Editorial Alaire

Esperaba, como el niño espera el pan con chocolate,
esa hora verdinegra en que se amagan los linces,
esa hora en que el dondiego hace mutis
y repliega
hasta el día de mañana;


verano,
esa hora de sobre seis en punto.

Porque era su tarea la más dulce de los mundos:
Pastorear las estrellas
en clik,
cuando verdinegra hora,
y clak,
sobre seis en punto.

Agosto la reclamaba sobre el catorce y el quince,
toda noche,
toda entera hasta que desperezaba Alba...
clik-clak...
clik-clak...
... clik-clak....

lluvia de estrellas toda así,
tan toda ella,

esas horas.





( Clik-Clak, la magia inacabada e infinita de los sueños en la infinita e inacabada hora de Adolescencia. Siempre en tí, mediterráneamente)

Original y refrescante poema como todos los tuyos, con desplazamientos voladores, verdinegros.
Ha sido un placer leerte.

Un fuerte abrazo.

Concha Vidal escribió:Esperaba, como el niño espera el pan con chocolate,
esa hora verdinegra en que se amagan los linces,
esa hora en que el dondiego hace mutis
y repliega hasta el día de mañana;


verano,
esa hora de sobre seis en punto.

Porque era su tarea la más dulce de los mundos:
Pastorear las estrellas
en clik,
cuando verdinegra hora,
y clak,
sobre seis en punto.

Agosto la reclamaba sobre el catorce y el quince,
toda noche,
toda entera hasta que desperezaba Alba...
clik-clak...
clik-clak...
... clik-clak....

lluvia de estrellas toda así,
tan toda ella,

esas horas.





( Clik-Clak, la magia inacabada e infinita de los sueños en la infinita e inacabada hora de Adolescencia. Siempre en tí, mediterráneamente)

UN simpático poema, amiga Concha en el que solo faltan los clicks de famobil.

Un saludo desde mi Sevilla-

Miguel Angel.

Siempre diferente, con tu estilo inconfundible y tierno. Un placer
Besos
Pilar

Concha, tus poemas sobrevuelan el alma para posarse en los ojos, éste me ha gustado mucho, un placer amiga y un abrazo.

Concha me gustó mucho declamar este poema. Tiene un fabuloso ritmo remarcado por la onomatopeya.
También me vino a la cabeza el cuento El Principito por tu verso "pastorear estrellas".
Ha sido una grata lectura.

Recibe un cordial saludo

Armilo Brotón

Concha me ha gustado
Gracias

Besos

Curra

Nos saltamos la primavera y la eclosión de la vida y vamos al verano de la la alegría de vivir todo lo primero y joven. Más tarde supimos de lo efímero.
Salud.

Hermoso poema de Concha.

Concha Vidal escribió:Esperaba, como el niño espera el pan con chocolate,
esa hora verdinegra en que se amagan los linces,
esa hora en que el dondiego hace mutis
y repliega
hasta el día de mañana;


verano,
esa hora de sobre seis en punto.

Porque era su tarea la más dulce de los mundos:
Pastorear las estrellas
en clik,
cuando verdinegra hora,
y clak,
sobre seis en punto.

Agosto la reclamaba sobre el catorce y el quince,
toda noche,
toda entera hasta que desperezaba Alba...
clik-clak...
clik-clak...
... clik-clak....

lluvia de estrellas toda así,
tan toda ella,

esas horas.





( Clik-Clak, la magia inacabada e infinita de los sueños en la infinita e inacabada hora de Adolescencia. Siempre en tí, mediterráneamente)

Gran originalidad, simpatía, jovialidad! me ha encantado decir en voz alta click clack.