Editorial Alaire

A veces, la rosa muerta invade la razón
y duerme ignorante de mi pensamiento ácido.

A veces quiero decirle cuatro cosas
verdades imperiosas, apretarle la garganta
y mandarle flores menos frías y taimadas.

El hielo rompe a veces las risas hipócritas
y luego sirve su mesa con cadáveres lúcidos.

Pero de vez en cuando, sólo a veces
un brote solitario habla sin dirigirme la palabra
y el dolor sonríe para derramar poemas cenicientos...
y gritos.

Un poema del quedan restos hermosos, así es el pensamiento y la vida.
Abrazos
Pilar

Hola amiga lejana, es un gusto leerte de nuevo, sentir que estás en forma y disfrutar de tu presencia.
Te dejo un abrazo muy fuerte y te deseo un año espléndido, Liz.

Un poema esencial, maravillosamente plasmado. Un placer enorme aplaudir tu poética, querida Liz.

Abrazo con admiración y afecto.

Pilar Morte escribió:Un poema del quedan restos hermosos, así es el pensamiento y la vida.
Abrazos
Pilar

Muchas gracias por acudir a leerme, querida poeta. Lo aprecio inmensamente.
Un beso

Manuel Sánchez escribió:Hola amiga lejana, es un gusto leerte de nuevo, sentir que estás en forma y disfrutar de tu presencia.
Te dejo un abrazo muy fuerte y te deseo un año espléndido, Liz.

Amigo cercano (así te siento), gracias infinitas por dedicar tu tiempo a este intento de poema.
Bienaventuranzas para ti y los que amas en este 2015.
Te envío un abrazo y un beso

Buen poema, Liz. Lo he disfrutado. Besos.

Liz Barrio. escribió:A veces, la rosa muerta invade la razón
y duerme ignorante de mi pensamiento ácido.

A veces quiero decirle cuatro cosas
verdades imperiosas, apretarle la garganta
y mandarle flores menos frías y taimadas.

El hielo rompe a veces las risas hipócritas
y luego sirve su mesa con cadáveres lúcidos.

Pero de vez en cuando, sólo a veces
un brote solitario habla sin dirigirme la palabra
y el dolor sonríe para derramar poemas cenicientos...
y gritos.

Me gusta este bouquet de heridas emociones. Haces un twist a los poemas románticos y su gesto de flores bañadas de lozanas monerias. Aquí las flores ni su memento surten el artificio. Hermoso poema Liz! Abrazos, ERA

Restos de mucha nostalgia, impecable.
Un placer leerte Poeta.
Abrazos.

Pero de vez en cuando, sólo a veces
un brote solitario habla sin dirigirme la palabra
y el dolor sonríe para derramar poemas cenicientos...
y gritos.

que inmenso suena escrito tu enfado
m hermoso gracias

No recuerdo, Liz, la última vez que estuvimos en contacto, pero me alegro mucho de volver a verme cara a cara con tu poesía y poder enfrentarme a esa elegancia con la que te desenvuelves.

No recuerdo, Liz, la última vez que estuvimos en contacto, pero me alegro mucho de volver a verme cara a cara con tu poesía y poder enfrentarme a esa elegancia con la que te desenvuelves.