Editorial Alaire

Mi velero, sin timón, con velas que entre suspiros callan,

mi brújula, suspendida, e imantada al espíritu de la nada,

un dolor, que sujeta en la cintura, a cada estigma de la calma,

un refugio, que quema la ausencia , amasando un color sin nostalgia,

y los lloros sin echo, que entre luces sin brillo, descartan.



Calma, que entre grietas, alumbra cactus, escaldando amaneceres,

palabras, que sin vida, escampan, arcoíris en negro, sin gris,

piedades, acuñadas sin carmesí, compañías que demoran soledad,

escombros, que apilan rotos y trampas, sin luces, ni tiempos, sin descubrir,

pasiones desnudas de cuerpos, bailando un vals con sus deseos muertos.



Aguaceros de cansancio, que no llueven ni nombres, destronados de un cuento,

latidos del egoísmo que deambulan, esa colección de dichos sin causas,

suplencias de frio, mantas que vacías de ternura y aire no tapan,

un tiempo, que se ahoga en el segundo que transcurre y lento mata,

el murmullo de la vida, que se acuna entre, la soledad y el dolor

A veces mecidos, a veces vapuleados por la vida, así navegan tus versos el proceloso océano de la poesía. Un abrazo.
Salud.

Me ha gustado mucho este murmullo de la vida, amiga Curra, donde encuentro versos sugerentes y hermosos.
Un abrazo.

un millón de gracias julio
mil besos

Muchas gracias Miguel Angel,
Un millón de besos

Mantas que vacías de ternura y aire no tapan

Muchos versos hermosos, siempre te lo digo, aún cuando haya un dolor profundo en ellos.
Me gustó leerte
Besos
Pilar

Gracias Pilar, eres un tesoro ,... y ya se que tbn siempre te lo digo
Besos
curra

curra anguiano, La vida que murmura en este mar cambiante... muy lograda entrega, curra!!

Un millón de gracias Carlos
Mil besos

muchas gracias

Un millón de gracias

Muchas gracias