Editorial Alaire

Nada como hablar,
cara a cara, con Dios,
del corazón y de la música,
desde este escenario y este micrófono
que ahora desenchufo.

Así es mi propio y fiel, indómito espíritu:

ya no le importa, después del éxito,
que sea estéril y hasta desdeñable
seguir flotando
como un pato de plástico
en una bañera
en el centro de París.

¿No es amor mío, donde más llueve?

Paris.
7 de junio de 1971,
Jim Morrison.
(The Dors).
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Estupendos versos, Manuel. Un placer pasar por ellos y recordar a Jim Morrison.
Fuerte abrazo.

Das en el clavo, compañero. Un gusto leerte
besos
Pilar

Gracias Miguel Angel, eres muy amable, un abrazo, amigo.

Me encanta el Rey Lagarto Manuel, su música y la intensidad de su vida (puede que desperdiciada), y tu poema me hizo recordar aquella tumba pequeña y simple donde descansa el mito.

Un abrazo.

Joder, amigo Alonso, has tocado uno de los mitos de mi juventud , madurez, y tambíen mito de la tierra y agua que nos espera.

Jim Morrison será siempre uno de los grandes líricos de nuestro tiempo.

Ese "The End" que citas, es una muestra de ello.

Entrañable homenaje a él y a los últimos días en su retiro de París.

Hace dos o tres años, estuvimos mi mujer, Elena, mi hijo Eugenio y yo , en su tumba en el cementerio de Pere Lachaise de París. Eugenio puso encima de la valla que separaba el túmulo, un móvil que lanzaba al silencio de la mañana las notas del L. A. Woman. Fue verdaderamente emocionante. Nunca lo olvidaré.

Un fuerte abrazo

Gracias Pilar eres un cielo, un beso, amiga.

Gracias Israel, eres muy amable, un abrazo.

Siempre es interesante volver sobre los mitos, demostrar que la poesía no pierde de vista a aquellos que se consideraron a sí mismos fundamentalmente poetas aunque se les recuerde por otras disciplinas con mayor repercusión mediática. Ese Paris, esa tumba nos lo indica de una manera escueta.

Un abrazo.

Precioso
Gracias

Muchas gracias Ferreiro, me alegra que haya tratado un tema que te entusiasme, aunque como sabes, tuvo un desenlace tristemente doloroso. Un abrazo amigo.

Gracias F. Enrique eres muy amable pasando por aquí, te lo agradezco y envío un fuerte abrazo.

Gracias Curra eres un cielo,un beso, amiga.