Editorial Alaire

En ti se abria el haz como un símbolo.

La mitad de tu cuerpo enseñoreaba las luces,
el arranque del parasol perdido
en el corazón por descubrir
de la niebla.

Ese es el principio,
una duda que crece en los hogares azules,
el hambre de una memoria joven
sin alguaciles ni perdón.

Sí,
libres en la sombra de los ojos cansados,
en los soportales bendecidos por la lluvia,
en el robusto vientre de la noche.

Detrás de la bondad, el amor se agita en olas o en luz,
da igual si su mapa es la fe de los relojes
o el furor oscuro del destino.

¿Volverás al recibidor donde la magia atisba
el silencio que no hablaste, la dormida piel
que de pronto envejece?

Hay caminos que no encuentran la dicotomía
de una pérdida, el abrazo imperfecto de la culpa,
los terribles aullidos de la ausencia.

Hoy que las hojas duermen al fin su estío
pienso en el temblor de aquellos dias de luz inacabable,
en el mar tempestuoso, en el fruto de una piel
entregada al delirio, en el sexo que brilla
como un jardín que tú has poblado.

Hoy que las hojas duermen al fin su estío
pienso en el temblor de aquellos dias de luz inacabable,
en el mar tempestuoso, en el fruto de una piel
entregada al delirio, en el sexo que brilla
como un jardín que tú has poblado

fantástico final para un hermoso poema.
Nostalgia de juventud
precioso

Hermoso poema, Ramón, rebosante de nostalgia y versos que penetran.

Ramón, en tu voz, hasta la reminiscencia del pasado surca espacios aéreos, maravillosos y todo luce como perfecto... bravo, poeta.

Mi abrazo y afecto. Mitsy

Hermoso poema amigo, Ramón, siempre transmites en tus versos esa belleza que todos buscamos, un placer y un abrazo.

Nos deleitas con tus hermosos versos en los que es fácil detenerse para saborearlos plenamente.
Besos
Pilar

En tu línea Ramón, personal e intransferible y de notoria estética literaria. Disfruté de tus versos

saludos

rafael

curra anguiano escribió:Hoy que las hojas duermen al fin su estío
pienso en el temblor de aquellos dias de luz inacabable,
en el mar tempestuoso, en el fruto de una piel
entregada al delirio, en el sexo que brilla
como un jardín que tú has poblado

fantástico final para un hermoso poema.
Nostalgia de juventud
precioso

Gracias, Currra, por tu amable comentario. Un abrazo.

F. Enrique escribió:Hermoso poema, Ramón, rebosante de nostalgia y versos que penetran.

Gracias, F. Enrique, por leerme y comentar. Un abrazo.

Mitsy Grey escribió:Ramón, en tu voz, hasta la reminiscencia del pasado surca espacios aéreos, maravillosos y todo luce como perfecto... bravo, poeta.

Mi abrazo y afecto. Mitsy

Gracias, Mitsy, por tus amables palabras. Un abrazo.

Manuel Alonso escribió:Hermoso poema amigo, Ramón, siempre transmites en tus versos esa belleza que todos buscamos, un placer y un abrazo.

Muchas gracias, Manuel. Un abrazo.

Ya te lo había leido en el blog, Ramón, preciosa lluvia de metáforas.
Un abrazo

María José Honguero Lucas escribió:Ya te lo había leido en el blog, Ramón, preciosa lluvia de metáforas.
Un abrazo

Muchas gracias, Maria José. Un abrazo.

"Hoy que las hojas duermen al fin su estío
pienso en el temblor de aquellos dias de luz inacabable,
en el mar tempestuoso, en el fruto de una piel
entregada al delirio, en el sexo que brilla
como un jardín que tú has poblado."

Magnífica esa última estrofa. Tu poesía es una celebración para los sentidos, un ágape de imágenes y metáforas de todas las formas y colores, con asociaciones surrealistas e inverosímiles y una mesnada de jinetes azules que relampaguean como un rayo coruscante. Reconozco que yo siempre me he identificado con tu forma de hacer poesía, que la siento muy próxima a mi ideal de belleza poética, y me consta que Sara también disfrutaba de ella.

Un abrazo, Ramón. Me alegra volver a coincidir contigo en los foros.

Óscar Bartolomé Poy escribió:"Hoy que las hojas duermen al fin su estío
pienso en el temblor de aquellos dias de luz inacabable,
en el mar tempestuoso, en el fruto de una piel
entregada al delirio, en el sexo que brilla
como un jardín que tú has poblado."

Magnífica esa última estrofa. Tu poesía es una celebración para los sentidos, un ágape de imágenes y metáforas de todas las formas y colores, con asociaciones surrealistas e inverosímiles y una mesnada de jinetes azules que relampaguean como un rayo coruscante. Reconozco que yo siempre me he identificado con tu forma de hacer poesía, que la siento muy próxima a mi ideal de belleza poética, y me consta que Sara también disfrutaba de ella.

Un abrazo, Ramón. Me alegra volver a coincidir contigo en los foros.

Muchas gracias, Óscar, por el comentario tan amable que me dejas. Me alegra saber que Sara disfrutaba con mi humilde poesía, con total sinceridad te puedo decir que yo también disfruté y disfruto con la suya. Un fuerte abrazo.