Editorial Alaire

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Un breve nítido, concentrado y hermoso, Tigana.
Los rostros internos del espejo humano; fascinación de infinito trayecto.

Enhorabuena y gracias por compartir.

Hallie Hernández Alfaro escribió:Un breve nítido, concentrado y hermoso, Tigana.
Los rostros internos del espejo humano; fascinación de infinito trayecto.

Enhorabuena y gracias por compartir.

Por una vez quise que el protagonista tuviera otra oportunidad, atravesar el espejo y tener otra vida, buena o mala, pero diferente a la que había llevado.
Gracias por leerme y comentar.
Salud.

Tigana, tienes el color del cuento en tus dedos y sea reflexivo, de humor o descriptivo siempre es una delicia pasear entre tus palabras.
Me ha gustado mucho este cuento, no le falta ni una palabra para decir tanto.

Por una parte veo siento la soledad de la persona que se siente extraña a sí misma y lo describes con una imagen fantástica:

"Corrió hacía un espejo con ansias de encontrarse; horrorizado se vio frente a unos ojos que desconocía y unos labios que no sentía. ¡Nada de aquel rostro le era familiar! " y la que sigue en el siguiente párrafo: ya ni se huele el café.

No somos nosotros sin relación con el otro, que en cierta medida nos da unas dimensiones, hasta físicas, distintas.

Por otro lado veo una reflexión personal sobre el cambio y la tristeza de vivir sin ilusión.
Pasamos al otro lado del espejo, como Alicia, para evadir esta angustia.

Un cuento digno de leerse muchas veces como yo he hecho y haré.

Mi enhorabuena. Sigue escribiendo así.

Un beso

emPerro

Armilo Bretón escribió:Tigana, tienes el color del cuento en tus dedos y sea reflexivo, de humor o descriptivo siempre es una delicia pasear entre tus palabras.
Me ha gustado mucho este cuento, no le falta ni una palabra para decir tanto.

Por una parte veo siento la soledad de la persona que se siente extraña a sí misma y lo describes con una imagen fantástica:

"Corrió hacía un espejo con ansias de encontrarse; horrorizado se vio frente a unos ojos que desconocía y unos labios que no sentía. ¡Nada de aquel rostro le era familiar! " y la que sigue en el siguiente párrafo: ya ni se huele el café.

No somos nosotros sin relación con el otro, que en cierta medida nos da unas dimensiones, hasta físicas, distintas.

Por otro lado veo una reflexión personal sobre el cambio y la tristeza de vivir sin ilusión.
Pasamos al otro lado del espejo, como Alicia, para evadir esta angustia.

Un cuento digno de leerse muchas veces como yo he hecho y haré.

Mi enhorabuena. Sigue escribiendo así.

Un beso

emPerro

Alicia en el pais de las Maravillas (mi cuento favorito) está muy presente en este relato. Hay muchas realidades y no todas están en este mundo, así que ¿por qué no romper espejos, abrir puertas y saltar al vacío?
Muy acertada esta frase:
No somos nosotros sin relación con el otro, que en cierta medida nos da unas dimensiones, hasta físicas, distintas.
En realidad es un grito a la libertad.
Gracias por este comentario tan pleno.
Beso.