Editorial Alaire

Sus blancas manos sostienen el panal,
la compacta cera que derrama la savia.


De su rostro sagrado gotea la luz.
Es sólo una niña: la dulce Elisa.


Las abejas danzan con alegría,
libando de su boca y oídos
la edad blanda de la inocencia.


Desde su insondable calma,
la bondad contempla el horror.


Elisa nos mira con cierta compasión,
sus labios son nuestra dulce miel:


El alimento de los dioses, enajenados,
que fenecen en un barro callado.

Mi sentimiento sintoniza con este hermoso poema. Me gustó leerte
Besos
Pilar

Mi sentimiento sintoniza con este hermoso poema. Me gustó leerte
Besos
Pilar

Pilar Morte escribió:Mi sentimiento sintoniza con este hermoso poema. Me gustó leerte
Besos
Pilar

Me alegro por la sintonía, Pilar.

Un abrazo.

Qué imagen más triste la de esos dioses observados desde la miel de la inocencia.
Me ha encantado el poema, Raul.
Un fuerte abrazo.

Miguel Ángel Martínez Góm escribió:Qué imagen más triste la de esos dioses observados desde la miel de la inocencia.
Me ha encantado el poema, Raul.
Un fuerte abrazo.

Me alegra de que te haya gustado, Miguel Ángel.

Otro abrazo para ti.

Raul Muñoz escribió:Sus blancas manos sostienen el panal,
la compacta cera que derrama la savia.


De su rostro sagrado gotea la luz.
Es sólo una niña: la dulce Elisa.


Las abejas danzan con alegría,
libando de su boca y oídos
la edad blanda de la inocencia.


Desde su insondable calma,
la bondad contempla el horror.


Elisa nos mira con cierta compasión,
sus labios son nuestra dulce miel:


El alimento de los dioses, enajenados,
que fenecen en un barro callado.

Siempre será un placer apreciado e ilustre poeta pasar por tus versos...


"Las abejas danzan con alegría,
libando de su boca y oídos
la edad blanda de la inocencia."


FRATERNAL ABRAZO... Gallnnet

Raul Muñoz, Me encanta como escribes y describes. Tu pluma dibuja.
Me gustó leerte.
Abrazos poeta.

Hermoso poema amigo Raúl, me ha gustado mucho, un abrazo.

Hermoso poema, Raúl. Suavidad y profundidad de la mano.

Un abrazo,

Judit

Raul Muñoz escribió:Sus blancas manos sostienen el panal,
la compacta cera que derrama la savia.


De su rostro sagrado gotea la luz.
Es sólo una niña: la dulce Elisa.


Las abejas danzan con alegría,
libando de su boca y oídos
la edad blanda de la inocencia.


Desde su insondable calma,
la bondad contempla el horror.


Elisa nos mira con cierta compasión,
sus labios son nuestra dulce miel:


El alimento de los dioses, enajenados,
que fenecen en un barro callado.

... lindo poema, Raúl, lindo; luce esa percepción de dandodr e inocencia que se cita como la luz-manantial de vida en el poema; y no es para menos, compañero, no es para menos; que Elisa nos siga iluminando versos de este calibre; mis saludos; Orión

Gallardo Chambonnet escribió:

Raul Muñoz escribió:Sus blancas manos sostienen el panal,
la compacta cera que derrama la savia.


De su rostro sagrado gotea la luz.
Es sólo una niña: la dulce Elisa.


Las abejas danzan con alegría,
libando de su boca y oídos
la edad blanda de la inocencia.


Desde su insondable calma,
la bondad contempla el horror.


Elisa nos mira con cierta compasión,
sus labios son nuestra dulce miel:


El alimento de los dioses, enajenados,
que fenecen en un barro callado.

Siempre será un placer apreciado e ilustre poeta pasar por tus versos...


"Las abejas danzan con alegría,
libando de su boca y oídos
la edad blanda de la inocencia."


FRATERNAL ABRAZO... Gallnnet

El placer es mío, estimado poeta Gallnnet, por contar con tu lectura y aprecio.

Un abrazo desde barcelona.

MIRTA ELENA TESSIO escribió:Raul Muñoz, Me encanta como escribes y describes. Tu pluma dibuja.
Me gustó leerte.
Abrazos poeta.

Gracias por tus generosas palabras. El placer es mío, Mirta.

Un abrazo.

Manuel Alonso escribió:Hermoso poema amigo Raúl, me ha gustado mucho, un abrazo.

Me alegro, Manuel, de que te haya gustado.

Un abrazo, amigo.

J. Paz escribió:Hermoso poema, Raúl. Suavidad y profundidad de la mano.

Un abrazo,

Judit

Gracias, Judit, por leerme. Me alegro de que te haya gustado.


Un abrazo.