Editorial Alaire

Es un poema muy bello, Enrique, es pasional, pero en él hay una terrible insistencia descrita, algo que llega desde adentro con todas las vísceras abiertas, hablas de amor sí, pero lo que se siente es el puñal y la daga, la herida a flor de piel para la que no tienes cicatriz. Y hay belleza en ese dolor, es bello sí y es dolor,es a través del dolor que reconocemos a veces el amor, pero no hay fracaso, no cabe nunca en el amor...
Me ha gustado mucho la exaltación de sentimientos contrapuestos, va dibujando con mano firme el arrebato, la insistencia desde el tú al yo, desde el yo al ella...me ha gustado mucho y creo que es uno de los mejores poemas que te he leído. el título es soberbio.

Abrazos,

Carmen

Me ha gustado mucho, Curra, que hayas resaltado esos versos, están entre los más entrañables del poema, y, desde luego, soy yo quien debe darte las gracias a ti.

Un abrazo.

Mensaje intenso y visceral el que me llega de este buen poema que nos dejas Enrique. Me gustó

saludos

rafael

Un poema hermoso e intenso, con un ritmo muy logrado. Enhorabuena y un abrazo.

Muchas gracias, Miguel Ángel, por lo mucho que me dices en pocas palabras.

Un abrazo.

Dejarse llevar y verterse en este chorro lírico. Me ha encantado.
Un abrazo.
Pepa

Siempre es para mí un honor, Chambonnet, recibir tus palabras y sentir esa predisposición tan positiva con la que acoges todo lo que escribo.

Un abrazo.

Gran maestría y dominio de la expresión. El ritmo, exquisito, y la tensión que genera la vehemente descripción de los interiores del sentimiento abrazado de amor, hacen que nos percibamos vivos, inquietamente vivos. Estupendo.
Salud.

Gracias, Marisa, me dices esa cosas que siempre agradan escuchar, hice lo que pude y comentarios como el tuyo ayudan a reafirmarse.

Un abrazo.

Gracias, Ferreiro, toda palabra que me llega de ti tiene un gran significado, me detengo en tu amabilidad y ese tono entrañable en el que te expresas.

Un abrazo.

Como una herida abierta gocé tu humor de lunes
tu reino sin corona, tu voz de sacrilegio,
y sufrí tus caricias.


Magnífica la reconstrucción en el ardoroso devenir de los principios, una manera de ganar tiempo sobre el olvido, porque necesariamente una herida es tiempo, un camino que se salda con más espacio, pero la memoria es un planeta exiguo y duele, a veces.

Tus letras siempre me regalan escenarios fértiles donde dejar palabras, sanas o heridas, pero en fin, todo por el bien de la poesía.

Gracias por compartir tu arte.

Un abrazo con admiración.

Ricardo

Muchas gracias, Judit, me alegra mucho que hayas visto así el poema.

Un abrazo.

Francamente bueno. Este poema llega y se disfruta, por su habilidad, por su musicalidad, por sus ideas
que son muy agradables. Ha sido un placer leerte.

Un fuerte abrazo.

Ha sido un placer la lectura de tu poema compañero F. Enrique.
Has logrado mi acercamiento a la herida y que sienta la pulsación de tus versos.

Bien elegido el título, predispone a lo llega después perfectamente.

Recibe un cordial saludo.

Armilo

Me ha encantado el poema, estimado amigo Enrique, y las ultimas dos estrofas me parecen magnificas, una belleza desgarradora, que no acepta el olvido. Recibe mis abrazos sinceros y felicitaciones.