, pero lo único que sé es que es seguro que yo lo hice y no sé los porqués.
FIN
TIGANA